Perdona Pero Creo Que Te Necesito (James Maslow)

Capítulo 50: "Discurso".

Habían pasado dos días, James ya había sido dado de alta, ahora se encontraba a mi lado, escuchando lo que el cura hablaba en el funeral de nuestro hijo. Estaban ambas familias presentes, y frente a nosotros el pequeño ataúd con el cuerpo de nuestro pequeño.

Era sin duda una imagen desgarradora, un momento que jamás, ni en mis peores pesadillas se me había pasado por la cabeza vivir algún día, pero lamentablemente aquí estábamos. James tomándome de la mano mientras las lágrimas no paraban de caer sobre sus mejillas.

Estábamos destruidos, completamente devastados, sin poder creer aún todo lo que nos estaba pasando. 

El cura había terminado de hablar, para dar paso a mi discurso fúnebre. Me levanté de mi asiento, y James me esbozó una pequeña sonrisa forzada. Tomé camino hasta quedar justo frente al ataúd de mi hijo.

"No sé siquiera como empezar, nunca me imaginé estar en esta situación. Y es que no tengo palabras para describir el dolor que se siente perder un hijo, es como si hubiesen arrancado una parte de mí, me arrebataron lo que más quería en este mundo. Siento rabia, impotencia, pero más que nada tristeza, al saber que tuviste que partir siendo tan joven y teniendo toda una vida por delante. Solo espero estés descansando en paz de este mundo que no merecía a un angelito como tu. Espero sepas y tengas más que claro que te amamos, y que a pesar de no estar físicamente estarás por siempre en nuestros corazones, tu hermosa sonrisa , tan tierna y pura permanecerá por siempre grabada en mi memoria, porque las personas mueren solo cuando las olvidan y tu para mi no morirás jamás, porque si de algo estoy segura es que nos volveremos a encontrar. Hasta siempre mi pequeño Austin.".