Esperanza //*Daryl Dixon* [COMPLETA]

Capítulo 7

Han pasado casi dos meses desde que llegué aquí, no ha sido fácil sin Mia, a ella le hubiera encantado estar en un lugar seguro por fin, sin esos tipos arruinando nuestras vidas.
Lo único que me ha mantenido aquí es Sofía, en cuanto le dije que me iría no me lo permitió, me pidió que me quedé con ella; que me extrañaría. La relación con el grupo es normal, intento pasar desapercibida durante el día, me mezclo con el resto de las personas de ese lugar llamado Woodbury y así paso el tiempo mientras hablo con los niños o me enrollo con algún joven de por allí. No puedo evitar pasar por los viejos tiempos, no es que lo necesite pero ya es la costumbre. Me dirijo a la biblioteca y me siento en uno de los sillones más alejados para leer tranquila.

Escucho a Beth contarles cuentos a los niños y algunas carcajadas cuando ella hace las voces chistosas, salgo al patio a fumar y me cruzo con algunos habitantes del lugar, me sonríe y yo les devuelvo el saludo, está todo tan tranquilo que llegó a aburrirme un poco. La única acción que eh tenido en estos días a sido matar caminantes, como aquí los llaman, a través de las rejas, veo a Rick a lo lejos y decido ir hasta el para pedirle salir en la próxima expedición por comida.

-Hey Rick!- lo saludo mientras me acerco.

-Sarah, ¿cómo estás?- sonrie mientras apoya una canasta en el suelo.

-Emm, quería pedirte un favor.- lo miro expectante.

--Claro dime.- ríe.

-Quisiera ir en la próxima salida. Necesito algo de ropa.- señalo mi cuerpo para que note lo rota y gastada de mis prendas.

-Bien, arreglaré...- su voz fue interrumpida por gritos que provenían del interior de la prisión.

Corrimos hacia allí con prisa hasta adentrarnos al bloque D donde todo era un desastre, caminantes atacaban a la gente que corría con miedo por los pasillos, tome el cuchillo que colgaba de mi cinturón y comencé a matar a todos los podridos que se cruzaban en mi camino, ví a Maggie correr por las escaleras disparando hacia arriba y los gritos de todos me estaban desesperando. Un niño lloraba espantado mientras un caminante se acerca peligrosamente, corrí hacia el y tome al podrido del cabello clavando mi cuchillo en su cien, envolví al niño entre mis brazos y corrí hacia la entraba donde su madre me llamaba con los brazos abiertos.
El silencio se apodero del lugar, solo se escuchaban las respiraciones agitadas y sollozos perdidos a lo lejos, subimos junto a Rick y Daryl a revisar las celdas una por una, rematamos algunas personas con mordidas hasta que, en la ultima celda que se encontraba cerrada, un caminante se acerco a Rick intentando tomar un poco de su carne, lo tomo de la camisa y clavo su cuchillo en el.

[...]

Al parecer una especie de gripe mato a esos dos muchacho y eso hizo que se transformaran y atacaran durante la noche. Están aislando a los que estuvimos expuestos al virus y los que presenten síntomas como Karen y David quienes fueron movidos al pabellón A, yo por mi parte salí del lugar en busca de aire, se que Sofía está a salvo en el pabellón C junto con Judith y Beth, alejados en las tumbas veo a Daryl y Rick charlar hasta que los gritos desesperados de Maggie me sobresalta, ¿es que este día no acaba nunca?.
Corrí tras ella hasta el alambrado que estaba cediendo al peso de lo caminantes que se amontonaban en un solo lugar, tome una barra y comencé a clavarlo en los cráneos junto a Glenn, Maggie, Sasha, Rick y Daryl. Uno tras otro caían pero parecía no ser suficiente, cada vez más se acercaban y hacían que la vaya caiga hacia nosotros, comenzamos a empujar con todas nuestras fuerzas.

-Oigan, vean esto. Alguien los ha estado alimentando.- dice Sasha mirando a un lado.

Algunas ratas sin cabezas estaban tiradas donde ella señalaba, el ruido de la alambrada cediendo hizo que volvamos nuesta atención allí, Rick le ordenó a Daryl que traiga el camión y a Maggie y a mí que trajeramos algunos postes.