¿A quién eliges? (Charisk) (Chara X Frisk)

Cap 10: Reencuentro

Tras casi media hora de viaje, Chara llega hasta la casa de los tíos de Frisk. Solo hay una luz encendida. Se acerca a la ventana y mira lo que hay al otro lado. Está ese hombre, el tío, sentado en el sofá mirando la televisión.

–Hmm... Dónde estará la mujer? –susurra mientras retrocede unos pasos.

Alza la mirada hacia la ventana donde vió a su hermana por última vez.

–Vale, y ahora como subo al tejado del garaje?

Mira a su alrededor. Lo único que hay es un cubo de basura.

–Espero que eso sirva...

Agarra el cubo, lo coloca contra la pared y se sube encima de él. La tapa se hunde un poco por el peso, pero no pasa nada. Estira los brazos, se agarra al borde del tejado, coge un poco de impulso y se sube.

–Vaya, eso fue bastante fácil...

Se mira las manos, están llenas de algo que parece tierra húmeda.

–Agh... Que asco.

Intenta buscar algún pañuelo en sus bolsillos, pero no encuentra ninguno, así que se limpia las manos con la chaqueta. Cuando acaba, se la quita y la deja tirada en el tejado. No le gusta llevar la ropa manchada.

–Psst...! Frisk! –intenta hacer una mezcla entre grito y susurro.

Pero nadie contesta, así que empieza a avanzar hacia la ventana, que sólo esta a unos cuantos pasos. Pero el tejado está un bastante inclinado y resbaladizo, por lo que tarda un poco más en llegar.

–Frisk, estás ahí? –dice mientras golpea el cristal con sus nudillos.

Una mano aparta las cortinas desde el interior de la habitación. Es Frisk.

–Chara...? –pregunta sorprendida mientras abre la ventana–. Qué haces aquí?

–Puedo pasar?

– Chara, un tanto preocupada.

–Estoy bien... Supongo –contesta mientras baja la mirada–. Aunque es la primera vez que te preocupas tanto por mi...

En realidad Frisk no tiene buen aspecto. Está mas pálida de lo normal y su sonrisa amigable y tierna a desaparecido por completo.

–No me preocupo por ti... Es que Sans me mandó aquí para comprobar que estabas bien –miente.

Al otro lado de la puerta se empiezan a escuchar unos pasos.

–Oh no... Ya viene otra vez... Rápido, escóndete! –dice nerviosa, mientras cierra la ventana.

Es una habitación bastante vacía, y el único sitio para esconderse es debajo de la cama.

Segundos después, alguien abre la puerta. Desde la posición de Chara, solo se pueden ver unos pies entrando a la habitación, pero su voz es inconfundible.

–A ver niña, me vas a contar la verdad de una vez?

–Ya te lo he dicho... No le he contado nada a nadie... –contesta con miedo.

–Estás segura? No me gustaría que nadie se enterase de nuestro "secretito".

Chara pone una mueca de asco. No le gustó nada la forma en la que dijo esa última palabra.

De repente se escucha un móvil vibrar.

–Vaya, vaya... Pero que tenemos aquí. Un móvil?

Frisk saca el regalo de Toriel del bolsillo. Es una llamada de Sans. Cuelga antes de dárselo a su tío.

–Tienes de fondo de pantalla a esa chica extraña eh...

Chara se sonroja al oír eso. No sabe al 100% de quien está hablando, pero seguramente sea ella.

–No me gusta... Tiene una pinta de zorra asquerosa increíble –dice con desprecio.

–No digas eso de Chara! –grita en defensa de su hermana.

El hombre aparta la vista de la pantalla y mira a Frisk.

–Pero quien te crees que eres para levantarme la voz a mi?!

Se escucha el inconfundible sonido de golpe en la cara, y no precisamente uno de los suaves...

Chara aprieta los puños con fuerza y rabia. No puede creer que un ser tan repugnante le haga daño a una indefensa chica.

–Que sea la última vez que me levantas la voz... No eres nada... –escupe esas palabras con odio, mientras tira el móvil al suelo.

Frisk se queda en silencio. La puerta se vuelve a abrir y el hombre se va, cerrándola tras de si con un portazo.

–Hijo de...! Agh, como lo pille juro que lo mato! –intenta no hablar demasiado alto.

Chara sale de debajo de la cama y agarra la empuñadura de su cuchillo, pero rápidamente la ira se le pasa cuando ve a Frisk.

En su mejilla derecha tiene una gran marca roja. Está con la cabeza bajada y con las manos apoyadas sobre sus piernas, sentada en la cama.

–Oye Frisk... Te encuentras-

Pero antes de que terminase, Frisk la abraza con fuerza. Oculta su cara entre los pechos de Chara y empieza a llorar, aunque sus sollozos son ahogados por el cuerpo de su hermana.

–V- Venga... No te preocupes, estoy aquí, no te va a pasar nada... –intenta calmarla mientras acaricia su cabello.

Es la primera vez que Chara acaricia el cabello de una chica. Es una experiencia rara.

Una mezcla de sentimientos y emociones, negativas y positivas, golpean su pecho y su cabeza al mismo tiempo, con fuerza.

CONTINUARÁ...