Once Upon A Benlos

0.1 Despues del hechizo

La triste y callada habitación de un hospital, ahí se encontraban Regina, la madre superiora , varios doctores y enfermeras. Todos observando el dolor y tristeza que invadía a Emma por la muerte de su hijo, a tan solo unas cuantas semanas de encontrarlo ahora lo perdía de nuevo, lo estaba perdiendo por culpa de esa maldita bruja y su tarta de manzana.

- Ya estarás contenta, todo esto fue tu culpa- Emma no retiraba la mirada de su hijo, pero todos sabían que se refería a Regina.

- No....no se suponía que fuera así- podía ser la Reina Malvada, pero eso no le impedía sentir cariño por su hijo adoptivo, podía ser una mujer cruel y vengativa, lanzo un hechizo sobre toda una tierra por venganza, pero al hacerlo un profundo vacío se género en su corazón, un vacío que atraves de los años fue destruyendo su felicidad en storybrook, hasta que un día se fue llenando con Henry, aquel pequeño rebelde que por momentos la hacía desear nunca jamás volver a ser mala, pero ahora estaba Emma, madre biológica de Henry, y la salvadora, ella podría destruir todo por lo que había luchado y Regina no podía soportar una derrota más, no ahora que tenía a Henry y la solución más fácil a sus problemas fue aquella vieja y mágica manzana que ya había utilizado con Blancanieves, ella no tenía un príncipe encantador que la rescatará, así que dormiría por siempre y Henry volvería a quererla- se.....se suponía que la comieras tu.

- Ahora la a comido Henry y.....- El corazón de ambas sintió una fuerte y dolorosa punzada cuando todos los aparatos producieron un pitido al unisono, el doctor no lo dijo pero todos sabían que solo significaba una cosa, la vida del pequeño había llegado a su fin.

- No, no, no, no, no, no- Regina comenzó a llorar amargamente mientras se tiraba y rodaba en el piso.

Emma se limitó a llorar y abrazar a su hijo, ya no había nada que hacer, era una tierra sin magia y la poca que existía actuaba de forma inusual y poco confiable, lo único que ahora podían hacer era despedirse, con todo el dolor en su corazón y el alma.
Se inclinó, el dolor que sentía la hizo abrazar al menor con las pocas fuerzas que le quedaban, acto seguido se reincorporo lo mejor que pudo y con amargas y abundantes lágrimas se inclinó y beso la frente de Henry.

Todo ocurrió tan rápido que nisiquiera tuvieron tiempo de reaccionar, una mágica y hermosa esencia de amor puro y verdadero invadió la habitación y después la ciudad entera.
Henry apenas comenzaba a respirar de nuevo y abrir sus ojo, cuando sin que nadie lo imaginara, todo comenzó a dar vueltas, de pronto la ciudad entera estaba invadida por una extraña pero mágica niebla rosada con pequeños toques morados, aquella niebla invadía el aire y los pulmones del pueblo, con ella traía las memorias de todos, les regresaba sus recuerdos y escencia, sus amores y finales felices.

Fue cuestión de segundos para que la niebla de disipará y storybrook desapareciera de esta tierra sin magia, ya no quedaba rastros de ella o de sus mágicos avitantes.

Ahora todos despertaban en un gran salón del trono, Blancanieves y su principe se encontraban después de mucho tiempo se lanzaron el uno sobre el otro y se fundieron el un dulce beso.

- Espera, espera si estamos aquí y recordamos todo significa....- El principe se vio interrumpido por Henry quien sin dejar de abrazar fuertemente a Emma dijo.

- Significa que ella te a salvado abuelo, ella los a salvado a todos ustedes.

- Eso parece, nos a salvado del hechizo de Regina, y ahora podemos estar juntos....juntos como la familia que siempre tuvimos que ser- las lágrimas de felicidad recorrían el rostro de Blancanieves, Emma aunque confundida y sin saber bien lo que ocurría corrió y abrazo a su madre.

- Lo seremos, pero primero tenemos que encargarnos de un problema mas, antes de eso.

Emma voltio la mirada hacia el centro del gran salón, donde una extraña versión de Regina la miraba con odió, llevaba un extraño y extravagante vestido negro con una especie de corona que hacía juego con el vestido.
De echo todos incluso ella llevaban entrañas pero hermosas prendas, una extraña pero llamativa mezcla del bosque encantado y la que llamaban "la tierra sin magia".