Capítulo 15: La verdadera forma.

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-Durante el resto del día, la chica y sus compañeros ayudaron a escapar a todas las cantantes que pudieran; fue una tarea ardua, pero gracias a la decisión de Corrin, muchas vidas lograron ser salvadas de las crueles garras del rey Garon. Esa noche, en un claro, mientras dormían todos sus aliados por el agotamiento, la princesa Nohria caminaba en silencio, incapaz de concebir el sueño.-

Corrin: (Realmente no puedo dormir... Primero Cheve y ahora la cacería de cantantes... ¿Hice bien en elegir Nohr? No estoy segura que pueda cambiar las cosas desde dentro del ejército... ¿Debí haber defendido a Hoshido y peleado contra Garon? ...No... Quiero demasiado a Xander y a los demás... No podría traicionarlos jamás... ¿Eh?)

-En ese momento, en las orillas del lago, Corrin logró divisar a su amiga cantante; sin perder más tiempo, la princesa Nohria comenzó a seguirla en silencio, intentando ver qué hacía la peli azul en ese lugar. Mientras la seguía, la perdió de vista, pero rápidamente pudo volver a encontrarla gracias a aquella canción que había escuchado ese día... En la ópera...-

Corrin: (¡E-esa canción! Es la misma que entonó esa cantante... La que embrujó a Garon... Por los dioses... ¿Fuiste tú quien hizo eso, Azura...?)

-De repente, Corrin pudo ver que Azura se había adentrado en el lago. De repente, una luz emergió debajo de la cantante, haciéndola desaparecer; rápidamente la princesa Nohria corrió hacia ese lugar, preocupada por su amiga. Una vez en aquella luz, la chica sintió como era arrastrada hacia el fondo por una gran corriente de agua; pocos segundos después perdió la consciencia. Al despertar, la chica dragón despertó y vio que a su alrededor habían grandes territorios que flotaban, mientras se levantaba, pudo oír claramente la voz de Azura.-

Azura: ¿Qué haces aquí?

Corrin: ¿Azura? ¿Q-qué pasó? Pensé que te estabas ahogando y me metí para rescatarte... Pero...

Azura: No deberías haber venido... Vuelve ahora mismo, aún estás a tiempo-- ¡Cuidado, Corrin!

-Rápidamente, la princesa Nohria se dio la vuelta, logrando protegerse apenas con la sagrada Yato del ataque de un hombre que se había posicionado detrás de ella. Sin perder un solo segundo, Corrin empujó con su arma la daga del tipo, haciéndolo retroceder.-

Corrin: ¡¿QUÉ DIABLOS LE PASA?! ¡¿POR QUÉ ME ATACA?!

Azura: Esto es muy malo... ¡Tenemos que salir de aquí ahora mismo, Corrin! Lo que te acaba de atacar no es más que un monstruo con apariencia humana. No puede sentir, ni amar, ni hablar. Es una máquina de matar...

Corrin: ¡¿Y dónde quieres que vayamos?! ¡No hay donde escapar!

-En ese instante, Azura logró ver a más de aquellas criaturas escondidos entre las sombras, preparados para atacar. Estaban completamente rodeadas, detrás de ellas no quedaba más que un gran precipicio sin fondo alguno; Corrin empuñó su espada a la vez que tomaba con su otra mano la piedra dragón que la cantante le había entregado. Era casi imposible salir vivas de aquel lugar...

Corrin: Tendré que abrirnos camino luchando... Quédate detrás de mí, Azura.

Azura: No mueras, Corrin... Debo contarte la verdad.

-El enemigo volvió a lanzarse contra Corrin, pero antes de poder alcanzarla, una lanza perforó el pecho de la criatura, haciendo que se retorciera y escupiera sangre hasta la muerte. Una vez que el hombre cayó al suelo, Azura y la princesa dragón pudieron ver a su salvados. Los ojos de la Nohria se llenaron de lágrimas; no podía dar crédito a lo que veía. Delante de ella, estaba aquel subordinado que creía haber perdido hacía tanto tiempo en el Cañón Sin Fondo: Gunter.-

Fire Emblem Fates: ConquestDonde viven las historias. Descúbrelo ahora