Capitulo 16

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Vibrante

¿Qué diablos es un vibrante?, ¿y porque Dorotea había desaparecido así después de decírselo a Connor?

-Connor...

-Ahora no Smoke- oh no, estaba loco si creía que esto se iba a quedar así.

-¿Ahora no?, ¡¿ahora no?!, ¡no puedes hablar enserio!, entiendo que no me termines de tragar, pero traerme con una loca a que se meta a mi mente y esperes que no haga nada, ¡realmente estas mal de la cabeza!- le grite histérica, pero es que estaba cansada de su actitud conmigo, como si fuera una maldita plaga cuando en ningún momento había herido a nadie.

-Necesitaba saber que no eras un peligro- estúpido.

-Creo que muy bien sabes que no lo soy, no le he hecho nada a nadie ni me he metido en jodidos problemas, ¿qué mierda buscas entonces?- y aunque seguía en el círculo había adquirido una posición retadora, en cualquier momento saltaría a golpearlo.

Sin embargo no contesto, no dijo nada, ni me miro.

-Dímelo Connor, ¿qué demonios buscas?- aun nada- ¡habla idiota!- sin movimientos-¡HABLA!- grite desde lo más profundo de mi pecho y logre que me mirara pero seguía sin decir nada- es por lo que paso en el bosque ¿cierto?-.

-No tienes ni idea ¡solo cállate ya!- sus ojos ardieron y pude ver un reflejo dorado cruzar por sus ojos un momento.

-Querías saber mi conexión con Gabriel- lo rete- tienes miedo de que por el no puedas hacerme nada, ¿no es así?-empezaba a provocarlo-tienes miedo de que tu alfa no te permita tocarme- jugué un poco más, y veía como su piel tomaba un color rojizo dándome a entender que se estaba enfureciendo y lo merecía- justo ahora tienes miedo de que todo lo que acabas de hacer llegue a sus oídos y tú te metas en un gran problema, ¿cierto?- solté las palabras lentamente, poco a poco, dándole tiempo de digerirlas una por una y aumentar su furia, y en todo este momento no había apartado su mirada de mí, su respiración se volvía pausada y pesada como si intentara contenerse, pero aunque sabía que estaba jugando con fuego, se merecía un poco de tormento en su mente y sabia justamente que iba a terminar de colmar su paciencia- o tal vez tienes miedo de lo que paso entre nosotros- su respiración se detuvo- ya sabes, tu hablando en mi mente- sonreí ladeada y malvada- tienes miedo de mí y de lo que sabes que puedo ocasionar- no me detuve cuando lo vi acercarse a mí- porque en el fondo sabes que ese momento, que tu pudiste hablar en mi mente, no es normal, y no has escuchado de nada igual, sabes que algo va a pasar entre los dos desde ese momento- me detuve junto con él ya que el también detuvo sus pasos, pero yo no había acabado-y sabes que me voy a aprovechar muy bien de absolutamente todo lo que pase, y será solo a mi favor- solté venenosa y logrando terminar de enfurecerlo con mis palabras.

Solté la bomba.

Y Connor exploto.

Todo fue demasiado rápido, ni siquiera tuve tiempo de reaccionar, y cuando menos lo esperaba fui lanzada con una fuerza inimaginable a una gran velocidad, aterrizando o más bien siendo detenida abruptamente por un árbol y casi pude escuchar como mis huesos se rompían por la inmensidad del impacto.

Y como buena sobreviviente mi primer instinto fue huir, pero parece que Connor se imaginaba que iba a hacer por lo que reacciono rápido. A este punto él se encontraba a una distancia considerable de donde estaba yo, sí que me había lanzado lejos.

-¡NI SE TE OCURRA SMOKE!- rugió el chico, si mi plan era enfurecerlo lo había logrado, y muy bien.

Camino a paso decidido a donde me encontraba aun intentando ponerme de pie, pero no me dio tiempo, pues ya lo tenía acorralándome contra el árbol y como ya es costumbre intentando ahorcarme.

-Querías cabrearme, bien, ¡lo lograste Smoke!- no sé si era mi imaginación o ya me estaba apretando demasiado y la falta de aire me estaba haciendo delirar, pero podía sentir que sus dedos (que se cernían sobre mi cuello) no se sentían como siempre, tenían algo diferente, tenían garras, y si lo que mi madre me había dicho acerca de los licántropos antes, era real, debería estar huyendo ya mismo.

