Capítulo 6: "Ya no es lo mismo".

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- No, tranquilo, no estábamos hablando nada importante.-James se levantó del sillón y fue al encuentro de aquel chico.-Bueno los presento, _____ mi primo Zac Maslow, Zac ella es MI novia ______.

Notaba a James algo nervioso y especialmente cuando nos presentó. Nosé si fue mi idea o recalcó bastante las palabras "Mi novia", aunque bueno debo admitir que me gustaba bastante como sonaba saliendo de él.

- Un gusto conocerte al fin _____.-Zac se me acercó y depositó y beso en mi mejilla.
Un beso bastante largo y marcado como para ser un simple saludo.-Pensé.

- Bueno Zac ahora que ya conociste a mi esposa, te mostraré tu habitación, Vamos.-Lo impulsó llevando su mano a la espalda de Zac hasta que salieron de la habitación.

No había visto bien a Zac hasta que se acerco a saludarme. Tenia los ojos de un color azul profundo que podías pasar minutos, hasta horas mirándolos, Las facciones del rostro muy bien definidas y bueno en lo demás se parecia a James, solo que Zac tenía un poco de barba.

¿Que me estaba pasando?, estaba como una idiota pensando en el primo de mi novio. Al instante en que me dí cuenta negué con mi cabeza y luego salí de la habitación.

- Amor íremos a ver unas cosas en la oficina. Volvemos luego.-Llevó una mano a mi cintura y luego me besó de manera intensa.-Nos vemos.-Dijo luego de que nos separaramos, me sonrió y luego caminó hasta la puerta.

Zac caminó un poco hasta estar frente a mi luego me miró y me sonrió de lado.

- ¿No te gustaría venir con nosotros?.-Me preguntó al fin.

Miré a James esperando que el también me dijera que los acompañara pero este solo miró su reloj.

- Zac vamos, se nos hace tarde.

- Será para la próxima.-Le sonreí de lado y luego me volteé.

Me encantaría haber podido ir con ellos, la verdad de hace días que no salía de la casa, solo me he dedicado a los deberes y a cuidar a mi hijo y ademas de todo eso, sentía que James ya no me miraba como antes, ya no me besaba como lo hacía antes, en las noches ya no me abrazaba, solo me daba las buenas noches y se volteaba para su lado hasta quedarse dormido.

 Ya no conversabamos, y habían veces que hasta no nos veíamos en todo el día, pero aun así a él no le interesaba como me había sentido, si estaba aburrida, si me sentía bien. A veces hasta pensaba que él ya no sentía lo mismo que antes, quizás estaba enamorado de otra persona y a mí solo me veía como la madre de su hijo. En fin, lo único que me daba ánimo era que pronto retomaría los estudios y podría salir un poco de la rutina.


Perdona Pero Creo Que Te Necesito (James Maslow)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora