Matsuno sensei!!!

4.2 Mi primer día (Karamatsu)

Cuando el mayor de los sextillizos salió corriendo ninguno hizo algo para ir tras él, la mayoría porque en realidad no querían lidiar con alguno de sus berrinches. Pero fue Karamatsu, el único que mostro preocupación, no lo siguió porque no sabía que decirle.

Luego de debatirse internamente, optó por dejarlo solo.

Debía dejarlo pensar por si mismo.

ーEntonces, vayamos a la oficina del director.

Choromatsu tomo la iniciativa, así que todos hicieron camino a la oficina, Karamatsu se quedó al final de la fila que inconcientemente formaron y miró a sus hermanos.

ーHustle, Hustle, Muscle, Muscle.

Jyushimatsu estaba a la cabeza, se veía tan animado como siempre, el segundo hermano se pregunto cuáles eran las materias que impartiría, una pregunta que compartía con los otros 4.

Choromatsu y Todomatsu, como era de esperarse estaban tranquilos, con un aire profesional que lo ponía algo ansioso. Seguro que se debía a su experiencia laboral, que igual no era demasiada, pero sí, más que la de él.

Ichimatsu estaba justo delante de él, con su espalda encorvada y mirando a todos lados como si temiera que alguien pudiera saltarle encima. Estaba muy asustado.

ーAh... Brother, yo...ーalargo la mano para colocarla en el hombro de su hermano, pero antes de siquiera rozarlo, este se volteó, tirándole un manotazo.

ー¡Cállate!ーlo cortó sin vacilar, dándole una mirada asesina.

Bien, aunque eso lo asustaba (no importaba las veces que Ichimatsu lo hiciera), significaba que al menos tenía energías para responder a lo que consideraba un obstáculo.

ーBuenos días.

Los recibió el secretario, poniéndose de pie e invitándolos a sentarse en unas sillas ya dispuestas para ellos.

ーVeo que falta uno de ustedes.

ーSí, es solo que no se sentía muy bien. Vendrá un poco mas tarde.

Dijo Todomatsu con una sonrisa de disculpa.

ーBueno, supongo que está bien. Ya que su clase es mas tarde...

ーSeñor secretario, me disculpo por esa falta tan grande, de parte de mi hermano.ー habló Karamatsu haciendo una profunda reverencia.

ーCalma. No te preocupes, lo entiendo. Vamos ponte de pie, es vergonzoso.

Ichimatsu lo agarró del cuello de la camisa y lo jaló poniéndolo de pie de manera brusca, casi asfixiándolo. Luego ambos se sentaron.

ーVaya, sí que tienen energia desde tan temprano. Es eso la juventud ¿verdad?

ーLo dice como si usted fuera un anciano, señor secretarioーapuntó Todomatsu, divertido.

La conversación siguió, hasta que al final se dieron cuenta que nada de lo que decían tenía algo que ver con lo que se suponía que hablarían. Así que el secretario retomó el tema principal.

ーComo se habrán dado cuenta, el personal es reducido, solo tenemos una doctora, la sensei que les dio la inducción y otros dos sensei. Así que ustedes son mas o menos el 60% de la plantilla. Sin contar a los administrativos y de mantenimiento. Debido a que ustedes son muchos, les asignare a alguien que los presente a sus grupos.

***

Su mano derecha estaba temblorosa, ansiaba ese tacto liso y firme, Dios, era algo que le resultaba tan natural, que no poder ponerse aquello frente sus ojos le resultaba agobiante.