“Tus ideas me causan náuseas”
Esa noche Justin estuvo la mayoría de las horas y minutos pensando en Melody como usualmente lo hacía. Sonrió viendo cada foto de ellos juntos, y mientras pasaba las fotos, más amplia se hacía su sonrisa. La inspiración llego a su mente como un remolino lleno de ideas y ritmos, y sonrió. Tomo las llaves de su Porshe, sin avisar y dejar solamente una nota salió de su casa condujo hasta el estudio donde Melody y Justin se veían algunos días y dejaban de lado las asesorías que ahora en día, eran simplemente excusas para verse más seguido, ya que, las calificaciones de ambos subieron milagrosamente. Estaciono el coche y bajó sonriendo, entro a el y se encerró ahí gran parte de la noche. Grabo aproximadamente dos canciones y media, a la mitad de la tercera su celular lo obligo a detener todo para contestar.
—¿Diga?—pregunto y escucho una voz familiar en la otra línea
—¿Justin?—frunció el entrecejo y se dejo caer en el respaldo de la silla rodante frente a los mandos
—¿qué quieres, Ryan?—contesto con frialdad.
«Se lo merece.» pensó con molestia.
—te he hablado para disculparme por lo de la otra tarde, me cegué por los celos de que ya no tuvieras tiempo para tu mejor amigo—dijo Ryan y Justin escucho la sinceridad en su voz, suavizo su rostro y una media sonrisa se asomó por sus labios—¿sabes qué? Me importa un comino lo que quieras hacer, cásate con Melody, llévatela a otro país, has lo que quieras, siempre seré tu hermano, Bieber, sólo no te olvides de tu Buttsy—Justin río fuerte
—tranquilo, Buttsy—dijo Justin—eres mi hermano, jamás me olvidaría de ti—sonrió—¿sabes? Pareces una chica diciendo que estabas celoso
—es que ya no aguantaba las ganas de decirlo, te amo mi amor—ronroneo y Justin río—¿acaso no tomas en serio mi confesión? ¡sabía que eras un mujeriego, Bieber! Me rompiste el corazón, canalla—exclamo con un intento fallido de voz de mujer
—el papel de novia celosa no te queda—dijo Justin—aún así, pensare en tu oferta, cariño—bromeo
—sabía que me deseabas
—parecemos maricas—confeso Justin y escucho la risa distante de Ryan—debo irme estoy algo ocupado
—no me digas que estas en el estudio de nuevo
—no diré nada entonces
—voy para allá
—bien, te espero—ambos chicos colgaron y Justin término la canción. Minutos después Ryan se sentó en la silla en la que minutos atrás Justin estaba sentado hablando con el y escucho las canciones de Justin.
—¿sabes? Caitlin esta algo cabreada por lo que pasó en la cafetería—soltó Ryan de la nada
—¿lo de Melody?—Ryan asintió—¿aún esta dolida?
—según ella sólo esta molesta por que nunca hiciste eso por ella—ambos chicos rieron—Mujeres, nadie las entiende, ni ellas—Justin río.
«¿y si reviso un poco las grabaciones de Melody? No pasa nada con echar una miradita...”
Busco todas las grabaciones y escucharon una por una.
—caray, esta mujer canta como los ángeles—confeso Ryan anonadado con la voz de Melody—si no fuera tuya, ten por seguro que ya me la habría pedido
A Justin se le prendió el foco.
—tengo una idea—sonrió—le pediré a Melody si quiere ser mi novia y para eso necesito tu ayuda—Ryan asintió—¿tu hermana aún está en el club de danza?—asintió de nuevo
Justin comenzó a explicar el plan que paso por su mente y le dio a Ryan las tareas no tan importantes pero cruciales para la propuesta, no quería que por culpa de su descuido de encargarle algo a Ryan todo el plan de vaya a la gran mierda.
—creo que es algo descabellado
—no, es perfecto—sonrió—a partir de mañana comienza la operación “Pedida de Melody”
—Tus ideas me causan náuseas—confeso Ryan fingiendo arcadas
—me tienes envidia de que nunca se te hubiera ocurrió algo así—rasco la cabeza de Ryan y ambos rieron.
«Ojalá funcione.»
