Han pasado algunos años, son otras personas, ya inició su siguiente vida. El ciclo de la reencarnación no tiene fin, mucho menos para nuestros protagonistas. Ahora son completamente diferentes y ya no comparten sueños en común como en "Syzygy"... pe...
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"No puedo sacarte de mi mente, pudimos haber tenido todo. Mírame, ¿por qué ya no me amas? Quiero volver a ti."
[Daisy – CNBLUE]
–Quietas.
La señorita Nastia pasaba frente a todas, inspeccionando sus uniformes y apariencia personal. Al quedar frente a Miranda, bajó la mirada hasta sus pies.
–Tus zapatillas están sucias.
–No he podido lavarlas, señorita. – susurró. Sentía la mirada de las pocas personas en su clase que no ensayaban para la obra sobre su nuca.
–Sólo toma 10 minutos, no tienes excusas. – miró su rostro con detenimiento, en busca de maquillaje sobrante o algo que afectara su apariencia. –Postura, señorita Ling. Espalda recta– mecánicamente la chica obedeció. –, hombros bajos, levanta la cabecita.
Con su dedo bajo la barbilla le obligó a levantar la cabeza.
–Se lo recordaré una vez más, señorita Ling: los pies soportan todo el peso del cuerpo. Ellos se encargan de coordinar los movimientos, el equilibrio y la maniobrabilidad. Tienen 26 huesos, 32 articulaciones, 19 músculos y más de cien ligamentos. De ellos depende, en gran manera, la salud de sus piernas y columna vertebral. ¿Entendido?
–Sí, señorita.
–Así que por favor, si la sangre de sus zapatillas implica una herida, espero que tome las debidas precauciones al respecto porque lo que menos necesitamos es una alumna en reposo y fuera de clases. ¿Entendido?
–Sí, señorita.
Le observó por última vez.
–Ling, a la barra. – corrió intentando mantener la postura (y la gracia) hasta la barra frente al espejo. La señorita Anastasia se acercó al equipo de sonido. –Te trataré cómo tratamos a los infantes que no pueden limpiar sus zapatillas de ballet por sí solas sino que llaman a mamá para que lo haga.
De alguna manera ese comentario logró herirla. Pero tenía que acostumbrarse, el mundo del ballet profesional no era fácil. Era un trabajo a fin de cuentas.
–Harás ejercicios básicos en barra. Ronde de jambe¹ y petit battement² por una pista entera de cuatro minutos. Dos y dos.
Se tensó, porque si hay algo que Miranda odiaba es hacer petit battements en la barra.
–Cuando termines, ve a la parte de atrás y trabaja con Petit allegroᶟ y luego podrás integrarte a la clase. ¿Está claro?
–Sí, señorita Nastia. – suspiró.
–El resto de la clase, a la barra a mi derecha. Trabajaremos en la primera parte de nuestra clase sus arabesqués. Primero, segundo, tercero, luego promenade en arabesqué. Nuestra pierna de apoyo será la izquierda, nuestra pierna de trabajo la derecha.
