Siguiendo al Corazón, Cambiando el Destino.

Capítulo 18.2: El brillo de una nueva estrella

A excepción de Seiya, Yaten, Sailor Moon y Yumiko, todos los demás perdieron su transformación. Haruka les dijo que ella, Rei, Hotaru y Setsuna, buscarían a Darién y a la mujer que estaba mal herida para l llevarlos al hospital mientras que el resto intentaba recuperar la vida de Taiki para luego llevarlo también al hospital.
Yumiko hizo aparecer más flores de luz alrededor del cuerpo de Taiki para que siguieran irradiando su energía sobre él y el resto continuaba utilizando sus poderes de sanación para intentar que su corazón volviera a latir.

––Es inútil ––dijo Amy entre sollozos––. Ya se ha ido.

––Si tú has perdido la esperanza entonces es mejor que te vayas de aquí ––dijo Yumiko con rudeza en su voz––. Ustedes han vuelto suficientes veces de la muerte, él no será la excepción.

––La dama de las flores tiene razón ––dijeron los caballeros y sacaron sus espadas y las clavaron una enfrente de la otra––. ¡Por el poder de la luz del Príncipe del Rayo!

Literalmente un rayo de luz salió de la frente de cada uno de los caballeros que al juntarse descendió justo en el pecho de Taiki causando que una onda expansiva de luz estremeciera su cuerpo. Los segundos parecieron ser eternos, pero de un momento a otro, como le había dicho Yumiko a Darkiel, la esperanza surgió en un latido y como intentando atrapar el aire que le faltaba a sus pulmones, Taiki volvió en sí.

***

Los días pasaban y todos continuaban atrincherados en el hospital. Como Darién había sido el menos herido, en comparación a las demás víctimas, en un par de días logro recuperarse y estuvo dispuesto a hacer todo lo posible por ayudar a su colega la doctora Nikkie Won y a Taiki, quienes estaban en terapia intensiva por causa de un grave accidente. De vez en cuando Darién salía a la sala de espera y le decía a sus amigos que Taiki se encontraba gravemente lesionado, pero que su pronóstico era favorable y que lo mejor sería que ellos se fueran a descansar un poco ya que luego de la batalla lucían sumamente agotados. Yaten y Yumiko convencieron al grupo de hacer guardias, ellos se quedarían primero a esperar como avanzaba Taiki y luego otros dos podrían ir a relevarlos y así sucesivamente.
A

ntes de que Darién se marchara de nuevo, Serena se acercó para hablar con él un momento y preguntarle cómo estaba, después de todo había estado bajo la influencia de fuerzas oscuras y había sido atacado.

––Iré a comprarles algo a los chicos, luego nos vemos...

––Kou, espera ––Darién detuvo a Seiya––. Creo que les debo una disculpa a ambos, nuevamente me dejé influenciar por la oscuridad ––sonrió sarcástico––. Creo que mi legado es un total estorbo para ustedes.

––Darién, no digas eso, hay cosas que son inevitables.

––No Serena, tenías razón, tú y yo... era algo que no tenía lugar, Andrew me dijo una vez que pensara muy bien por qué me sentía tan enojado, y hasta hoy he sido capaz de saber la respuesta ––sonrió avergonzado––. Tenía miedo, sabía que lo que habías dicho era verdad. Forzosamente intentábamos vivir la vida de dos personas que no existen mas, pero al conocer el futuro temí arruinar lo único seguro que tenía este mundo y también estaba furioso porque tú no te preocupabas por eso, eras lo suficientemente valiente como para enfrentarte a lo que sea y confiabas en que sin importar la decisión que tomaras, todo marcharía bien ––suspiró––. Lamento haberles causado tantos problemas de nuevo.

––Todos nos hemos equivocado más de una vez, pero lo importante es reconocer nuestro error e intentar hacer las cosas mejor ––dijo Serena con una dulce sonrisa.

––Tranquilo docror Chiba ––dijo Seiya tendiéndole la mano––. El miedo es parte de la vida, pero siempre puedes estar seguro que tendrás amigos a tu lado para ayudarte a enfrentarte a ellos. Siempre que tengas dudas, sabes que puedes contar con muchas personas que te quieren y se preocupan por ti para ayudar a aclarar la mente.