Pienso que te preguntaras qué pasó por los meses que llevo sin subir nada, sé que me demoraba mucho pero nunca tanto como ahora y es que hay muchas cosas en mi cabeza.
Dije que no descansaría hasta terminar mi historia, me lo prometí a mí misma pero hoy por hoy no me siento bien con esto. Escribir no es fácil y no es hasta ahora que me doy cuenta, esta plataforma te abres sus puertas para que tú abras las tuyas y ese camino es el difícil.
Yo no quería que esto pasara, de verdad, cada vez me exigía que no podía tirar la toalla y ya, porque me había costado, sabe Dios que sí lo hizo. Pero es que no me siento cómoda, siento que ya perdió el encanto y me da miedo que tú también notes lo mismo. Me da miedo el fracaso, me da miedo llegar a la cima y después caes vertiginosamente.
Pero para serte aún más sincera es que ya no doy más, no me gusta cómo estoy llevando la historia, y es que ya no soy la misma. Empecé con esto cuando tenía catorce años, era una niña que le encantaba lo típico y estoy segura que te diste cuenta en los primeros capítulos, me gustaba escribir aquello que era imposible a mis ojos. Me gustaba que la típica chica tuviera una típica mejor amiga con una típica vida, eso no hace nada más que desear una vida que no tenemos, no era más que una historia sin enseñanza ni mensajes de por medio.
Hoy, teniendo diecisiete años, déjame decirte que la visión que tengo me ha cambiado 180°, durante estos años he leído mucho y me he dado cuenta qué es lo que realmente me gusta leer, leer es disfrutar y pienso que así se debe sentir escribir. Me gusta disfrutar de una buena lectura, me gusta quedar reflexionando sobre todas las escenas que marcaba cada página, cada vivencia y cada vida de los personajes que se asemejan a la realidad, quiero que tú llores, rías, que leas una frase y la escribas o la guardes en tu galería porque la encontraste genial, como lo hago yo cada vez que leo, quiero que los sentimientos que yo quiero plasmar en la historia te mueva el piso, que digas que esa fue una gran escena, que fue una buena narración, una buena historia entre dos personas. Quiero que se mezcle lo clásico romántico pero con un toque de originalidad. Quiero respuestas sarcásticas que me encantan, quiero que sientas que eso sí les pueda pasar a ustedes, no que a la edad de dieciséis años tengas un auto de último modelo exactamente el mismo que tu mejor amiga.
Ya basta, mi yo de ahora se aburre con eso y no me quiero imaginar los que te aburre a ti, me cansé de seguir la línea, que no está mal, eso del chico popular con la chica que no se soportan y luego se aman, a veces funciona pero no creo que sea mi caso. He leído increíbles historias que me encantan primeramente porque es lo que yo quiero algún día llegar a escribir, es por eso que me lo tomaré con calma.
Te ruego que me perdones, pensaras que todo esto no ha sido más que un show y de verdad lo siento, lo que estoy pasando ahora no se lo doy a nadie porque cuando uno comienza algo deber terminarlo, así es como me enseñaron. Pero en ocasiones las primeras veces no son las mejores, es por ello, que me tomaré el tiempo que necesito para comenzar aquello que anhelo. Quiero escribir eso está claro, pero sobre qué aún está en estudio, no quiero volver a decepcionarme ni a mí ni a ti porque ninguna de las dos se lo merece, no otra vez.
Sin nada más que agregar, digo un hasta pronto.
I.Q
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Es solo un amigo... creo
Teen FictionSophia Milani hija de dos grandes abogados italianos posee la vida que toda adolescente de dieciséis años quisiera; pelo largo castaño, ojos verdes y de estatura promedio que deja a más de uno con la boca abierta. Ella junto a su mejor amiga Allison...