Una novela juvenil ,
una chica enamorada de su amor platonico desde que lo vio en su instituto.
¿Cuando había pasado esto ?
Un amor juvenil sin límites , solo haciendo caso a sus corazones , primero llenos de rencor convertido ahora en amor...
Ellos dan la clase tranquilamente mientras yo miro a James intentando domar a su yegua. Que me lanza miraditas ya que un chico que al parecer es un profesor de caballo, no para de querer coquetear.
Cuando terminan, James se baja de su caballo y se dirige a mi cuando Gisella lo para. El parece querer irse pero ella lo vuelve a parar, sin pensarlo me dirigo a ellos.
- Hola cariño- le digo pasando los brazos por su cuello.
El me sonríe y me da un beso.
- Hombre si es la nueva " modelito".
Entonces me giró a encanrarla.
- Oh sí estabas aquí, no te había reconocido si un kilo de maquillaje en tu cara querida.
Me burlo de ella.
- Si claro, por cierto se te veía muy bien saliendo de tu casa con tu compañero bombón.
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La miro incrédula a lo que acaba de decir. Y noto la mirada de James atravesandome.
- Ya sabes, las revistas se enteran de todo. Y tu fea cara y el dios griego sois su objetivo.
Estoy a punto de lanzarme a ella cuando James habla.
- Perdona Gisella, pero necesito llevarme a mi novia. Adios.
Y sin decir más, prácticamente me arrastra hasta un sitio apartado de nuestros compañeros.
- Como que Max salías de tu casa- dice cortante.
- Por que pasó a por mi para ir a el desfile, James no puedo creer que hayas creído una palabra de Gisella.
Digo empezando a cabrearme.
- Te dije que no me gustaba que andaras con ese tipo.
- Pues no se por que, sólo es un compañero y tu sin embargo anda por aqui con Gisella detrás de ti y yo no debo ponerme celosa.
- Sam... No quiero pelear ¿de acuerdo?. Tengo que hacerme a la idea de que vas a posar con ese tipo y con más. Dame tiempo- dice pasándose las manos por el pelo, claramente furioso.
- De acuerdo, yo ya me voy. Dile a Annie y a Alex que ya nos veremos.
Y si darle tiempo a hablar me voy. Prefiero evitar lo que va a pasar si seguíamos por ese camino.
Me subo en mi moto notando todas las miradas en mi, arrancó y me dirijo a la pastelería que hay a unas pocas calles de mi casa.
Compro unos pasteles que tienen una pinta deliciosa, le pagó al demasiado coqueto dependiente. Y me dirigo a mi casa, cuando aparco y bajo de la moto veo a Max sentado en el porche esperándome.
-¿ Esperas a alguien caballero?- bromeó.
Levanta la cabeza y me sonríe.
- Si a la señorita sexy que vive en esta casa- dice siguiendo mi juego .
- Oh, pues debe ser muy afortunada esa chica.
Suelta una carcajada. Le señaló la caja de pasteles y me sonrie.
- Entra te invito a unos pasteles supuesto "nueva conquista"
- No le eches mucha cuenta a las revistas algunas veces pueden ser cruel.
Nos adentramos en casa, y le digo que se acomode en el sofá mientras yo voy a por algunas bebidas.
Cuando regresó está mirando concentrado en su mobil, pero cuando nota mi presencia lo deja a un lado. A si pasó el resto de la tarde con este dios griego, hablando, riendo y comiendo pasteles. MUY buena distracción.
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Holaa amores!! Espero que estéisdisfrutando tanto como nosotras de esta novela, y agradecemos vuestro apoyo y comentarios. Como dijimos queremos dedicar CAPÍTULOSsólotenéis que decirlo.
