One Life (Justin Bieber y tú)

Capítulo 32.

Estaba en la cama, enredada entre las sábanas, viendo como el pecho desnudo de Justin subía y bajaba con cada respiración convulsa pues acabábamos de hacer el amor. Si me dijeran que eligiera una palabra para describir mi estado de animo no podría elegir una da, me encontraba tan feliz, tan tranquila y despreocupada, tan amada por Justin, tan contenta por todo lo que habíamos vivido en esas navidad es, por lo dulce que había sido Justin conmigo, por absolutamente todo. Quizás estaba tan feliz porque habían sido vacaciones, quizás solo por eso, porque al estar de vacaciones no tenia que trabajar y no tenia peligro a que Justin descubriera lo que estaba haciendo a sus espaldas, pero se que si confesara lo que estaba haciendo seria capaz de dejarme, o de matar a todos los de la organización y lo menos que necesitaba era ver a Justin entre rejas, eso me mataría.

-¿En que piensas?-Dijo el pasando un mechón de mi cabello descuidadamente por detrás de mi oreja.

-En que hace un chico tan maravilloso como tu con una chica tan...normal como yo-Mentí acariciando su mejilla.

-Ojalá te vieras con los mismos ojos que te veo yo y de la misma forma en la que te valoro porque nena, para mi eres absolutamente perfecta- Acarició mi cintura desnuda con sus largos dedos.

Me sonrojé y le besé a modo de agradecimiento.

-He pensado que hoy podríamos irnos de picnic, a meternos mano entre la hierba-Rió

-Eso suena demasiado bien-Le besé.

-Y luego ir a ver la casa nueva que he comprado para nosotros.

-¡¿Que has hecho que?!-Le miré impactada.

-He comprado una casa enorme para ti y para mi, con un enorme jardín y todas las comodidades que te mereces, empezando por el servicio. He pensado que no podríamos vivir toda la vida aquí, además si vamos a aumentar la familia, los niños tienen que tener un espacio donde moverse,jugar con total libertad y bueno, por otra parte esta casa está casi al lado de la de tus padres y no me apetecía verles la cara de amargados esa que tienen, todos los días durante el resto de mi vida-Se encogió de hombros.

Le miré asombrada, casi en estado de shock por tal noticia-Uau Justin, eso desde luego no me lo esperaba-Respondí con un hilo de voz

-Es lo menos que te mereces nena-Sonrió-Y ahora vistete porque nos vamos de picnic.

Me levanté de la cama y después de darme una ducha corta y placentera me vestí con unos jeans por encima de el ombligo negros y un top blanco, con unas botas marrones y un bolso del mismo color y unas gafas redondas de sol. Me puse frente al espejo y tras pasarme el secador logré acomodar mi pelo para que quedara lo mas decente posible, me puse un gloss, una sombra y salí para ver a un Justin vestido con unos vaqueros, una camiseta blanca y una americana negra, con el tupé totalmente peinado y sus rayban colgando con estilo del centro del cuello de su camiseta blanca.

-Estas impresionante Justin, normal que cuando pases todas te miren con ganas de follar-Le besé.

-No es para tanto nena y tu también estas increíble-me dió una vuelta sobre si misma y un pequeño azote en el culo-Venga nena, ponte mi chaqueta de cuero que nos vamos.

Hice lo que me pidió, en realidad lo iba a hacer aunque no me lo pudiese pues me encantaba ponerme ropa de él, eso me hacia sentir mas suya y me reconfortaba.

Después de un paseo de lo mas agradable en la moto de Justin llegamos hasta una casa a las afueras de la cuidad que estaba rodeada 360 ° por un gran y precioso jardín menos por un camino de piedra que parecía estar hecho para que pasarán los coches y las personas sin necesidad de dañar tan bello paisaje. Avanzando un poco mas por esas tierras vi una casa enorme que mezclaba casi a la perfección el estilo rustico con el actual, era absolutamente asombrosa.

-Justin esta casa es absolutamente impresionante-Susurré poco después de aclararme la garganta para que las palabras salieran con normalidad.

-Me alegro que te guste nena, porque esta casa es tuya, nuestra-Dijo esbozando una arrebatadora sonrisa mientras se bajaba de la moto y me ayudaba a bajarme.