-No so...soportas una verdad- no borre mi sonrisa, y no lo haría.

Se acercó hasta estar a una mínima distancia de mi cara, nuestros labios se rozaban, y su pesada respiración chocaba contra mi cara, seguía intentando contenerse.

-Voy a destruirte- dijo entre dientes.

-Quiero verte intentarlo- volvió a apretar su agarre.

-¡VOY A MATARTE!- me sobresalte.

-Suel...suéltame- dije con dificultad

-Ya no eres tan valiente cierto- se rio mostrando tus dientes-¿dónde quedo tu cinismo? ¿Eh?-gruñí en respuesta.

-Púdrete- hice una pausa y sonreí- no, sabes que, mejor no contamines y biodegrádate idiota-me soltó y tosí todo el aire que tenía retenido que buscaba salir.

-Me estoy conteniendo para no romper tu frágil cuello Alexa- aunque no sería la primera vez, no quería otra experiencia relacionada con la muerte.

-¿No que muchas ganas de quitarme del camino?- sonreí desde el suelo, ya que aún no me había podido levantar.

Falle en un intento de levantarme y todo el aire dentro de mí salió gracias a la patada que me acababa de propinar Connor, ahogándome por completo.

-¿Te sientes mejor?-susurre con el poco aliento que me quedaba- te pone feliz agredir a alguien que no se puede defender, ¡¿te sientes más hombre?!, no eres nada Connor, ¡NADA!- exclame.

-Esto querías, ¿no?-otra patada- ¡¿ESTO QUERIAS?!- otra patada.

Se comenzó a carcajear como un perfecto villano y yo empecé a toser sangre, demasiada sangre, me termine de recostar contra el árbol y alce mi cabeza mirando hacia el cielo, intentando llenar mis pulmones de aire, por un momento solo se escucharon mis jadeos.

El chico frente a mi se agacho hasta quedar a mi altura, tomo con su mano mi barbilla y me hizo mirarlo.

-Me convertiré en tu peor pesadilla- susurro cerca de mi rostro.

Y en ese momento hice lo único que se me ocurrió, escupí en su cara, en este caso, la sangre que aun seguía subiendo por mi garganta hasta llegar a mi boca. El cerro sus ojos al sentir la sangre correr por su rostro, y soltó mi barbilla para limpiar su cara y sacudirla quitando los excesos de sangre de ella, se rio como si esperara que eso hubiera sido una broma, y asentía como si tratara de convencerse de lo que iba a hacer.

Su mano volvió a dirigirse a mi dirección, esta vez trate de detenerlo al ver sus intenciones, con mis dos manos aplique fuerza tratando de empujarlo lejos, lo cual no sucedió, en lugar de eso el uso sus dos manos para empujarme contra el árbol y se subió a horcajadas sobre mí y en una extraña posición aprisiono mis manos en una parte de sus piernas que se encontraban a cada lado de mi cuerpo, y como ya es costumbre, comenzó a ahorcarme.

-Es curioso, dicen que perro que ladra no muerde, eres el vivo ejemplo de eso- aplico fuerza para separarme del árbol, y para no lastimarme más cedi a su fuerza, pero nada más me aparte unos centímetros, aplico fuerza de nuevo para golpearme contra el árbol, expandiendo un fuerte dolor por toda mi cabeza al cual solté un quejido casi inaudible- querías jugar ¿no?- no respondí, y volví a hacer el mismo movimiento de antes esta vez el dolor se hizo más intenso y grite con voz rasposa- ¡CONTESTA!- grito impotente, pero seguí sin decir nada.

Y entonces volvió a golpearme contra el árbol, y otra vez, y otra vez, y otra vez, para este punto ya sentía la sangre correr por mi nuca y un intenso pitido resonaba en mi cabeza, mi vista se hacía borrosa e iba perdiendo las fuerza, en cualquier momento me desmayaría.

Estaba agotada, entonces solo me deje ir.

-¡SUELTA A MI SOBRINA CONNOR!-.

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⏰ Última actualización: Dec 13, 2018 ⏰

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