Capítulo 14.

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Como de la nada una ráfaga de  viento con hojas y polvo nos golpea a mi y a Laurel.

Laurel- Como no, tu tenías que ser verdad Brayan.

Brayan- Que mal humor Laurel,como siempre, solo era una broma mujer.

Laurel- Si, tu siempre con tus bromas pesadas, se nos ha metido el polvo en los ojos sabes.

Brayan- Los ojos se cierran sabéis.

Laurel- Ja ja ja, que gracioso eres Brayan.

Brayan- No hombre, lo siento, se cuando la he cagado y ahora mismo lo he hecho, pero os prometo que no lo he hecho queriendo, a sido solo una pequeña broma.

Laurel- No importa, no pasa nada.

Brayan- Ey y.. Laurel, ¿tu amiga?.

Laurel- A si, ella es Rocío, es nueva aquí.

Brayan- Pues encantado, pero no recuerdo haberte visto por aquí antes.

Laurel- Nunca a estado aquí.

Brayan- Entonces, ¿de donde viene?, y ¿cómo es que está aquí?.

Laurel- Ella es de la tierra, o al menos viene de allí en estos momentos.

Brayan- ¡¿ Cómo que es de la tierra?!, estas loca trayendo a una humana aquí?!.

Laurel- Ella no es humana, esotra como nosotros.

Brayan- Está bien, si es una de nosotros que lo demuestre con un hechizo o algo que tenga que ver con nosotros.

Laurel- Acaba de llegar, te recuerdo que se crió en la tierra gracias a la guerra que empezó aquí Brandon y que todos los niños tuvieron que huir, incluidos tu y yo, solo es que nosotros regresamos, pero ella no.

Brayan-¿ Y por qué ella no volvió?.

Laurel-¿ Como va a volver a un lugar que no sabía que existía hasta ahora?.

Brayan- No se por donde empezara creerme esto la verdad, lo único que puedo percibir de ella es un poder, pero sin valor alguno.

Rocío- No por ahora. El poder hay que ir entrenándolo y más con la edad a la que he descubierto esto que le a dado la vuelta a mi vida y la a puesto patas arriba.

Brayan- Mira pero si la amiga callada sabe hablar.

Rocío- Pues claro que se, y para tu propio bien espero que no me tengas que escuchar hablar.

Brayan- Vale, la chica se revela.

Laurel- Brayan, es mejor que sigas con lo que estabas haciendo y te vallas.

Brayan- Me voy porque lo que estaba haciendo al menos me tenía entretenido.

Cuando se va Brayan, le lanzo una mirada asesina por lo mal que se a referido a mi, como si fuese cualquier otra humana que no pinta nada aquí.

Rocío- Que amigos más repelentes tienes Laurel, entre Nerea y Brayan, como todos los demás sean así me da miedo conocerlos. (bromeo).

Laurel- No te preocupes, los demás seguramente te caerán mejor, te lo aseguro. Pero ya mejor los vamos conociendo mañana, está anocheciendo, es mejor que regresemos a casa.

Apenas regresamos a casa,cenamos y apenas me dio tiempo a acostarme cuando caí rendida en el sueño. Pero volví a soñar de nuevo con esa mujer a la que tenían apresada, solo que esta vez, estaba sola, encadenada en una celda,con la mirada perdida, con una respiración lenta y dificultosa, se podía ver y apreciar que este lugar estaba lejos de una fuente de oxígeno, tenía moratones en los brazos y algunos en las piernas,tenía la ropa hecha a tiras, como si la fuesen sometido a un maltrato o bien constante o reciente, no paraba de repetir mi nombre en voz baja una y otra vez, yo no podía apartar la mirada de ella,no lograba acordarme del nombre, y como si me hubiese escuchado, me recordó, mi nombre es Brittany. En ese momento, me desperté, ya que Laurel me llamó para que me despertase.

Laurel- Rocío, vamos,despierta, quiero enseñarte una cosa.

Abro los ojos lentamente, pero veo que aún no a amanecido.

Rocío- Laurel, ¿pero qué haces?, ni siquiera es de día.

Laurel- Lo sé, por eso quiero que te levantes.

Me levante de mala gana, ya que apenas he dormido esta noche por culpa de ese sueño tan raro.

Laurel- Venga vaga, no tardes tanto o al final te lo acabarás perdiendo.

Rocío- Voy, voy.

Salgo al patio, y en cuanto salgo por la puerta abro los ojos como platos, eran como unas pequeñas luciérnagas, pero cuando miro mejor, veo a unos diminutos seres con pequeñas alas de mariposa opacas, con pequeñas piernas y brazos, casi parecía, un hada diminutísima, lo habría creído de no ser por sus orejas picudas como las de un elfo, la cara como la de un duendecillo, y ojos completamente negros, todo su cuerpo daba lugar a una luz radiante y pura.

Rocío- ¿Pero qué son esos pequeños seres luminiscentes?

Laurel- Son fascinantes¿verdad?, son los guardianes de la noche, su trabajo consiste en guiar a los que se pierden en la noche. Te he llamado ahora porque es cuando se retiran, y se ven a todos juntos, adentrándose en el bosque. A noche pensé que sería precios que vieras esto.

Justo cuando acaba de hablar, se ven a estos pequeños guardianes dirigirse todos hacia el bosque,como Laurel había dicho, solo que no tenía nada que ver, aquello era precioso, esas pequeñas luces blancas como las de las estrellas,se unieron a las luces anaranjadas y rojas del amanecer, así formando como una noche estrellada, solo que en este momento, el cielo no estaba tornado de negro, sino de colores naranjas y rojos,un momento precioso, se veía como iban desapareciendo en las profundidades del bosque, a medida que amanecía.

Rocío- Es el momento más bonito que he visto en mi vida. A sido precioso.

Laurel- ¿Quieres volver a casa para desayunar?.

Rocío- Si vamos, estoy hambrienta.

Volvemos a la casa, ya cuando desayunamos recogí mis cosas, ya que era domingo y antes de que empezara a atardecer aquí tendría que estar en casa. Ya que volvía a ser domingo y el lunes había que volver a clase, por desgracia,pero lo bueno es que a las clases le quedaban un telediario ya que solo les quedaba un mes para acabar.

Brayan- ¿Ya te vas?

Rocío- Si ya me voy, ¿porqué?, creo que eso a ti no te importa ¿no?.

Brayan- He he chica, cálmate un poco, que únicamente te he preguntado, por una vez que no voy hablando mal, y tu me contestas así.

Me fui en ese mismo instante, no quería arriesgarme a que soltara cualquier estupidez al final de la oración. Entré a la casa y apresuré a Laurel para que nos fuésemos y si ella no quería irse, volvería yo sola a casa, se estaba haciendo tarde y no quería volver a ver a Brayan en todo lo que quedaba de día.

Dos jóvenes brujasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora