[OSCURA OBSESIÓN]

...

Hola a todos!
Les quería decir que había decidido dejar esta historia porque creí que nadie la leería, pero hace poco me doy cuenta que algunas personitas me piden que continúe, tal vez sean pocas, pero con esas estoy conforme para continuar. Muchas gracias.

Dulces sueños...
Apretó mi hombro tan fuerte que hizo que soltara un gemido de dolor. Sentí como si mi energía fuera arrebatada poco a poco. Me empece a marear y a ver todo borroso, quise agarrarme de él pero ya no estaba, se había ido. Me sostuve de la barra para recobrar el equilibro, pero de la nada caí en profundo abismo negro...

Abrí mis ojos y me doy cuenta que estoy como en un pequeño baño, estaba oscuro pero alcanzaba distinguir algunas cosas. Voltee a mis alrededores y todo se encontraba en un horrible estado, las paredes estaban manchadas y descoloridas, había moho y lodo en el piso, la tasa estaba manchada por todos lados y el espejo estaba roto. El miedo llego a mi rápidamente.
¿como rayos había llegado aquí? ¿Quién me trajo? Traté de recordar lo que había pasado antes de estar aquí y rápido llego a mi mente. "Eisan" .
El ruido de la puerta al abrirse me saco de mis pensamientos. Un chico entro bruscamente, me tiró del cabello y me empujó fuertemente hacia la pared. Un fuerte dolor empezó a producirse en mi cabeza. Quería defenderme pero me sentía muy débil. El chico agarró mi muñeca, quise zafarme pero yo no tenía fuerzas, cuando menos me lo espere el chico saco una navaja y me la atascó profundamente en mi marca. El dolor fue tan intenso que solté un grito con todas mis fuerzas.

- ¡Ahhh! - Me desperté gritando.
Mis ojos se abrieron, me costaba un poco distinguir donde estaba, poco a poco mi vista se fue aclarado y me di cuenta que estaba en una habitación, pero no era la mía. La cama en la que estaba, era grande y las sabanas eran de un color tinto oscuro.
Toque mi frente y estaba empapada de sudor, me senté para observar la habitación en la que me encontraba, era grande, las paredes estaban pintadas de color rojo y los muebles eran elegantes y de color café.
El miedo me invadió al recordar lo que había pasado con Eisan. ¿Cómo logro hacer que me desmayara? ¿Cómo había llegado aquí? Miles de cosas pasaban por mi mete, cuando el picaporte de una puerta que estaba a mi derecha se empezó a mover.
Rápido baje de la cama y busque algo con que defenderme.En un escritorio estaba una lámpara de mesa así que la agarre y me puse en modo de defensa. No sabia en donde diablos estaba ni que tipo me había traído aquí a sí que aria lo que fuera para defenderme.
La puerta se abrió y Dylan entro con una tualla y una bolsa de plástico.
Me volteo a ver y se paralizó.

-Alisson. Deja eso en su lugar...

Ignore lo que dijo. Tenía demasiadas preguntas para hacerle.

-¿por qué estoy aquí?- pregunte enojada. Dylan se acercó a la cama y dejo unas cosas ahí. Camine hacia el con la lampara en mis manos de una forma amenazante. - ¡Dime donde estoy Dylan!- le grite furiosa.

-Primero deja eso ahí ¿de acuerdo?- levantó sus manos en forma de rendición y luego apuntó a la cama para que dejara la lámpara.

-¡¿De qué diablos hablas?!- definitivamente le soltaría un golpe en cualquier momento.

-Cálmate... - se acercó a mi - en un momento llegará Hollie.- me quedé como estatua ¿Hollie con este lunático? Definitivamente algo no iba bien. Baje lentamente la lámpara en la cama y me senté.

-Estas en mi casa- vi su rostro y en se reflejaba preocupación y miedo- necesitas ducharte.

-¿Cómo he llegado aquí?- pregunte pasmada.

-Las preguntas para después.- dijo y se dirigió a la puerta.

-¿cómo me voy abañar?-no me dijo donde estaba la ducha.¿donde se suponía que me ducharía? no quería ducharme en la casa de Dylan y menos si estábamos solos, pero él tenía razón, la necesitaba.
Dylan se detuvo y se giró para verme.

-¿acaso quieres que me meta contigo y te enseñe?- rodeé mi ojos. "Este chico no cambia" pensé. A pesar de estar en los peores momentos creo que siempre dirá incoherencias.

-no gracias, se como se hace.-dije cortante.-¿Donde esta la ducha?

- detrás de ti - Dylan apunto a una puerta que estaba del otro lado de cama. Se dio la vuelta y salió de la habitación.

No entendía nada. Primero lo del desmayo y después aparezco mágicamente en la cama de Dylan. ¿Que diablos sucedió?

Cuando termine de ducharme, salí del baño enrollandome la toalla y me dirigí a la cama para ver lo que había en la bolsa que Dylan había traído.
La abrí y adentro había ropa interior, una playera beige que decía "happy" en letras negras que al parecer era de Dylan, un short y unos calcetines. Me pregunto ¿de dónde habrá conseguido la ropa interior? Tal ves era de alguna chica que se acostó con el. Me dio asco imaginarme aquel acto. No me quedaba de otra. Me puse al ropa interior, el short y la playera que me quedaba tan grande que me cubría el short.

Salí de la habitación y me encontré con dos escaleras a los lados, creo esta casa estaba mas grande que la escuela. Baje las escaleras y pase por la gran sala y el comedor hasta que llegue a la cocina para beber algo porque me sentía mareada.
Escuche una puerta abrirse, rápido asomé mi vista hacia la puerta principal y claramente era esa porque intentaban abrirla pero estaba cerrada con llave.
Iba a acercarme para abrirla pero alguien me tomo del brazo y me jalo haciendo que quedáramos demasiado juntos. Era Dylan. Vi su rostro y me di cuenta que estaba paranoico.

-escucha Alisson- dijo en tono proyector- necesito que subas a mi cuarto, quites el cuadro que tengo en la pared y arranques el tapiz.
- ¿que?- Dylan se estaba volviendo loco y me estaba empezando a preocupar- ¿que sucede?-su mirada se volvió fría.
-solo has lo que te digo Alisson.-dijo amenazante mientras apretaba mi brazo.
-si no me dices que ocurre, saldre ahora mismo.- dije intentando zafarme.
-Eisan esta afuera.- El miedo se apoderó de mi. No sabía que pasaba pero una parte de mi mente solo me decía que le hiciera caso a Dylan peor la otra parte se preguntaba ¿Por qué de repente Eisan era un peligro? ¿Por qué Dylan se preocupaba tanto por mí sí apenas no conocíamos?