Capitulo 12

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No podía respirar y sentía una gran opresión en el pecho, las ganas de llorar me invadieron en el momento que lo ví aparecer por entre los árboles.

-¡No puedes reclamarla! ¡Yo la encontré en el bosque!- dice el tipo que me trajo hasta aquí.

-Daryl, Daryl, ¿sabes hace cuanto no encontramos una muñequita cómo está?- dice un tipo canoso que al parecer es el líder.

-Dijiste que las reglas del grupo eran reclamar tus cosas, yo quiero a la mujer.- su voz fría me recorre por el todo el cuerpo.

-Joe no puedes permitirlo, ¡esto no es un conejo!- hablo un tipo con un arco en la mano.

El hombre pareció pensárselo un poco y luego de unos minutos en los que pensé que la historia se repetiría hablo.

-Bien, quédatela mientras pienso que haremos.- hizo una mueca mientras los demás hombres se quejaban por su decisión.

Daryl camino hacia mi con decisión y me levanto del brazo con prisa, me arrastró hacia el bosque algunos metros alejados de aquel grupo de hombres, no podía ver su rostro pero si sentía su respiración agitada, en cuanto estuvimos lo suficientemente lejos paró en seco y me soltó.

-¿Que haces aquí?- su voz ronca me estremeció.

-Yo... Cuando salí de la prisión todos se habían ido, estuve perdida en el bosque todos estos días.- Podía ver su espalda y brazos tensarse con cada palabra mía.

-Te dije que te marcharas en el autobús.- susurra.

-No podía dejarlos, te lo dije, ¿Que diablos pasa contigo​ Daryl? ¿Qué haces con estos tipos? ¡Tenemos que buscar al resto!- hablé con prisa mirando hacia atrás con miedo.

-¿Eres estúpida? ¡Ya no hay un resto! ¡Todos están muertos, deberías estar acostumbrada!- voltea a verme con rabia en los ojos.

Sus palabras me dolieron demasiado, mis ojos se llenaron de lágrimas y lo miré con los ojos abiertos de par en par.

-Prefiero ser una estúpida que pretender que nadie me importa y esconderme tras un escudo de chico malo sin sentimiento, estás quedando como un idiota Dixon.- la rabia en mi voz crece con cada palabra.

Daryl se acerca a mi con rapidez y tomandome fuerte del brazo me choca contra un árbol, abre mi camisa de un tirón haciendo que los botones salten y dejando a la vista mi sujetador, lo miro incrédula y asustada mientras pasa una mano por mi cintura desnuda y me atrae a el con fuerza, jala mi cabello hacia atrás y choca nuestros labios con rudeza. Me remuevo intentando soltarme y apoyo mis manos en sus hombros empujando hacia atrás, en ese momento uno de esos tipos aparece por entre los árboles.

-Hey, Daryl, comparte un poco.

-Estoy ocupado aquí.- se separa unos centímetros de mi y responde sin quitar sus ojos de los mios.

-Vamos hombre, no seas...- en cuanto se acerca a nosotros Daryl voltea a verlo con las manos hechas puños.

El tipo levanto las manos en señal de rendición y se alejó por donde vino, acomodé mi camisa con vergüenza y lo miré esperando que hable.

-No te separes de mi, estos tipos son peligrosos.- habla cauteloso.

-¿Sabias que vendría?- susurro entrecortado.

-No te separes.- repite y se marcha hacia el campamento.

Camino detrás de él por entre los arbustos hasta el lugar de donde vinimos, las miradas se posan en nosotros y yo aferro más mi camisa para que nada se vea. Daryl se sentó en el suelo y comenzó a limpiar sus flechas, me senté junto a él y levante la vista hacia ellos pero la bajé con asco frente a sus miradas lujuriosas y necesitadas.

Esperanza //*Daryl Dixon* [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora