Capítulo 6

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-Hermosa. Muy hermosa pero tiene mal carácter- repitió Ezra apenas consciente de lo que sucede a su alrededor.

El joven del bar intenta contener una sonrisa, acostumbrado a estas escenas.

-Tiene razón Señor Black, su novia es hermosa.

-No soy su novia- articuló Alessa en un susurro apenas audible. Una confirmación más para sí misma que para las personas presentes -. ¿Tienen servicio de taxi?

-Sí tenemos pero le recomiendo que llame a algún conocido para que lo trasladen.

-¿Por qué?

-Así evita un accidente vomitivo. Los taxista son reacios a llevar personas tan ebrias, ya sabe... por el bien de sus unidades.

-Entiendo. ¿Podría pedirte un vaso con agua?

-Por supuesto, regreso enseguida.- El muchacho se retira por la puerta donde ingresaron, se pierde entre el gentío y la música estruendosa.

Ezra continúa sentado en el mueble de aquel bar, con la cabeza echada hacia atrás sintiendo el peso de la culpa. La presencia de la muchacha es lo único de lo que es consciente, la cercanía de ella y el olor al que asocia a Alessa lo envuelve provocando cierta calma, huele a mar, a playa, a el sol por la mañana, a coco y sal.

Ella se sienta a su lado sopesando a quien llamar, su ceño se frunce de forma automática, un gesto natural que en su rostro se enmarca cuando está preocupada. Ezra se coloca más cerca de ella, recostando su cabeza en el hombro de Alessa, cierra los ojos intentando conciliar el sueño.

-No te duermas.

-Me siento muy cansado

-Intenta permanecer despierto hasta que venga por nosotros.

-¿A quién has llamado?

-A alguien. ¿Por qué me tienes agendada como "novia"?

-Por serías a la primera persona que llamarían si me sucediera algo.

-¿No tienes a tu hermano como contacto?

-Lo tengo pero nadie agenda a su hermano como "Hermano"

- ¡Ah ¿Pero si puedes agendar a una amiga como novia?!

-Sí pero también es una manera de molestarte.

-¿Molestarme? ¿Cómo?

-Pues podrías estar enrollada con algún tipo y si te llaman por mi causa, te fastidiaría todo ¿no?

-Estás de broma ¿Esa fué tu razón? ¿Fastidiar?

-¿Porqué más lo haría? Eres la única que vendría si me sucediera algo. Yo lo haría, dejaría lo que sea por tí. Así es cómo funcionamos.

-¿Porqué estás tan seguro de eso?

-Que estés aquí lo confirma, ¿tenías algún plan para hoy?- Alessa hizo un movimiento de confirmación con la cabeza -. Pero estás aquí, estás aquí por mí. Puedes negarlo todo el tiempo que creas necesario, la verdad no va a permanecer tanto tiempo en la oscuridad.

-¿Cuál verdad?

-Yo no puedo contestarte eso por tí... Quiero vomitar. ¿Dónde se metió ese muchacho con el vaso con agua?

El móvil de Alessa vibró en su mano, la pantalla muestra un nuevo mensaje.

-Tendrás que tomar agua en casa, vamos.

■■■■

Media hora marcaba el reloj y Milo continuaba sentado en su auto esperando por Alessa afuera del edificio de ella. No contestaba las llamadas ni los mensajes, empezaba a preocuparse.

Un No Tan Tipico Cuento De AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora