Without See {Justin Bieber y tú}

Cada vez que los días avanzaban, la esperanza se apagaba muy en mi interior. El hecho de sentirme aíslada de todo, era una razón suficiente para querer... acabar con todo. Pero algo me mantenía con los pies en la tierra y me hacía sentir capaz de poder librarme de todo.
Y eso, era la confianza que obtuve durante estos meses junto a Justin.
¿Estar encerrada, sola y con un plato de agua para perro era lindo? No. Pero ¿Cómo podía yo cambiarlo? ¿Cómo podía cambiar mi destino? No podía hacerlo.

Tuve que someterme a diferentes cosas, que no me agradaban, pero quizá algún día estos sacrificios darían con mi libertad.
Recordando en las noches solitarias junto a la pequeña ventana del sótano, que estaba allí para airear un poco aquella habitación cubierta por una buena capa de polvo, me sentaba y me hundía en mis pensamientos por horas. Era como una actividad divertida, imaginarme los días de instituto y las clases de matemáticas que parecían ser de chino básico para mi inteligencia.
Sin duda, estar en una clase de matemáticas junto a mis compañerosy Caroline hablándome sobre chicos era mucho mejor que, estar en una habitación fría y osucura que emanaba olor a hierro y polvo.

Cada noche, cuando la luna estaba en su mayor esplendor, una duda surgía en mi cabeza y hacía que me imaginara miles de cosas. Mi mayor temor era no volver a ver a mis amigos y por supuesto, a la luz del día. Pero más allá de esa duda, en mi subconciente rezonaba una voz apenas audible que me decía nunca te encontrará.

Sí, el día del baile de graduación había sido una de las peores situaciones vividas... me creí una completa idiota al no notar que Ashton, el comisario Smith y Kim estaban detrás de esto. Desde aquella noche en el campus mis sueños se basaban en diferentes versiones de qué hubiera pasado y qué no hubiera pasado.
Estaba encerrada en un laberinto, cuya en esquina había una duda por descubrir. Nev era el mayor autor de esas y Justin.
Cada vez que pensaba en él mi estómago se retorcía como si algo quisiera salir. Pensar en él solo hacía que me agunstiara más y que las posibilidades de ser rescata disminuyeran cuando suponía cosas.

Pero ¿Debía seguir creyendo y no darme por vencida, o simplemente dejarlo todo y esfumarme de una vez?