CAPÍTULO 6:
Lourdes.
Agus me había pedido si la podía perdonar solo por hoy su día de limpieza, sinceramente no me molesta. Cuando ya todos se habían ido a sus respectivas camas y solo quedábamos Guille y yo, me dispuse a acomodar y limpiar la cocina ya que había quedado hecha un desastre.
Si fuéramos menos integrantes en una casa, sería mucho más fácil ordenar todo.
-Yo lavo y tu secas y guardas.-Ordené a mi compañero mientras me colocaba los guantes para limpiar los trastes sucios, cogí la esponja y le coloqué detergente, cuando ya hizo suficiente espuma comencé a fregar plato por plato, vaso por vaso, cubierto por cubierto hasta que ya tenía todo enjabonado. Enjuague todo y le pasaba las cosas a Guillermo para que vaya secando y guardando las cosas en sus respectivos lugares.
Cuando solo me quedaba por enjuagar los vasos, al idiota de mi compañero se le dio por salpicarme agua con jabón, haciendo que me cayera en el ojo.
Obviamente esto no podía quedar así, debía vengarme, así que con mi mano mojada le refregué toda la mejilla, haciendo que algunas gotitas quedaran en ella.
-No debiste haber hecho eso.-Enarcó una ceja.
-¿Me estás amenazando?-Espeté desafiante.
-Tómalo como tú quieras.-Me respondió de igual manera.
-Tú lo comenzaste.-comenté antes de abalanzarme sobre él y refregarle todo jabón por su suave cabello.
Éste como respuesta cogió la manguera del fregadero y comenzó a mojarme por todo el cuerpo. El agua estaba helada, está bien que estábamos en mitad de verano, pero a la noche refrescaba un poco, y yo solo me encontraba en short y musculosa blanca a rayas turquesas.
-Te vez mejor con ropa mojada.-susurró para él, pero lamentablemente logré oírlo. Dirigí mi mirada hacia mi vestimenta, y lo que vi, no fue justamente lo que hubiera querido ver.
-MIERDA!!-Se notaba toda mi ropa interior negra.-Te voy a matar Racca.-Le grité abalanzándome hacia él nuevamente, comencé a golpearlo frenéticamente en el pecho, pero claro. Él ni se inmutó, lo único que hizo fue cambiar nuestras posiciones, quedando yo debajo de él, y comenzó a hacerme cosquillas. Las odiaba, ya que me hacían reír como una loca maniática recién ingresada al loquero.
-¡Déjame!-Grité con todas mis fuerzas intentando contener las carcajadas.
-¡No! Tú me golpeaste, es injusto.-Dijo burlonamente.
-Para, por favor.-Dije con lo último que me quedaba de oxígeno en los pulmones. Éste paró al instante y me miró esperando a que dijera algo.
-Te propongo un trato.-Dije cuando logré recuperar el aire suficiente para hablar.
-Soy todo oídos.-Comentó colocándose una mano en la barbilla como si estuviera pensando.
-Pateas cinco penales, si te atajo la mayoría, tú harás la limpieza solo. Y si no los atajo, yo lo haré sola.-Dije, ya que claramente, los dos limpiando no funcionaba.
-Mm.. Acepto.-Dijo después de unos segundos de meditarlo.
-Bien, terminemos con esto y vamos hacia la sala de entrenamiento.-Dije luego de que me ayudara a ponerme de pie. Cuando ya habíamos terminado de enjuagar lo que quedaba, nos dirigimos hacia la habitación de entrenamiento.
Él se colocó sus respectivos botines, y yo me puse unos guantes de arquero que había por ahí.
Me coloqué en el medio del arco luego de haber tocado todos los palos.
Guillermo colocó la pelota fuera del área chica, y en el centro donde había un círculo blanco con la medida de la pelota.
-Bien, entonces pateo cinco penales, si te meto la mayoría, tu sola harás la limpieza por una semana, y si sucede al revés, que no creo, pero si así es, yo lo haré y por una semana, ¿De acuerdo?-Argumentó. Mi respuesta solo fue un asentimiento de cabeza. Toda mi atención estaba puesta en sus pies y en la pelota, todo lo demás no existía...
Y así agarró carrera y pateó la pelota colocándola en el ángulo superior derecho, había sido gol. Puta Madre!
Lu: 0- Guille: 1.
-¿Aún quieres seguir jugando Lu?-Preguntó arrogantemente.
-Cállate y patea el segundo penal, eso solo fue un calentamiento de mi parte y solo dejé que fuera gol para que no te sintieras tan mal cuando te atajara los demás.-Comenté esta vez yo terminando con un guiño de ojo de mi parte.
-Si seguro.-Rodó los ojos. Hizo el mismo procedimiento que anteriormente, y me preparé para recibir la pelota. Ésta vez me tiré hacia el lado derecho, pero lamentablemente para mi, el había pateado al centro del arco. Fue gol.
Lu: 0- Guille: 2.
-Ohh vamos Lu, ya es demasiado orgullo pisado para ti, mejor dejémoslo ahí.-Su burla se notaba a kilómetros. Pero algo que odio es perder.
-Quedan tres penales más todavía, no cantes victoria.-Comenté lo demasiado alto para que me escuchara.
-Cómo quieras.-Dijo y colocó la pelota nuevamente en el círculo.
Pateo la pelota, queriéndola meter por el ángulo inferior izquierdo, pero ésta vez fui más rápida y se la atajé. Toma eso!
Lu: 1- Guille: 2.
-Fue a propósito ésa.-intentó explicar para que su orgullo no se viera herido.
Sin recibir una respuesta de mi parte, pateó nuevamente, y otra vez, la atajé.
Lu: 2- Guille: 2.
La cosa se estaba poniendo bastante seria, éste penal lo definía todo, y como si se tratase de vida o muerte, la tensión era palpable.
Ésta vez un hubo comentarios ni nada, solo se podía oír nuestras respiraciones. Pateo con demasiada fuerza para mi gusto, cerré los ojos para no ver el impacto, pero lo sentí y sí que dolió. La pelota había impactado justo en mis tetas! Lo bueno es que no entro, por lo tanto gané.
Lu: 3- Guille: 2.
El dolor que sentía era insoportable, pero la felicidad de haber ganado era aun mayor y tenía que refregárselo en la cara, asique con todas mis fuerzas formé una sonrisa de oreja a oreja y lo miré fijamente a los ojos, su cara era una muestra pura de asombro y enojo.
-Pero.. ¿Cómo? Digo, tu eres solo una bailarina y yo un jugador de fútbol, ¿Cómo es posible?-balbuceaba aún sin poder creerlo.
-Lo siento amigo mío, pero debería practicar un poco más, un jugador delantero como vos debería saber patear penales, es una pena.-La burla en mi voz era muy notoria.
*Guille en multimedia*
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Sueños.
Teen Fiction¿Que pasaría si juntáramos a nueve personas en una casa? Cada uno tiene un sueño que cumplir, pero para ello deben convivir con el sexo opuesto durante tiempo indefinido. 5 Chicas. 4 Chicos. Peleas, Gritos, Romances y Separaciones. ¿Estás dispuesto...