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Cuando cumplió once, una repentina ola de valor se apoderó de su cuerpo. Tenía ganas de decirle al mundo completo que le gustaba Jeonghan. Así que partió por su ahora mejor amigo, Hong Joshua.
—Así que te gusta Jeonghan hace cuatro años... Eso es mucho, Cheol.
—Pues así me gusta —se encogió de hombros—. No me vayas a acusar...
—Por supuesto que no... ¡Pero no se te vaya a ocurrir enamorarte de mi!
—¡Joshua! ¡No! No me gustan los hombres...
—Pero... Seungcheol, Jeonghan es un niño...
—No, verás... Es un ángel, y los ángeles no son niñas ni niños —dijo feliz lo que siempre había repetido desde que su madre se lo había afirmado a los ocho años.
Joshua, en vez de asentir y darle la razón como Seungcheol esperaba, se rió. Explotando saliva en su mano derecha, como burlándose del mayor.
—No me digas que aún crees eso... Es solo una fantasía, como un cuento de hadas. Los ángeles no existen.
—¿Entonces que es Jeonghan? ¿Ah?
Joshua mira dos veces más a su amigo, como buscando algo que le diga que es una broma, pero se encuentra con Seungcheol totalmente serio y esperando recto por una respuesta real.
—Es un chico —dijo—. Jeonghan es un chico, tiene once años, una hermana gemela llamada Saebom la que parece ser su única amiga. Es, de seguro, el chico de su familia y como es el chico de su familia, le gustan las chicas.
—A Jeonghan no le gustan las chicas —soltó Seungcheol sin si quiera pensarlo.
Joshua lo miró extrañado, frunciendo el ceño y mordiéndose el labio al mismo tiempo.
—Te gustan los chicos —sentenció.
Y Seungcheol se preguntó si su madre le había mentido todo el tiempo.

Fue en el almuerzo cuando Jeonghan se sentó justo al frente de ellos junto a su hermana. Saebom mirándolos y jeonghan dandole la espalda. Joshua se había quedado quieto durante todo el día, con miedo de decir algo que fuera herir a su compañero, pero seguía a su lado, porque no pensaba que, el hecho de que a Seungcheol le gustara un chico fuera a cambiar mucho las cosas.
—¿Por qué no le hablas? —dijo de pronto, haciendo que Seungcheol dejara de comer y mirara al frente.
La verdad es que seungcheol había pensado un montón de cosas relacionadas con Jeonghan todo el día, una de esas era hablarle, pero en su imaginación siempre estaba él tartamudeando. Pero tenía once, y tenía una repentina ola de valor dentro de él. Así que después de desquitar ¿que digo? y ¿esta bien esto? con Joshua, se paró y camino hasta la mesa de los Yoon.
Saebom lo notó primero, se sonrojó e hizo como si no lo hubiera visto, entonces llegó junto a Jeonghan y se sentó justo a su lado, sus codos casi tocándose. El chico que Seungcheol siempre había aclamado era un ángel, miró hacia arriba y se encontró con él, entonces bajó la cara de golpe y siguió comiendo como si los fideos blancos fueran la mejor comida del mundo.
Jeonghan sintió como su hermana le daba una patadita por debajo de la mesa y casi bota los fideos, pero estuvo aún mas cerca de hacerlo cuando Seungcheol habló.
—¿Eres o no eres un ángel? —le preguntó, y a lo lejos, pudo oír como Hong Joshua se palmeaba la frente.


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Ella es Saebom, es de favorite, acaban de debutar, (porfavor escuchen party time) La puse porque 95 line jkanasjns eso. Corazones:)

 Corazones:)

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angel; jeongcheol Donde viven las historias. Descúbrelo ahora