Tierra

1.3K 95 181
                                    


El francés se detuvo justo en el momento que iba a clavar su florete en la garganta del otro rubio. Los ganadores se giraron con sorpresa para ver como su amigo/enemigo (a veces más enemigo que otra cosa) corría hacia ellos como si no hubiese un mañana. Francis no pudo evitar sonreír con alivio al ver que Antonio seguía vivo y ni cuenta se dio que había soltado el arma de la impresión que le dio. Gilbert y él fueron a su encuentro y el español no tardo en encontrarse apretujado por sus dos grandes amigos. "El bad touch trio" estaba unido de nuevo.

-Mon dieu, Espagne! ¡Estas en los huesos!- Exclamo lo obvio al separarse pero aún manteniéndole cogido de los hombros, como queriendo convencerse de que sí, que Toño estaba ahí, con ellos- ¿Te encuentras bien? Pareces agotado.

-Pronto te llevaremos a nuestro barco y todo habrá acabado- Añadió el albino con una risita- Ya tendrás tiempo de pagarnos tu rescate o de agradecernos como es debido kesesese~

Antonio temblaba y lloraba sin poder evitarlo de la emoción. ¡Era libre! ¡Sus amigos habían venido a buscarle! Les miraba divertido y curioso, disfrutando de ese pequeño momento de preocupación que le brindaban esos dos. Parecía mentira que a veces lucharan entre ellos, pero ya se sabe, la lucha por el poder no entiende entre amigos o enemigos y la nación esta, muchas veces, por encima de cualquier sentimiento.

Mientras Francis y Gilbert no paraban de mirarle y tocarle como si de una figura de porcelana china se tratase, en busca de cualquier herida, sus ojo esmeraldas se posaron en el pirata que cansinamente, con un esfuerzo sobrehumano le sonreía desde el suelo. Desde luego, la bota del francés había pasado por el rostro inglés a juzgar por los moratones y la enorme brecha que tenía al lado derecho, un poco más arriba de la poblada ceja inglesa.

¿Todo había acabado? Se preguntó internamente el castaño sintiendo que algo dentro de él se encogía. ¿El trato había llegado a su fin? Pero sí...

-Deja de mirarme así, spaniard... Deja de mirarme con esa cara de estúpido. No necesito tu compasión- Arthur habló como lo solía hacer antes de que todo aquello empezara: con su altanería y orgullo intactos a pesar de la derrota-Supongo que estarás contento de librarte de mi...- Lo ultimo lo dijo como en broma, como si fuera algo obvio después de todo le había esclavizado, pero se notaba cierto timbre de pesar que claramente compartía y percibía el ibérico.

-Tu cállate.- Espeto Francis- Antonio, si quieres vengarte de cualquier cosa que te haya hecho este cejotas, aprovecha ahora.

-A no se que quieras que lo hagamos nosotros por ti. Este idiota no me ha dejado divertirme mucho... ¡El muy egoísta!

-Es que eres muy lento en todo y claro, no voy a estar esperando a que la ancianita desenfunde y se cargue a un marinero.

-¡Uy! ¡Atrévete a repetirlo!

-¡Lento cual tortuga! Pufff, y encima lo niegas, de verdad ¿Dónde están tus modales? Que ganas tengo de perderte de vista de una vez.

-¡Lo mismo digo, franchute de pacotilla!

Las chispas saltaban entre esos dos; había cosas que ni con el tiempo cambiarían, ni siquiera tras una temporada en alta mar.

El castaño mientras tanto se agacho a la altura del Arthur quien se sorprendió por dicho acto. El tener ahí al español, observándole estando él malherido, acabado, derrotado, hizo que desviará los ojos a otro lado. No quería que Antonio le viese así, en esa situación tan humillante mas el otro le cogió de la barbilla, obligándole a que mantuviese la mirada al frente y se perdieran ambos en el verde del contrario.

-Arturo...- Le llamó y el otro se estremeció, frunciendo levemente el ceño por el esfuerzo de no caer de agotamiento sobre el suelo- Arthur, quiero que sepas que... Bueno, no quería que esto acabará así.- Soltó una risilla nervioso. Uno no sabe que decir cuando ves a la persona que más has odiado y que a la vez quieres, de rodillas. Quería decirle tantas cosas, pero las palabras no parecían suficientes para transmitirle al rubio todo lo que sentía, lo mucho que lamentaba esa situación y el como desearía que las cosas hubieran sido diferentes- Creo... Que te voy a echar de menos.

Océano de Esmeraldas (Hetalia/Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora