"No le temas al amor"

Capítulo 8

Sus ilusiones con aquella hermosa mujer, se rompían de golpe.

A qué estaba jugando Maria?

Habían pasado hermosos momentos, en México y ahora en Nueva York, porqué derrepente no quería seguir con él?

Volvería con su ex novio?

-Necesito que me expliques Maria, pero ahora lo importante es tu papá. -Le dijo mientras esperaba que contestaran la llamada que había realizado. -Bueno?... Por favor, necesito dos pasajes para la ciudad de México, el vuelo más cercano por favor... Es urgente! -Mientras le indicaban los vuelos y él aceptaba, Maria fue a la habitación para recoger sus cosas. Por qué le había dicho eso? Estaba enamorada de él, pero su padre necesitaba su ayuda... Lloró al recordar que por su culpa, él se encontraba muy grave en el hospital.

Se sentó en la cama, mientras lloraba, porque todo tenía que ponerse en contra de ella. Cuando había creído que el amor había llegado a ella, ahora se lo arrebataban de la peor manera, por un juego sucio del destino. Se dejó caer de espaldas en la cama, se cubrió el rostro y siguió lamentandose entre lágrimas.

Esteban entró a la habitación, no entendía que sucedía, pero verla tan vulnerable, llorando le hizo entender que la amaba. Jamas había sentido ese dolor en pecho por ver a una mujer llorar. Se acercó con cuidado a la cama, se sentó a su costado.

-Que te pasa peque? Dímelo amor por favor, podemos solucionarlo. Ésta claro que ninguno de los dos está contento con lo que has decidido. -Musitaba mientras le acariciaba el cabello, esa melena negra, suave y sedosa, que lo traía loco. -No llores por favor, me duele verte así.

-Te quiero Esteban, te juro que te quiero, pero no podemos seguir juntos... -Dijo entre sollozos.

Él suspiró, cerró los ojos y después de buscar las palabras para hablarle, le preguntó.

-Porqué? Porqué Maria? Si me quieres, por qué quieres dejarme? -Ella lo miró, veía tristeza en los ojos de él, y se sintió mal de ser la causante de eso.

-No es por mi... Por favor no me preguntes más. -Ofuscado, Esteban se puso de pie.

-Muy bien Maria, no preguntaré más. Pero en cuanto tu padre esté recuperado, tu y yo vamos a tener una conversación, por él momento queda pendiente. Arreglate, salimos en una hora para el aeropuerto. -Dijo molesto, la miró por ultima vez y salió de la habitación. Ella rompió en llanto una vez más.
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Aeropuerto Internacional Newark Liberty - Nueva York

Esteban discutía con la joven de recepción, mientras Maria esperaba a unos metros con sus maletas, observando los gesto de él. Que estaría pasando? Lo veía enfadado, habrían perdido el vuelo? Se puso nerviosa, tenía que llegar a México cuanto antes, su papá se debatía entre la vida y la muerte, y gran parte por culpa de ella. Al menos pensaba Maria.

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Durante el camino del hotel al aeropuerto, no habían conversado absolutamente nada. Sin embargo Esteban sin poder evitarlo había tomado su mano, contacto que Maria agradeció y correspondió con un beso en la mejilla. Él le sonrió con tristeza y volvió su mirada a la ventanilla de su lado. Verla era un castigo, sabiendo que pronto se iban a separar.
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Maria fruncio el ceño, que le pasaba?

De pronto Esteban con el semblante tenso, se acercó a ella.

-Vamos a la sala de embarque. -Musitó y avanzó sin esperarla. Ella corrió hasta él, en cuanto lo alcanzó, pasaron a sala de embarques juntos.