Superar la muerte de Aiden seria algo difícil pero tenía que asistir a clase al menos las primeras horas, me vestí de negro ya que luego iría al funeral de el, cosa que me pone nerviosa conoceré a su familia.
-Lira Lira - me sacaron de mi burbuja -Ya la vinieron a buscar.
-Oh cierto gracias - me levante torpemente y me fui de ahí.
Salí con con la mirada cabizbaja, una vez llegue a la puerta mire quien vino a buscarme, era Damian pensé que vendría Thomas como lo habíamos acordado pero en parte no me importaba la verdad.
-Hola - salude una vez que llegue a el
-Hola, vamos - abrió la puerta para mi.
Subí al auto, me puse el cinturon y espere a que el subiera a decir verdad empezaba a sentir miedo de ir me estaba poniendo nerviosa alce mis pies y oculte mi rostro.
-Todo estará bien - acaricio levemente mi espalda antes de arrancar e irnos de ahí.
No le respondí mis lágrimas habían vuelto a salir sin parar, mis ojos estaban hechos mierda de tanto llorar, apenas llegara al lugar tendría que ponerme gafas de sol negras.
Limpie mis ojos de las lágrimas aun que estas amenazaban con seguir pero debía parar.
- suerte que tu ropa es negra - mencionó.
Aun no lo habían notado.
No conteste quería llegar rápido al lugar y que todo pasara a una velocidad pasable pero sabia que no seria así.
-Llegamos - estaciono el auto cerca del cementerio.
Asenti levemente bajando mis pies y quitando el cinturón mire por la ventana pensando que hacer si salir, quedarme o irme de aquí y ser cobarde.
-vamos - menciono Damian antes de bajarse y abrir mi puerta.
Quería negarme pero debía ir baje del auto y mire a los alrededores esperaba que no hubiera tanta gente pero quizas eso era imposible.
Camine cabizbaja mirando los pies de Damian que servían como una guía para mi y así no caerme.
-Damian - susurré
Giro hacia mi y sin esperarlo puso su brazo alrededor de mis hombros dándome algo de confort por lo sucedido alce la vista y vi la gente algunos me miraban extrañados y era normal ninguno de aquí me conocía o sabia que fui la novia de Aiden.
-Alli están los padres ¿Quieres saludarlos ? - susurro cerca de mi.
Mire a la dirección que indicaba y los vi una señora hecha mierda llorando desconsolada por perder a su hijo, por otro lado su padre no lloraba pero su mirada lo decía todo lo roto que estaba, lo vacío que se estaría sintiendo.
-Esta bien - hable.
Por suerte mi cara la habia limpiado antes de bajar del auto, camine hacia ellos con cierto temor a como reaccionarían al verme, una vez estuve cerca me notaron.
-Mi sentido pesame señores - hable.
- ¿Tu eres Lira ?- pregunto el señor al verme.
-si - susurré apenas lo dije la señora me abrazo.
-Mi hijo nos dejo, el el murió - la señora lloraba con intensidad en mi pecho.
Quería llorar con ella pero no podía, no quería arriesgarme a que me descubrieran, la abrace para darle algo de consuelo.
-Lo siento mucho señora .
-gracias por venir, nos hubiera encantado conocerte en otro contexto - hablo el señor dándome una sonrisa leve.
- de nada señores - me separe de la señora.
- con permiso.
Nos fuimos de allí y nos dirijimos hacia el ataúd donde se encontraba el cuerpo de Aiden aguante las lágrimas como pude y deje una rosa blanca encima de este.
-Perdon - susurré.
Di la media vuelta y nos fuimos de ahí por decisión mía claro, no podía seguir mas aquí o terminaría llorando.
-Gracias por acompañarme - mire a Damian.
-De nada - subió al auto.
(....)
Estaba en mi cuarto a oscuras, acurrucada entre mis sabanas mientras seguía llorando, Fawn me había dicho que no llorara mas o me pondría débil.
Mis pensamientos me llevaron a odiar mucho mas el ser vampiro, si ya lo había asimilado ahora no, si no me hubieran salvado de morir Aiden estaría vivo quizás con otra chica o algo pero seria feliz.
-¿Lira ?¿Estas bien ? - llamo mi madre a través de la puerta.
-si - conteste ocultando mi voz llorosa.
-¿Segura ? No has salido de tu cuarto en toda la tarde - siguió hablando.
-Segura mama.
Dejo de insistir y la escuche irse la verdad que no quería decirle lo que paso pero tendría que contarle la verdad bueno parte de ella, este día no seria quizás mañana.
Mi teléfono volvió a sonar, ignore el sonido lo que he llevado haciendo toda la tarde, no quería ver a nadie mucho menos hablar.
Intente dormir pero no podía era cerrar los ojos y volver a ver la escena donde Aiden moría, donde el sufría, lo que mas me dolía de esto es que no pude salvarlo debí haber echo mas, quizás era hora de entrenar si quería protegerme a mi o a otros, en especifico a mi familia no podía tener la seguridad que el mal nacido de Doyle quisiera secuestrar a alguien mas y hacerle daño.
-Venganza - susurré.
Quizas no era la respuesta, pero en ese momento era mi mas grande deseo matar a Doyle hacerlo nada con mis propias manos y también al que ideo el plan de matar a Aiden.
Odio era lo que crecía dentro de mi.
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Amarte es peligroso
VampiroÉl es, el príncipe vampiro mas aterrador que ha pisado la tierra. A él no lo importa más nadie, que sí mismo. Y no me dejo morir no porque fuera benevolente, si no porque sabia que hubiese deseado mil veces la muerte que ser de esta manera. "-Me p...