¿Cómo pude morir?

Solo Una Charla

Era un día de esos pocos color gris, lleno de nubes, que interrumpía la necesaria luz del sol.

Casi siempre, esos días, no era recomendable salir de sus casas, por precaución de lluvias, hasta de inundaciones. Pero aquel día no podía faltar a clases ¡Había exámenes!

-Adiós Mamá, nos vemos al rato!!

-Adiós hija! No te vallas a olvidar nada. Ah y presta mucha atención a esos exámenes ¿Bien?

-Si Mamá, tranquila, vas a ver que no los voy a reprobar...

~•~

Cuando llegué a el aula ya estaban los demás estudiantes.

Al sentarme oí las voces de las amigas de Lenay, decirme cosas como gorda, ñoña, loser, retrasada, traga libros y por último, lo que fue la gota que rebasó el vaso fue un "Ah de seguro es una PUTA que se traga todo".

La verdad, no  me había costado nada llegar a las cabezas huecas de esas inútiles y jalarles el cabello.

~•~

Ahí estaba yo, sola aburrida, en detención y sin exámenes, pero no del todo sola, estaba la vieja y aburrida Thomson que se había convertido en la vieja durmiente arriba del escritorio.

El único castigo que me habían dado, fue quedarme una hora mas en el instituto.

Escuché la puerta abrirse y quedé en modo fantasma.
¡Era Adrien!

Pero cuando lo miré fijo a los ojos, pude notar que estos estaban llorosos, eran como de cristal en ese momento.
Pero las ganas de preguntarle qué le pasaba me habían invadido.

-¿Estas bien Adrien?-Él solo me miró un poco sorprendido y confundido, por lo tanto, yo seguí- Si quieres hablar con alguien, quiero que sepas que lo puedes hacer conmigo.

Creo que allí fue la primera vez que no le hablé mal y sin pelear.

¿¡Que estoy pensando!? Emily no te  des carriles del santo camino y piensa que es tu mayor enemigo con quien estas hablando.

-Tranquila, estoy bien, no es nada. Solo un poco de alergia, eso es todo.

Su expresión facial no me convenció, estaba segura que lo que él tenía no era alergia.

-¿Me ves cara de estúpida Adrien?

-Algo~- Respondió en un tono burlón.

Este chico si que era estúpido, pero decidí ignorar ese comentario.

-No se te ve muy bien que digamos.

El estaba por responderme hasta que la vieja Thomsom da un grito agudo, indicando a el odioso de Adrien que se siente a mi lado.

¿¡A MI LADO!? Lo único que me faltaba era que Adrien se tuviera que sentar a mi lado.
Trataba de evitarlo todos los días del estúpido año, para no tener problemas por su culpa y terminé en detención, sentada a su lado.

Bonito ¿No?

-Cómo diga señora~- Contestó en un tono bastante gracioso, que me hizo reír por lo bajo con el.

-¿Ves que no soy tan malo como tu crees?- Me guiñó un ojo.

-E..eso N...no quiere decir N...nada- Ya todo me valió madres, no quería sonrojarme.

Y OMG estaba como un tomate!

-Oye ¿Te sientes bien?- Adrien puso su mano en mi frente. De seguro el pensó que estaba enferma- Tienes algo de temperatura.

Tomé su asquerosa mano con asco y la quité de mi frente.

-Si estoy bien, no te preocupes.

-¿No será que estabas sonrojada?- Sonríe de lado con una mirada pervertida.

-Tal vez si tenga algo de fiebre, mejor me voy o me enfermaré más.- Tomé mis cosas y me encaminé hacia la puerta de la vieja aula, sin preocupaciones ya que la vieja se había vuelto a dormir.

-Nos vemos a la salida Cameron- Saludó mi enemigo.

Moví mis dedos de atrás a delante con una sonrisa sarcástica y seguí mi camino.

~•~

Al fin terminó la ultima hora de álgebra.

Todo era normal.
Salgo de la escuela caminando a la par de Ashlie hasta que ví la esquina por donde nosotras debíamos cruzar...

-Oh no.- Quedé petrificada, eran ellos.
James, Adrien, Lyam y Lenay en un jeep negro y cervezas en sus manos- ¿Cómo pueden conseguir cervezas tan rápido y a plena luz del día?

-No lo se, solo ignoralos- Dijo mi amiga mientras caminaba aun más rápido.

Nos estábamos acercando, cada vez estaba más nerviosa y mi estómago me dolía demasiado.

-Si. Es cierto, no son la gran cosa- Acomodé la mochila en mi espalda tratando de no hacer contacto visual con ninguno de ellos.

-¿A sí que no somos la gran cosa?

Miré quien me había hablado y fue la estúpida de Lenay.

-Lo que escuchaste. ¿O te lo tengo que volver a repetir, para que tus pocas neuronas, puedan asimilar lo que dije?- Respondí desafiante.

De algo que estaba segura es que no me dejaré llevar por los comentarios de una analfabeta otra vez.

*(Así que Em, tranquila, respira y procura usar muy bien tu cerebro para hablar).*

-¿Neuro que?-Dijo esta haciendo una mueca

-Se llaman neuronas y es algo que tu no tienes.- Di un pequeño empujón con mi dedo en su frente.

Los tres chicos comenzaron a abuchear, mientras que mi supuesta mejor amiga filmaba este pequeño "Encuentro" que tuvimos con Lenay.

-¡Oye no me toques estúpida!- Gritó, y me dió un gran empujón, que me hizo caer al suelo.

-Já! Estúpida pero con neuronas.- Le devolví el empujón y ella calló sobre el pavimento.- Cosa que tu no.

Ella se levantó y me agarró de las greñas, yo solo me coloqué en posición fetal y los chicos a carcajadas y con lágrimas en los ojos por la risa, la separaron de mi despeinado cabello.

-¡Ya verás la próxima Emily Cameron!- Se subió al jeep de los chicos, con los demás y se fueron.

...Todavía no podía creer que la gente estaba muy demente...

Fue lo último que pensé después de dar media vuelta y seguir rumbo a mi casa, que me esperó un fuerte sermón de parte de mis padres.
Porque se me había olvidado agregar que tenía dos hermanas mayores a mi por un año (Mellizas) viviendo en Londres y que hoy llegaban de visita por un mes.

Tal vez no se me habían olvidado, sino que odiaba hablar de ellas.