Yo simplemente intenté mantener los nervios para no empezar a chillar con una loca presa de la emoción de tener una casa mas propia de las actrices de Hollywood-Dios Justin, gracias, gracias-Me subí encima de él y le besé a lo que él me respondió con gusto. Cuando bajé de encima suyo abrió la casa con una llave y entramos, lo primero que veías nada mas entrar era un enorme recibidor de una gran escalera de caracol, luego había una gran cocina como para bailar bailes de salón por ella y un salón que era igual de grande de lo que era la casa en la que actualmente vivíamos, también había un baño enorme en el que destacaban una gran ducha, una gran bañera, un jacuzzy y una sauna. Cuando subías las escaleras de caracol te encontrabas con un pasillo lleno de puertas. En la primera puerta había un vestidor enorme, mas típico de cualquier barbie. En la segunda puerta había otro baño casi idéntico al de abajo. En la tercera puerta había una habitación toda entera pintada de azul, con una cama grande y varias estanterías y cómodas blancas —para el niño—pensé. En la cuarta puerta había una habitación casi igual que la anterior sólo que pintada de morado—para la niña—pensé. En la quinta había una habitación sobria con una cuantas ventanas y un baño incorporado como todas las habitaciones—para los invitados o para el servicio—pensé. Y por ultimo en la sexta había una gran cama de matrimonio mucho mas grande que la de las habitaciones anteriores con cómodas color caoba y cogines negros y rojos en armonía sobre la colcha blanca—nuestra habitación —pensé, con unas vistas maravillosas hacia el gran jardín y el enorme río que se encontraba a los pies de esa casa de en sueño. Pero eso no se terminaba ahí, Justin me bajo abajo otra vez y me enseñó el pasillo que había detrás de la escalera el cual yo no había visto. Había un a gran biblioteca y un gran despacho para que o Justin o yo nos dejáramos llevar por la lectura. Justin me llevó afuera y me enseñó el gran jardín que tenia una zona para sentarse, y un pequeño río al final de la extension de terreno. Había una pequeña cama con cortinas blancas como las de las princesas. Justin me cogió por sorpresa y me llevó a la cama con el con vistas al río y el jardín en general. Cogió mi cara entre sus manos con gesto preocupado.

-Nena me tienes preocupado, no has abierto la boca desde que hemos entrado en casa, ¿Que pasa?¿No te gusta?-Me fijo con gesto verdaderamente preocupado.

Yo sólo pude echarme a reír ante la abrumadora sensación de felicidad que abrazaba mi cuerpo mientras el me miraba con cara de poker-¿Bromeas?Oh Justin, esta casa es absolutamente perfecta, es impresionante y oh, es nuestra, tiwnes mas dinero que sentido común.

-Sólo quiero lo mejor para ti nena.

-Lo mejor para mi eres tu Justin, pero si, me encanta, me apasiona aunque también es verdad que yo dormiria debajo de un puente con tal de que fuera contigo.

Chicas! Espero que os guste. Bueno deciros que estoy muy contenta porque hoy me pidió una entrevista una chica que hace entrevistas a las autoras de sus novelas favoritas y aunque no fue la primera entrevista que he hechosme sentí super cómoda así que es cuanto la publique os lo haré saber para que conozcáis un poquito mas de mi y si alguna quiere hacerme una entrevista por privado estoy activa siempre y leo todos vuestros mrnsajes , bueno dicho esto espero que os haya gustado el capitulo y dicho esto os propongo una cosa TODAS ESAS PERSONAS A LAS QUE LES GUSTE MI NOVELA, ESTE CAPITULO O COMO ESCRIBO O QUE SIMPLEMENTE LEAN ESTE CAPÍTULO, ESCRIBID UN COMENTARIO EN EL CAPÍTULO QUE PONGA "OKAY" Y SI TENÉIS ALGUNA COSA QUE DECIR TAMBIÉN. NECESITO SABER QUE SEGUÍS CONMIGO, PORQUE EL OKAY TAMBIÉN PUEDE SER NUESTRO SIEMPRE. ASÍ QUE CHICAS, OKAY?☁