/Elsword\: A miracle?...

Epílogo

Elrios, un paraíso de especies en armonía con la naturaleza. El Edén mismo hecho tierra, donde la magia y la ciencia conviven y se complementan. El hogar de miles de personas que se esfuerzan por superarse, por evolucionar, y claro, por estar ahí para sus seres amados.

Este es el lugar que Add disfruta observar. La paz que emana es contagiosa, y ahora que el telépata está abierto a ver las cosas buenas de la vida, recorrer cada espacio se ha convertido en su pasatiempo favorito.

Obviamente, ¿por qué no aprovechar su poder para ver todo al tiempo? Una vez descubrió una dimensión en blanco, tan pura, tan libre, la ha tomado como su espacio favorito para visualizar cada rincón de su línea temporal por medio de fracturas, casi como ventanas. Se podría decir que ha convertido dicho espacio blanco en un museo de las maravillas de Elrios, sin siquiera manipularlas o cambiarlas.

¿Qué tanto ha pasado en estos últimos tres años para que Add cambiara tanto?

-Aunque quiera, el tiempo no se detiene-, se dijo a sí mismo una vez la alarma establecida en sus dinamos estaba activada, -A trabajar-

Su rutina consistía en despertar tras una buena (a veces corta) noche de descanso, comer algo ligero y atravesar la línea dimensional hacia aquel espacio donde contempla su universo por minutos, o a veces horas enteras sin aburrirse. Una vez sus dinamos le alertan, regresa a su hogar para prepararse e ir a trabajar.

Decidió seguir como neurólogo en aquel hospital donde todo comenzó. Era una especie de recuerdo constante de que ahora su vida era diferente, y que estaba satisfecho con ello. Además, nunca estaba de más aprender nuevas cosas.

Una vez entra al cuarto más grande de aquél nuevo hogar, ahora ubicado en Altera, no se sorprende al encontrarlo solo. Eve siempre madruga a cumplir sus deberes, así como él debe darse prisa para cumplir los suyos. Siempre le advierte a Eve que tome un descanso, pero ella siempre tan testaruda nunca le hace caso, cosa que ha aprendido a llevar.

El trabajo transcurre común y corriente. Los pacientes de siempre, algunos nuevos cada semana, jugar en su consola cuando no tiene nada que hacer, y por supuesto, reunirse con sus colegas y amigos para tomarse un café y charlar.

-Kukukuku esa Rose siempre trae problemas-

-Empiezo a pensar que pasará toda la vida aquí-, suspiró Rena frustrada, ganándonse unas risas de sus acompañantes.

-Supongo que no tendremos que extrañarla entonces-, comentó Raven para continuar con las risas.

-Oye, Add, ¿es cierto que Ara y Chung tendrán un bebé?-, la curiosidad siempre ha sido una cualidad de la dulce elfa.

-Ya era hora. El princesito siempre ha sido un poco lento-, se burló.

-No lo culpes. La decisión de ser papá es una muy importante-, salió Raven a defender. Add solo se limitó a reír de nuevo.