Capitulo dos

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Regulus llevaba la delicada figura de Severus en un cálido y cuidadoso abrazo, el de ojos onix iba perdido en su mente, cuando sintió como su magia se acoplaba en donde el estaba.

- estamos de regreso en casa - susurro Regulus en el oído de Severus

Al escuchar eso, los sentidos de Severus volvieron a la normalidad.

- ¡Regulus! - chilló - ¡Deberías estar en cama!

- debería, pero resulta que mi mejor amigo no regreso a la hora que tenía que regresa y peor aun, una Ravenclaw de primero me vino a decir que había pasado - contesto Regulus

- se supone que te tenían que cuidarte - frunció el ceño Severus 

- la pequeña me ayudo - le resto importancia - ven tienes que limpiarte 

Se fueron al cuarto donde estaba Dana la pequeña ravenclaw quien jugaba con el conejo de Severus, la pequeña al verlo los ayudo, mandando a Regulus a su cama a que descansara y a Severus también a la suya para poder curarlo.

 Una hora después se escucho un gran alboroto en la sala común, lo que provoco que los tres habitantes de dicho lugar, bajaron y vieron a toda la sala común patas arriba.

- ¡¿Que demonios paso?! - gritaron Sev y Reg

- ¡principes! -chillaron todos 

- ¿que paso? - pregunto Dana mientras se colocaba a lado de su hermano Christopher 

- notamos que tu estabas ocupando el lugar de regulus y nos preocupamos - hablo una de tercero - aparte de que Severus se estaba tardando 

- nos enteramos lo que hicieron los merodeadores - apretó los puños Ivan Goyle 

Severus sabía lo que se avecinaba, cansado se sentó en el antebrazo del sillón individual negro, esa ya era una costumbre, muchos le decían que tenía que hacer algo, mientras que unas chicas recostaban a Regulus en el sillón para que descansara.

- dentro de dos días regresa Lucius - soltó de la nada Severus haciendo que todos se quedaran callados - regresa con las pociones para Regulus y para ayudarnos

- ¿como lo supo príncipe? - pregunto Ethan Nott

- Lucius me mando una carta - confeso Severus cuando se acordó de algo - ¡Mis cosas están en el lago! ¡Tengo que ir por ellos!

-nosotros vamos - se adelanto Christopher mientras tomaba la mano de su hermana Dana

Se fueron a buscar las cosas de Severus, pero por un extraño motivo no vieron aquel libro que su príncipe siempre portaba, de camino de regreso a la sala común se toparon con la persona menos esperada.

- Lupin - hablo Ivan - ¿Que haces aquí? 

- Yo quiero hablar con severus - suspiro - quiero disculparme por lo que paso hoy

- tu crees que te vamos a dejar entrar así como si nada - pregunto Crabbe

- no, pero necesito hablar con el -

- ven - hablo Christopher - pero la mínima cosa a Severus y lo lamentaras 

Cuando regresaron a la sala común todos miraron a invasor.

- ¿que haces aquí? - pregunto Jev Parkinson 

- quiero hablar con severus - confeso Remus

- vamos a mi cuarto - señalo las escaleras 

Remus asintió y comenzó a caminar detrás de Severus, al llegar al cuarto del menor noto que este estaba en donde debería estar la habitación de prefectos. Al entrar vio el lugar, si no se hubiera pellizcado juraría que estaba en un palacio.

- ¿Que querías? - pregunto Severus 

- me quería disculpar, por la estupidez que hicieron mis amigos - suspiro Remus - y quería devolverte esto

De su capa saco un libro algo desgastado, pero con las letras aun bien remarcadas, Severus al abrirlo pudo ver claramente escrito "Eileen Prince".

- ¿donde lo encontraste? - pregunto Severus

- se lo quite a James sin que se diera cuenta - suspiro - creo que me debo de ir

- te acompaño - 

Cuando el Gryffindor se fue, reviso su libro notando que le faltaba su separador, maldijo por debajo, si alguien llegaba a dar con la parte escondida del separador ahora si se iba a morir y eso que no sabía lo que había hecho regulus.

[...]

En la sala común de Gryffindor, James Potter estaba en su habitación, sus amigos habían ido al comedor, peo el no tenía hambre. Miro su mochila y se acerco a ella, saco la carta de Malfoy para Snape, cuando noto que el libro no estaba, le resto importancia y abrió la carta.

Querido Severus:

Mi dulce serpiente, regreso en dos días, ye conseguí la poción para Regulus, así se le va a quitar la viruela de Dragón, padre dice que por suerte el como le dio a Regulus no es contagiosa, pero de preferencia no se levantara de la cama hasta que este allá. 

Hace dos días me mando una carta Walburga Black, diciendo que como estaba Regulus ¿Tu crees que se lo creyó?, vaya que la madre de nuestro amigo esta loca. Francia es hermosa, espero que les guste lo que les voy a llevar, aparte de que te quiero decir que ya todo esta listo, mi padre me confirmo que se va a casar con Orion Black, les cuento todo cuando regrese. 

Marvi te manda saludos, se colo a este viaje junto con Bastien, pero no me molesta en lo absoluto, espérame por favor, y cuerda té quien eres realmente, llegando te quitare tu sabes que.

Atte: Lucius Abraxas Malfoy Rossier (Futuramente Malfoy-Black)

Al terminar de leer la carta, las dudas asaltaron a James, ¿Quien eres Marvi?¿Regulus tenía Viruela?¿Quien era Bastien?, ¿Que le iba quitar Malfoy a Snape?.

No comprendía, pero sabía que iba a tener que hacer algo, y quien mejor para darle información que su "prostituta" favorita, Lily Evans la ex-mejor amiga de Snape.

[...]

En Beauxbatons

Un joven de cabello negro estaba sentado en el marco de la ventana, a su derecha estaba sus mejores amigos los hermanos De'Lacoure, estaban tranquilos cuando fue que vieron una hermosa lechuza blanca. Cuando esta se acerco tomo la nota y le dio manzana que estaba comiendo.

S.T.S

Hay problemas, transferencia y rápido. 

R.A.B

Al terminar de leer la carta, el joven frunció el ceño y miro a sus amigos quienes asintieron, sabían lo que se acercaba así que tenían que actuar rápido, sabía lo que se acercaba, era ahora o nunca, no iba a dejar a su hermano solo.

Ojos OnixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora