Porque debes estar colandote entre mis más profundos sueños en donde soy una princesa y tu mi leal caballero de armadura blanca como la nieve.
Cuando despierto te siento algo distante pero te siento. Yo no pido un millón de rosas, está servidora sólo quiere que la ames de verdad como las aves a sus alas y los peces al mar.
Desatando un océano de palabras las cuales en ocasiones ni puedo pronunciar. Como desearía que mis sueños no se acabarán, porque a pesar de que odio los cuentos de hadas la idea de tenerte a mi lado no me desagrada.
Porqué me salvas aunque las noches y los días no nos permitan avanzar hacía el retorno del amanecer y la Luna creciente.
Se el escudo bajo el cual me siento protegida, que sean tus alas mi suave almohadon y tu voz la fuerza de está poesía a ese amor de ensueño.
