Like A Love Song (BonXBonnie)

Te conocí por casualidad

—Te apuesto lo que quieras a que Golden se presenta de nuevo —dijo Foxy, y, a pesar de la mirada asesina que le estaba lanzando Chica, continuó—. No. Te apuesto a que vuelve a llorar cuando lo rechacemos de nuevo.

Estábamos caminando hacia la sala de música por los desérticos pasillos de la secundaria, en los que no había nadie ya que se habían acabado las clases y todos los demás estaban en medio de su diversión de Viernes. Foxy, Chica, Joy y yo, por nuestra parte, íbamos a comenzar con las audiciones para el nuevo miembro de la banda.

—Para tu información, Golden es un excelente cantante y...

—Un completo inútil, lo sé, no me lo recuerdes.

Si esos dos dejaban de pelear, por supuesto.

Me giré hacia Joy, que tenía una sonrisa divertida en los labios y miraba de uno a otro como si supiera algo que ninguno de los otros tres sabía.

—¿Qué es divertido? —pregunté

—Ellos, Bon. Son cómicos —si en mi rostro se notaba lo confundido que seguía estando, ella no comentó nada al respecto—. Como sea. Me estabas hablando de esta nueva canción, ¿cómo va eso?

—Oh, eh... Lento.

Joy asintió, con una pequeña sonrisa comprensiva. Hacía un tiempo que no lograba escribir nada, por más que lo intentara, que me sentara por horas completas frente a una hoja de papel en blanco con un bolígrafo suspendido sobre ella, listo para atrapar cada pequeña partícula de inspiración que se cruzara en mi camino. Pero no llegaba nada. Los chicos decían que no me preocupara, que sólo era un bloqueo de escritor y que pronto pasaría, pero era frustrante de cualquier forma.

Seguimos caminando en silencio, quizá pensando en cosas más importantes que las palabras, o en cosas tan grandes que las palabras no alcanzaban a decir. En la siguiente esquina, giré con Joy hacia la derecha, mientras Foxy y Chica, perdidos como estaban en su discusión, giraron hacia el otro lado sin darse cuenta. Un minuto después volvimos a escuchar sus voces acercarse, no menos molestas, y puede que sí haya sido algo un poco cómico.

—De acuerdo —estaba diciendo Foxy—, lamento si estoy ofendiendo a tu novio cuando...

—¡Que no es mi novio! ¿Quieres madurar?

—Las damas primero —pude escuchar la sonrisa burlona en su voz desde donde yo estaba.

Llegamos a la sala de música, eran las 3:30 p.m. y, técnicamente, faltaba media hora para que las audiciones comenzaran, pero ya había un grupo de estudiantes esperando afuera de la puerta, haciendo una fila ordenada. Me sorprendió un poco que hubiera tanta gente interesada, y que mostraran tanta emoción por ser elegidos. Entramos, acomodamos el salón para que quedara una mesa larga con cuatro sillas y un espacio prudente frente a ella para las presentaciones, nos sentamos, con unas cuantas hojas de papel y un vaso de agua para cada uno. Chica fue hasta la puerta, para avisar que habíamos comenzado oficialmente, y volvió a sentarse con una gran sonrisa.

El primer participante del día entró por la puerta y se colocó en frente de nosotros, era un par de años menor, con un rostro alegre y optimista. Foxy le hizo una seña con la cabeza, y yo puse toda mi atención en él, preparado para escucharlo cantar, y, tal vez, descubrir la siguiente voz de nuestra banda.

*   *   *

Había pasado alrededor de una hora y ya estaba comenzando a ser frustrante; ni una de las personas que se habían presentado hasta ahora funcionaba, no tenían el tono adecuado, ni buena afinación, no tenían la voz correcta. Yo, por mi parte, no estaba más cerca de entender siquiera qué era lo que estábamos buscando, sentía que una voz masculina quedaría mejor con nuestro estilo, pero nuestra cantante anterior era una chica, y, al mismo tiempo, ninguna de las voces que había escuchado me gustaba en absoluto.