Capitulo 18

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Lauren Jauregui

Estaba agotada, furiosa y cansada. Mi discusión con Normani fue bastante desagradable y lo único que quería era tomar un baño caliente y así fue, lo tuve - decía en mi mente - fue como si mi cuerpo se sintiera en la gloria.

Veía mi reflejo en el espejo, apreciaba mi cabello oscuro resaltar con mis ojos color esmeralda y mis cejas gruesas y pobladas. "Tengo una mirada que intimida a cualquiera" -pensé.
Pasaba el cepillo sobre mi cabello para desenredar, no quitaba la mirada en mi. Me sentía muy cómoda y tranquila en ese momento, traía puesto un traje de baño de dos piezas que usaría en unos minutos para bajar a la piscina del hotel y así descansar en las aguas tranquilas de un jacuzzy.

Mientras continuaba con peinarme escucho una ligera voz femenina hablarme, por un momento creí que sería Normani pero me equivoqué. Era ella, Karla Camila y su mirada en mí era imposible de quitar. Por un instante olvide que esta habitación es de dos camas, es decir, tendría una compañera de habitación pero no creí que sería la morena color de ojos café.

Noté como la joven latina me analizaba con la mirada, ella no quiso provocarme un susto y lo agradezco, pero ahora yo tengo miedo de algo más.  Estábamos solas en una habitación, podría decir que yo semi desnuda y con el cabello mojado y ella bueno, vestida, pero no por mucho tiempo. No sé en qué instante mi cuerpo subió de temperatura, si el clima en Florida sobre pasaba los 40' grados centígrados mi cuerpo lo hacía el doble. Ver a Camila con cara de sorprendida por mi presencia y vestimenta era excitante, me encendía a mil por hora. "Hoy te quiero en mi." Fue todo lo que dije para que ella entendiera lo que quería hacer en ese instante.
Mi cuerpo se pego al de ella provocando que soltara una barra de chocolate de su mano, la bese con lentitud. Sentía como su busto se pego al mío, sus pechos no eran grandes pero si que llamaban mi atención. Yo posaba la mano sobre su cuello para besar sus labios, cada beso que daba soltaba un sonido que provocaba un ritmo más alto entre nosotras. Mi propósito no es dejarla antes que llegue al orgasmo, yo quería que ella tuviera los mejores orgasmo en su puta vida, haré que confunda sus sentidos con los míos, no permitiré ni una sola respiración hasta que ella no pueda más. La haré gritar, llorar y disfrutar.

¿Quieres que sea el mejor día de tu vida? - dije mirando hacia sus ojos cafés.

Camila: Quiero que estés dentro.

Esas cuatro palabras fueron más que suficientes para mí para captar lo que ella quería.
Camila me había tratado como su perra pasiva por un tiempo pero yo no lo permitiré esta vez.

Manteniendo una mano sobre su cuello y mis labios sobre los de ella bajo mi mano disponible para levantar su blusa y dejarla totalmente en sostén, ahora utilizó mis dos manos en su cuello y continuó besando con un nivel tranquilo.

Poco a poco sentía la conexión de poder introducir mi lengua pero la joven latina me toma por sorpresa y lo hace primero, su lengua fue conectada a mi boca y realizó unos movimientos con su lengua en mi. Me excitaba muchísimo, sentía el calor hervir por mi sangre.

La morena detiene los besos y toma un largo suspiro.

Cam: Follame duro en la cama, ordeno.

"Puedo hacerlo todo el día si gustas."
- la cargo de la cintura para que ella cierre un cuatro con sus piernas por encima de mi espalda. - la suelto en la cama y sin soltar una sola palabra ella posee sus brazos sobre mi cuello y toma mis labios por completo.
Si pudiera decir un sinónimo de lo que está pasando en este momento sería; devorar. Ella me está comiendo y lo estoy gozando - mis piernas están en los lados de Camila, es como si la estuviera sometiendo.

Indagando  (CAMREN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora