Tus padres están en la puerta de la tienda esperando a que salgas entre todo ese montón de gente.
Después, vais a comer a un restaurante cercano, y les cuentas a tus padres todo lo sucedido en la tienda.Antes de volver a casa, revisáis la lista para ver si os falta algo del material, y ya que no falta nada, vais al imperio de las lechuzas para comprar algo de comida para Fenris.
Después, subís otra vez en dirección al caldero chorreante.
Te da pena irte, pero sabes que dentro de poco volverás a adentrarte en el mundo mágico.Los días pasaron rápidos, y con ayuda de tus padres, practicaste algunos de lo hechizos básicos, de esos que te sabías de memoria pero antes no podías practicar por que no tenías varita.
El día anterior del viaje, tus padres te ayudan a hacer las maletas y a meter todos los libros y utensilios mágicos en un baúl que tenía escrito tu nombre.
Tu madre ya había avisado a tu familia y amigos de que te ibas, poniendo la excusa de que te ibas a un colegio especializado en artes, que estaba bastante lejos de vuestra casa, y para darte la despedida, el día de antes tus padres organizan una cena a la que invitan a todos tus amigos más cercanos y familiares.Después de los besos, abrazos y llantos de algunos miembros de tu familia, te toca irte a la cama, aunque sabes que no vas a dormir mucho.
Te despiertas muy temprano, cerca de las 6:00 de la mañana. Tus planes no eran esos, pero ya bastante que has podido dormirte. Te quedas tumbada en la cama, boca arriba, mirando un punto fijo, preguntándote si todo esto es real.
Y te vuelve a entrar la duda de que todo haya sido un sueño, así que enciendes la luz, y te tranquiliza ver que tu túnica sin escudo está doblada como la dejaste anoche, encima de la mesa.Tu madre entra en la habitación cerca de las 7:30 y no se sorprende al ver que ya te has despertado por tu cuenta.
-Bueno días cariño, estás lista?
-Supongo que sí...-Contestas un poco dudosa.
-Vamos, baja a desayunar y vístete rápido. Papá ya está bajando tus cosas al coche, pero de Fenris te encargas tú, ¿Vale?- Y cuando termina de decir esto, te da un beso y rápidamente sale de tu habitación.Después de desayunar subes a tu habitación y te pones tu túnica, coges tu varita y la jaula de Fenrris, y bajas al garaje, donde te esperan tus padres ya listos para salir hacia la estación.
El camino se te hace eterno, no se te ocurre nada que decirle a tus padres hasta que tu padre rompe el silencio.
-¿Estás nerviosa?
-Bueno... Más o menos. Es una sensación rara.
-Recuerdo el primer día que atravesé las puertas de Hogwarts.- Dice tu madre- Fue extraño, la verdad...Y así siguió la conversación hasta que por fin llegáis a la estación de king Cross.
Antes de entrar coges un carrito para poder llevar bien todas las maletas, el baúl y a Fenris.
Dentro de la estación hay un montón de gente con trajes y maletines que corren de un lado para otro.
También hay algunas personas que llevan un carrito como el tuyo con mascotas y baúles.Tus padres te llevan hasta el andén número nueve, y una vez allí se quedan mirando la pared que separa ese andén del siguiente.
-Toma (tn), coge el billete- Dice tu padre, y te da el sobre que contiene la carta de admisión a la escuela. Dentro hay un billete de color dorado con dos trenes dibujado a los lados, y en el medio pone, andén 9 y 3/4, más abajo pone, Hogwarts Express.
-Espera... Pero si ese andén...- Intentas decir, pero tu padre te interrumpe.
-Atenta- Dice mientras señala a un chico con el pelo rubio casi blanco, que va acompañado de otro chico y una chica más mayores. También les acompañaban dos adultos. Aquella familia va vestida con túnicas como la tuya, menos los padres. La chica y el chico que son mayores tienen un escudo verde con una serpiente representada en el medio, pero el chico más pequeño, no tiene escudo.
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Soy una Ravenclaw
Fantasy¿Quieres vivir tu vida como si estuvieses en hogwarts ? Pues está es tu historia. ¡Vive tu propia vida en la gran escuela de magia y hechicería como si fueras el protagonista!