Capítulo 16: El ladrón de Hoshido

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-Algunos días transcurrieron hasta que, finalmente, Corrin y sus acompañantes llegaron al punto de encuentro que había designado el temido rey Garon... O más bien dicho, de la criatura que había tomado su forma. Al encontrarse con aquel ser, la princesa dragón debió ocultar todo sentimiento de rechazo para evitar delatar a su corazón. Sin decir palabra, se inclinó ante el Nohrio, dejando que éste hablase.-

Rey Garon: Es bueno volver a verte otra vez con nosotros, Gunter. Bienvenido.

Gunter: Gracias, rey Garon.

Rey Garon: Y pensar que caíste a las profundidades del Cañón sin Fondo... Debe haber sido una verdadera pesadilla para ti. Me alegro de verte en una sola pieza.

Hans: Bienvenido, Gunter-sama.

-De inmediato, el odio apareció en la mirada del caballero, sin embargo, éste no hizo más que bajar su cabeza, para evitar que el monarca Nohrio pudiera darse cuenta del profundo rencor que ocultaba en su corazón.-

Rey Garon: Suficiente. Ahora les tengo una nueva misión. Pronto Nohr y Hoshido entrarán en una guerra total. Situaremos al ejército en Cyrkensia, para enviar más tropas a Hoshido. Si los atrapamos por sorpresa, podemos lograr una victoria rápida y aplastante.

-Sin embargo, Corrin no prestaba atención a las palabras de aquel hombre; no podía dejar de pensar en la verdadera forma del monarca, ni tampoco en las terribles consecuencias que traería para el reino donde había nacido el tener que llevar y obedecer sin chistar a aquel hombre que alguna vez llamó "padre". De repente, su mente volvió a centrarse en lo que hablaba el rey cuando éste mencionó su nombre.-

Rey Garon: Corrin, tú te encargarás del ataque en Hoshido.

Corrin: Como desee, padre.

Rey Garon: Me sorprende que no hayas intentado decir alguna de esas sandeces que siempre hablas, pero supongo que por fin has aprendido qué significa ser mi hija.

Corrin: Como usted lo dice, padre. He aprendido mucho desde que me dejó salir de la fortaleza. Moriría si usted lo pidiera; pues sólo soy un arma para proteger a Nohr.

-Todos los aliados miraron pasmados a Corrin, incapaces de creer lo que ella había dicho; Camila y Elise miraron a su hermana a los ojos, descubriendo con horror que la mirada de la chica estaba completamente vacía. El rey Garon sonreía para sus adentros, parecía que por fin comenzaba el sufrimiento de la hija del Rey Sumeragi.-

Rey Garon: Exactamente. Toma la ruta marítima y evita la terrestre. Es posible que los Hoshidianos estén esperándonos en tierra; debemos ser más astutos que ellos. Mientras tanto, volveré al castillo Krakenburg. Desde allá supervisaré la situación y enviaré tropas cuando la situación lo requiera. Iago, Hans, ambos volverán conmigo.

Hans: A sus órdenes, su alteza.

Iago: Entendido, rey Garon.

Rey Garon: He puesto grandes esperanzas en ti, hija mía. No me decepciones una vez más.

Corrin: Volveré con buenas noticias, padre.

Iago: Antes que parta, Corrin-sama, debo preguntar... ¿Dónde fueron usted y Azura-sama anoche? Las vi salir de noche juntas. Es muy sospechoso, si me lo permite. Me estremezco con solo insinuarlo, sin embargo, en estos tiempos que corren... ¿No serían por casualidad espías de Hoshido?

Corrin: Estás equivocado, Iago. Anoche me desperté por una pesadilla, y salí a dar una vuelta. Azura me acompañó y logró tranquilizarme.

Iago: ¿Realmente crees que me creería algo así?

Corrin: Pues no miento. El ataque contra padre en Nestra me dejó bastante trastornada, además, desde hace un tiempo sufro terror nocturno, por lo que grito mientras duermo. Azura debió despertarme y sugirió un paseo por el bosque para calmar los nervios. Cuando caminábamos, nos encontramos con soldados traidores, y los eliminamos a todos.

Fire Emblem Fates: ConquestDonde viven las historias. Descúbrelo ahora