Ella es solo mía © || Vegetto || BORRADOR

Capítulo 12 (✔️)

ＥＬＬＡ ＥＳ ＳＯＬＯ ＭＩＡ
~ V E G E T T O ~
Naomi

"Qué desastre más desastroso."

-Espera, ¿qué? -susurro para mis adentros al pensar aquello. Desastre desastroso, sin duda tendría que dejar de prestarle atención a Luka cuando habla, quien tiene muchos problemas a la hora de expresarse.

Podrá ser bonita e inteligente, a veces, sin embargo, es muy tonta, aunque por eso mismo la quiero y la respeto. De todos modos ya sabe que me molestan sus errores, pero simplemente los hace para que me enfurezca con ella.

Pero eso no tiene nada que ver, porque mis dos ojos ven un terrible desastre en mí habitación, gracias a que alguien ha sacado toda mi ropa del armario y la ha tirado por todo el cuarto.

"Él dijo que me llamaría."

-Luka... -suspiro resignada al sacarle la braga mía que tiene en la cabeza. ¿Cómo ha llegado eso ahí? -Vegetto dijo que me llamaría, así que no te apresures, por favor. -musito, a lo que me lanza una mirada asesina.

-¿Y lo dices así? ¿Tan calmada? -chilló rabiosa al sacar algo de mi cajón, otra braga, pero esa es especial. -Por kami-sama... -balbuceó llevándose la mano hacia la boca. -Yo entiendo que seas la persona más adorable y tierna que conocí en la tierra... ¡PERO ESTO ES EN SERIO! -gritó al lanzarme la ropa interior hacia mi rostro.

-¿Qué tiene de malo? -pregunto al sacármela de la cara y volver a ponerla en su respectivo lugar.

-Son de gatitos... -refunfuñó a regañadientes en mi oído, a lo que volteo para no ver su rostro.

-Pero si son bonitos. Además, el algodón es súper cómodo. -contesto, a lo que golpea su rostro para caer al suelo. -No es mi culpa que tú ropa interior sea toda amarilla. Tienes algo muy serio con ese color. -digo riendo al agarrar mi vientre que duele por las recientes carcajadas.

-En mi defensa, ese color es llamativo y vivo. Habla mucho de mi persona. -recalcó al sentarse como un indio en el lugar al elevar la mano apuntándome con su dedo índice.

-Claro, claro. Llamativo y vivo. -me burlo jugando con mis cejas al moverlas de una manera graciosa.

-Cliri, cliri. Llimitivi i vivi. -masculló, a lo que le lanzo mi braga a su preciado rostro, por lo que ríe tirandome unas cuantas camisas.

(...)

-Entonces. ¿Según tu y tu torpe cabeza crees qué le gusto? -pregunto incrédula al girarme mientras me cepillo los dientes al observarla sentada en mi ducha con su móvil.

-Pues si. -respondió al verme y sin más ríe. -¿En serio no has notado un ambiente sexual entre ambos? -interrogó mirándome maliciosa, a lo que niego de un lado a otro dejando que mis mejillas se tornen rojas.

"No creo que el Sr.Vegetto me vea de esa forma."

-Yo no lo veo así pelito. -carcajeo al rascarme la cabeza para luego bufar. -A mi no me gusta, es un zoquete. -confieso, a lo que se golpea la cara indignada.

-Ay Nao. Eres tan inocente.

(...)

Vegetto

¿Una cita? ¿En serio uno de los guerreros más fuertes se ha rebajado a ir a una de esas cosas empalagosas?

Lo que hago por esa Naomi no tiene precio, pero ni modo, ahora mi preocupación es entrenar con Wiss. Porque necesitábamos enfocarnos en el Torneo de Poder que será en dos meses, ya que el gusano de Kakaroto le pidió a Zeno-sama unos días más, a lo que el adorable balón le dijo que si.

-Es demasiado irritante... -bufo para mis adentros al sacar un sándwich del refrigerador, no obstante, alguien me de tuvo a lo que lo observo desganado. -¿Y a ti qué se te ofrece mocoso? -pregunto incrédulo al ver a Trunks observarme curioso desde la mesa.

Vuela hasta mi lugar y huele mi ropa: ¿Qué le sucede?
Elevo una de las cejas divertido, a lo que éste se separa de mi tapándose la boca.

-¡TIENES EL OLOR DE NAOMI! -gritó con todas sus fuerzas, por lo que rodeo los ojos haciendo que un tic nervioso aparezca en mi ojo izquierdo.

-Niño, son cosas de grande, no te metas. Dónde están el gusano de tu padre y Kakaroto. -ni siquiera respondió, solo se limitó a seguir viéndome como si hubiese hecho algo malo, levantó su brazo lentamente y apunto hacia el jardín, a lo que me acerco amenazante y se hace hacia atrás con rapidez tapándose la cabeza. -Mocoso... -me burlo al seguir mi camino.

Bien, tengo que ser más discreto, no quiero que se enteren que estoy en algo con esa humana.

"Qué problema..."

De tanto pensar me percaté de que había llegado el jardín dejando a la vista a el Dios de la Destrucción y a su Ángel y, por otro lado, están los gusanos de siempre.

-Ahora que hizo el imbécil de Kakaroto. -interrogo al sonreír de lado, a lo que el azabache recién nombrado eleva una de las cejas.

-¡Oye Vegetto! -exclamó cruzándose de brazos sacándome la lengua.

"Sigue igual de gusano."

-Esta vez el problema no es Kakaroto, insecto. -carcajeó el príncipe de los saiyajin, ruedo los ojos y me encojo de hombros.

-¿Entonces? -consulto.

-Tendrán que buscar peleadores y entrenar. -comentó Wiss de forma amena.

-Que fácil. -admito al ver a Gogeta quien recién llega con una sonrisa en el rostro.

-¡Hola! -chilló emocionado al chocar palmas con Goku. -¿Que hay? -preguntó curioso al ver a el Dios para luego observar a Wiss.

-Son diez. Y con ustedes tenemos cuatro. -prosiguió Bills viendo fulminante a Goku, en serio había quedado resentido con el pobre.

-Somos fuertes, recuerden que trabajando en equipo en la batalla campal seremos geniales. -musitó Gogeta súper emocionado, a lo que Vegeta y yo gruñimos.

-No quiero destruir tus esperanzas Gogeta, pero es lo más inútil que dijiste, éstos zoquetes no harían eso. -entonces Bills empezó a reír viendo la cara del rubio, quien solo hizo una mueca decepcionado.