Once Upon A Benlos

17. El Tiempo ¿Todo Lo Cura?

Tal vez era cierto y existía la mínima posibilidad de que Ben no fuera quien estuviera dejando las cartas, después de todo el firmar con un seudónimo y usar un papel tan sucio, no era la forma de Ben, Ben seguramente hubiera usado su nombre y selló real, así como un papel elegante de la mesa de su padre y utilizado a un anticuado y uniformado mensajero. No, sin duda el nunca hubiera echo nada como eso, asi que entonces si era alguien más, alguien que se interesaba por Carlos, o alguien que simplemente quería jugar con él.

La cabeza de Carlos se planteaba y analizaba estas 2 posibilidades, mientras que Mal y Evie iban en busca de Freddie, quien según Mal podría ayudarlas a ayudar a Carlos. Pero Freddie tenía sus propios problemas. Aún se debatía entre ayudar a su amiga o cumplir su más grande sueño, seguía pensando en eso cuando Mal y Evie entraron sin previo aviso en su dormitorio.

- Chicas ¿Que hacen aquí y a esta hora?, Es un poco tarde no creen.

- Freddie, Carlos está muy mal, necesitamos que nos ayudes a ayudarlo - Evie la miraba suplicante y con dolor.

- Mal ya me había dicho algo al respecto, pero no entiendo por qué creen que yo puedo ayudarlas, no es que no quiera, simplemente no se cómo hacerlo.

- Fácil, viviste toda tu vida con el Doctor Facilier, es tu padre y seguramente tú sabes muy bien como romper encantamientos.

- La verdad es que no se mucho y todo depende de que encantamiento se trate, cada uno se rompe de manera diferente, así que díganme qué pasó y veré cómo puedo ayudarlas- durante las próximas 2 horas Evie se encargo de contarle todo con un increíble lujo de detalle, desde el como llegó al castillo y Cruella fue muy amable, pasando por el momento en que arrancó el corazón del futuro monarca y terminando con el insistente del desayuno.

Freddie lo analizo por unos cuantos momentos y finalmente hablo.

- La solución está en el mismo "encantamiento", no se como no lo vieron antes - ambas chicas la miraron confundidas-  Evie, no hiciste un encantamiento, lo que hiciste en un tipo de magia peculiar, no tiene nombre, pero si es muy conocida, consiste en arrancar el corazón de la víctima y ordenarle que haga cosas, aún en contra de su voluntad, y como lo que hiciste fue en contra de los deseos de Ben entonces los recuerdos no fueron borrados correctamente, siguen en su mente y lo único que tienes que hacer es volver a tomar su corazón y ordenarle que recuerde todo.

- El único problema es que a Ben nunca lo dejan solo, sobre todo ahora que su coronación está tan cerca, estará más vigilado que nunca y será casi imposible conseguirlo.

- Además no se si seré capaz de hacerlo de nuevo, Mal tiene razón, pero aunque consiguieramos apartarlo de toda su seguridad, no sé si puedo volver a tener su corazón en mis manos, y sobre todo no se cómo es que todo esto funcionará sin romperle en corazón a Carlos, el sufrirá mucho si descubre lo que su madre y yo hicimos.

- Diras, lo que su madre te obligo a hacer, estabas presionada y no puedes echarte la culpa, ella te obligo.

- No sé si Carlos pueda verlo así, despues de todo fue su propia madre y el nunca creerá que ella fue capaz de hacerle algo así.

- Despues nos encargamos de eso, por ahora hay que consentrarnos en como recuperar las memorias de Ben.

- Tal vez yo pueda ayudarlas con esto- Freddie tomo su maleta y de ella saco un pequeño frasco con un misterioso polvo rojo brillante- lo saque de la tienda de papá antes de salir de la isla.

- ¿Eso es lo que creo que es?- los ojos verdes de Mal brillaron como si fueran esmeraldas.

- Es un poco de la arena roja de Agrava, solo se necesita un poco para que el enemigo se convierta en algo fácil de vencer.