Sólo es un desliz (Death Note Yaoi)

Capítulo nueve

Sábado

Mañana

No sé bien lo que ocurre, pero odio a todo el mundo hoy. Elle permanece tumbado a mi lado, dormido. En la noche, durante la película, se comió todo lo que encontró en casa, menos a mí, claro está.

Elle... Por alguna razón, no deseo que despierte y, por un momento, me imagino posicionando sigilosamente mi almohada sobre su cabeza.

Tarde

No para de hablar del proyecto que hace con Near, y me da náuseas. No podría asegurar que son celos, pero efectivamente no me siento bien, es como si quisiera que se callara, que se ordenase ese enmarañado cabello que lleva o que, al menos, dejase de sentarse de ese modo tan peculiar que acostumbra en ciertas ocasiones. Jamás había experimentado rechazo hacia su persona, y me está asfixiando en demasía su amabilidad.

Le oigo, no obstante, soy incapaz de escucharle. Veo mover sus labios, es todo.

Ya quiero ver la presentación de Beyond, necesito oxigenar la cabeza, quizás un poco de música me haga bien. De hecho, así fue como le conocí, cantando sobre un banquillo, sin micrófono y con una guitarra acústica en los brazos una fría tarde de otoño en un parque cerca de mi cafetería preferida. Fue una atracción a primera vista, en ese entonces sólo tenía dieciocho años. Su blanquecina piel irradiaba inocencia, una luz que con los años se ha ido extinguiendo.

Tarde-Noche

Nos cargamos una siesta con Elle después de comer con la que perdimos más tiempo de lo esperado. Dormir... nunca he sentido tantas ganas de dormir como ahora, y no está justificado, no hemos hecho nada fuera de lo que haría una pareja de cincuenta años.

Últimamente me siento mucho más cansado y soso, es triste pensar en ello siendo tan joven.

De un salto salimos de la cama, nos arreglamos (¿o me arreglé y él se puso zapatos?) y partimos hacia el bar. El espectáculo había comenzado hace diez minutos.

Noche

Me adentré en el lugar con urgencia, aliviado.

Me sorprendí a mí mismo percatándome de lo agradable que se sentía el ambiente; las luces cálidas, la limpieza, el sutil aroma a madera en el aire junto a una rústica decoración. Los fumadores se hallaban fuera con una cerveza y los otros, los que permanecían al interior, tenían la atención puesta en el escenario, allí lo vi. Me senté en una mesa cerca de una esquina algo alejada y ordené un White Russian mientras esperaba a que Elle acabase de estacionar el coche.

—Aquí les dejamos con MI AMANTE, de Los Vásquez —habló una chica pelinegra de cabello corto al micrófono en el escenario al costado de Beyond—, interpretado por Beyond Birthday. Esperamos que lo disfruten mucho —soltó sonriéndole, acariciando con suavidad su pelo antes de bajarse del platel. Oí los aplausos, la presentación ya llevaba un buen tiempo de iniciada por lo que infiero que el público ya está familiarizado con él.