Mi pequeña casualidad - Marco Asensio

Introducción

Las lágrimas caen por mi cara sin cesar. Giro la cabeza por última vez; mis padres se abrazan y lloran desconsoladamente. Y muy a mi pesar, me despido de ellos con la mano por última vez.

Estoy a un paso de subir al vagón de tren que me cambiará la vida. Y mis padres no pueden evitar emocionarse, dejan marchar lejos a la niña de sus ojos. Pero la niña, ya no es tan niña. 

En los 22 años recién cumplidos que tengo, es la primera vez que me marcho lejos de casa para ganarme mi futuro. Y tienen que entenderlo.

Una vez dentro del tren, busco mi sitio para acomodarme durante las horas de trayecto entre Málaga y Madrid. Y sí, la capital es mi nuevo destino.

Hace cuatro años empecé la carrera de periodismo; y bien sabían mis padres y mi hermano que mi sitio estaba fuera de nuestro pequeño pueblo andaluz. El periodismo es un mundo duro y las oportunidades tienes que ganartelas; porque no llegan solas caídas del cielo.

Después de una pequeña siesta, abro los ojos y ya estoy en la estación de tren de Madrid, Atocha. Recojo mis maletas y busco el número de un taxi.

Desde casa conseguí alquilar una habitación, de momento, por tres meses. Por lo tanto, compartiré piso con dos chicas más. Y por ahora, sólo sé que sus nombres son Paula y Sofía.

Una vez el taxi me deja en un barrio bastante bonito de Madrid, justo delante de mi nueva casa, me decido y me convenzo para empezar una nueva vida.

Estoy dispuesta a dejarme llevar.