Capítulo 4.

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-Connor, a la ducha, no te lo repetiré.-ordenó nuevamente Cinthia.

-Pero mami.-le dijo haciéndole un puchero.

-Pero mami nada.-intervino su padre.-A ducharse.-y se acercó para enviarlo de una palmada.

SWAT auu.

-Kyle.-Le recriminó Cinthia.

-No.

Ella bufó y fue a ver a David por si el niño necesitaba ayuda para cambiarse.

-Mi muñequito, ¿necesitas una mano?.-pero al entrar lo vio ya con su pijama mal puesta e intentando arreglar su cabello.

-Pues... se podría decir.-contestó riendo.

Ella se acercó a él y lo ayudó a ponérse la pijama para luego arreglar su cabello con un cepillo.

-Listo para la noche de películas, mi muñequito.-le dijo con una sonrisa.

-¿Que película veremos esta noche?

-No lo sé, recuerda que ustedes las eligen siempre en el momento... Una vos, una Connor y una el bebé. Creo que papá trajo algunas nuevas.-le contestó ella sentándose en la cama poniendo a David en su regazo.

-Yo quiero Buscando a Dory.-le dijo el niño.

-Siempre que no elijan El rey León, todo bien... Esa película me hace llorar.- Habló mamá.

-A mi también.- balbuceó David.

-Uff... ¿Que otra no podemos ver?- preguntó sonriendo.

-Quiero una de terror.- anunció Connor, quien entró para tomar las chanclas que había olvidado en el cuarto de su gemelo.

-Una así no, por ejemplo.-Dijo David.

-Voy a convencer a Neal.

-Después del baño.

-Vaaaaleee.-y salió corriendo en dirección al baño.

-Voy a ver a Bauti.-anunció Cinthia, le dió un beso en la mejilla a David y se levantó para salir del cuarto.

Cuando iba por el pasillo recibió una llamada de su mejor amiga, la madrina de Neal.

-Hola Kate.

-¿Cinn?- respondió alarmada.

-Si, amiga. ¿Que pasa?

-Estaba yendo a casa. Y como sabes del trabajo a casa paso por tu casa...

-Antigua casa, Kate.

-Vale. Déjame seguir. Pasaba por la casa de tus padres cuando vi una ambulancia, me acerqué a ver a Ian y él me dijo que su madre tuvo un pre-infarto, está muy delicada, en el hospital privado de la calle 46.

-¿Que demonios?-preguntó la mujer.-¿Estas segura?

-Si, cariño.

-¿No sabes que estaba pasando antes del infarto?

-Estaban hablando de Emilie.

-Mierda.

-No te estoy diciendo esto para que te sientas culpable, Cinthia, solo que, si crees que en algún momento podrías arreglar todo ese lío, olvidar los resentimientos y poder encontrar eso que estás buscando desde hace catorce años, este es el momento indicado.-dijo Katherine intentando que su amiga pueda por fin dejar ese tomentoso pasado.

-¿Dónde dices que está?

-En la calle 46.

-Iré. No se cuando pero intentaré no pasar de la semana.

El pasado llega al presenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora