One Life (Justin Bieber y tú)

Capítulo 1.-Dos años después una vuelta inesperada

Terminé de colocar todas mis pertenencias. Mi padre me había ayudado a llevar todas mis cosas mientras que mi madre me había ayudado a decorar el nuevo apartamento. Si nuevo apartamento. Había terminado los estudios de bachillerato un año atrás y ahora estaba tomándome un año sabático para dar el gran paso a la universidad. Trabajaba en un bar y eso me daba el dinero suficiente para poder independizarme de mis padres. Un pequeño departamento era lo único que necesitaba y ahora que lo tenía podía empezar una nueva vida. Una nueva vida lejos de mi pasado, de él. Y sin quererlo volvía su imagen a mi cabeza,como una pesadilla que me perseguía cada día desde que se fue, desde hace dos años. Parecía mentira que hubiera pasado tanto tiempo desde que todo se desvaneció con una simple llamada telefónica, pero era así.

Me despedí de mi padre y de mi madre sonriendo y empecé a limpiar la casa, guardando toda mi ropa en el armario,sacándola de la maleta con cuidado. Saqué la última prenda de ropa de la maleta y me dí cuenta de que había una foto,la cogí entre mis manos y el dolor inundó mi corazón. Éramos Justin y yo, el día en el que me mudé a la que iba a ser nuestra casa. Justin salía con su peculiar sonrisa mientas que yo le daba un beso en la mejilla. Cuando la iba a romper llamaron a la puerta, la hice una bolita y la tiré a la papelera. Iba a empezar una nueva vida y el no estaba incluido ni en mis planes ni en mis recuerdos, ya había me había pasado demasiado tiempo martirizándome a mi misma.

-¡Enana!-Sentí como los brazos fuertes de Fredo me cogían por detrás de la rodilla y me colocaban sobre su hombro.

-¡Fredo!¡Bajame!-Reí mientras me aferraba a su espalda para no perder el equilibrio y caerme.

Me bajó al suelo y me dió un tierno beso en la mejilla como casi siempre hacia. Fredo había sido mi máximo apoyo estos dos años. Él había sido el paño de lágrimas al cual acudía cuando me daba por acordarme de Justin, es decir, siempre. El se había convertido en mi mejor amigo, con el que podía contar siempre. Empezamos a relacionarnos más después de que Justin se fuera. Estuve alrededor de dos meses muy mal, apenas comía, no dormía y sólo hablaba para dejar escapar algunos sollozos y justo en el momento en el que más necesitaba el apoyo se alguien apareció Fredo, preguntándome por Justin. Él tampoco sabia nada de su amigo pero al contrario que yo no le guardaba ningún rencor. Él estaba empeñado en decirme que Justin nunca se podría haber ido así por así pero a mi lo único que se me ocurría es que Justin era muy buen actor.

Cada vez recordaba lo ilusionado que estaba primer nuestra relación y por irse a vivir con el a Canadá. Estaba claro que Justin no tenía escrúpulos. Me daba asco.

Sacudí mi cabeza alejando todos esos pensamientos,era lo único en lo que no quería pensar en ese momento. Había cerrado un libro lleno de dolor para abrir otro nuevo deseosa de que fuera un libro lleno de prosperidad y felicidad.

-¿Qué haces aquí?-Le sonreí a Fredo cuando por fin él me bajó de su hombro

-Pensé que teníamos que estrenar la casa como Dios manda-Alzó la mano en la que llevaba una bolsa repleta de botellas de alcohol,de diferentes tipos.

-Por supuesto,pasa es lo que justo ahora necesitaba,no te puedes ni imaginar lo que cansa una mudanza,y eso que pensé que tenía pocas cosas-Le indiqué donde estaba el salón y nos sentamos en él.

Al cabo de dos horas yo estaba bastante borracha,tanto que si,me hubieran preguntado cuántos años tenía no hubiera sido capaz de responder. Hacía mucho que no bebía y mi cuerpo y mente pedía a gritos un respiro. Me recosté en el sofá mientras Fredo se quedaba mirándome,sabía perfectamente al ver su cara que algo no iba bien,no había probado ni una gota de alcohol en toda la noche y eso que a Fredo le gustaba el desfase de vez en cuando. Desde que se había separado de Paula,bueno desde que Paula le había dejado,todo en él había cambiado,supongo que en parte,fue porque su relación con ella se acabó poco después de que Justin se marchara. Y eso era, sin embargo,lo que a Fredo más le jodia. El no saber qué había pasado por la cabeza de su "hermano" para irse así de repente. Yo nunca volví a tener relación que Paula,desde que lo dejó con Fredo me evitaba a toda costa o bajaba la cabeza en cuando me veía,cambió de amistades y yo en ellas no estaba incluida. Siempre quise saber lo que le había hecho para que cambiaría así conmigo de la noche a la mañana.

Chasqueé nos dedos para que la atención de Fredo se centrara en mi.

-Fredo,¿Que...te ocurre?-Hice una pausa intentado que las palabras salieran con normalidad de mi boca pues el alcohol hacia que se agolparan-Estas...raro,¿Pasa algo?

-____________-Se pasó las manos por el pelo visiblemente asustado-Te tengo que contar algo-Su voz se veía notablemente quebrada,sus manos temblaban y sudaban y las venas de su cuello permanecían tensas e hinchadas.

-¿Qué pasa Fredo?Me estás empezando a asustar-Susurré,el efecto del alcohol se estaba pasando y una sensación de inquietud se apoderaba de mi cuerpo-Vamos Fredo,joder,escupe de una puta vez.

-Es mejor que te lo cuente mañana,no creo que ahora sea el mejor momento para decirte esto y...-Se levantó del sofá pero le cogí del brazo para que se volvería a sentar.

-Mierda Fredo,¿Que cojones te pasa?Cuéntamelo de una puta vez-Fruncí el ceño nerviosa,si Fredo no me decía que coño pasaba era capaz de matarle,los secretos así me mataban.

-Esta bien,pero te advierto que nada va a volver a ser como en estos dos años-Suspiró y me miró a los ojos- Justin está en mi casa _______________, Justin ha vuelto, Justin ha vuelto por ti.