Capítulo 18: "Después de todo".

162 10 1
                                    

De apoco fui abriendo los ojos y me sobresalté al ver que no estaba en mi habitación, pero rápidamente recordé lo que había pasado. Miré mi alrededor y me percaté que Zac no estaba a mi lado.
Me giré hasta quedar de lado para poder ver la hora en el reloj, ya eran las 11:00am, ¡el desayuno de Austin!, Mierda, se me había olvidado.

Me levanté rápido de la cama y sentí un leve mareo pero no le tomé importancia, solo quería ver a mi hijo.
Me acerqué a la cuna y me preocupé al ver que no estaba, miré a todos lados, pensando que iba a hacer, y de pronto el sonido de la puerta abrirse me hizo rápidamente girarme a ver quien era.
Para mi buena suerte era Zac.

- Buenos días dormilona.-Se acercó a mi con Austin en sus brazos.

- Buenos días.-Sonreí aliviada al verlos.

- ¿Como dormiste?.-Pasó por mi lado y se sentó con Austin en la cama.

- Bien.-Dije poco convencida.

- Si quieres duermes un poco más, yo me encargo de cuidar a Austin.

- No, Zac. No te preocupes.-Pasé frente a él y me senté a su lado en la cama.

- A Austin le encantó el desayuno hoy.-Me sonrió.

- Gracias por preocuparte de él.-Llevé mi mano hasta su brazo y al momento de hacer contacto con este, ambos nos miramos.

- ¿Por que no te conocí antes?.-Se lamentó.

- Tal vez no nos conocimos antes pero por algo el destino nos juntó ahora.-Le sonreí involuntariamente.

- No podrías haberlo explicado mejor.-Me devolvió el gesto y luego ambos comenzamos a acercarnos lentamente pero nos detuvimos ya que Austin le pegó a Zac un puñetazo en la cara, a lo que este reaccionó con una carcajada.-Está bien Austin, no le daré besos a tu mamá, entiendo.-Dijo entre risas haciendo que soltara una leve carcajada.

Me encantaba que Zac fuera tierno con Austin, que lo cuidara, que se preocupara por nosotros.
Me estaban pasando cosas con él, eran sensaciones y sentimientos distintos a los que me hacía o hizo sentir James.
Quién sabe que pasara con lo nuestro, después de todo él era el padre de mi hijo y además mi esposo.

Perdona Pero Creo Que Te Necesito (James Maslow)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora