A la mañana siguiente me pare más temprano de lo común, corrí a la habitación de Hanni para contarle sobre el chico de los tulipanes, así llamamos a Bruno ya que no sabíamos que fue él que me había dado ese ramo tan bonito, mi hermana se había molestado un poco ya que la desperté a las 5 de la mañana, pero después de contarle la noticia me disculpo por haberla levantado tan temprano.
Cuando llegue a la escuela, me dieron unos nervios horribles en el estómago, no me quería encontrarme aún a Bruno ya que no sabría que decirle o qué hacer con respecto a la pregunta que me había dicho anoche; cuando hablamos por mensaje las palabras fluían, pero ya teniéndolo frente a mí no sabría como iba a reaccionar, era mi primera cita con él y se podría decir que era una cita más formal, ya que con Luca había sido solo una cita de amigos.
Mientras iba concentrada pensado como podría calmar mi nerviosismo de la nada alguien me tomo del brazo por detrás de mí, en ese momento quería que la tierra me comiera y me escupiera en otro lugar, pase a un color pálido, mi piel se helo, gire para ver quién era la persona que me había tomado del brazo, pero de repente mi color había regresado, esa persona era Maca, no sé porque las personas tiende a sacarme uno que otro susto.
- Amiga ¿estás bien?, parece que acabas de ver un fantasma.- dijo intrigada viendo mi rostro.
- ¡Mensa! Me acabas de dar el susto de mi vida, te lo juro.- respondí colocando mi mano sobre mi pecho, enserio me había sacado el susto de mi vida. - Creo que alguien algún día me va a causar un infarto.-
- jaja, lo siento.- se rio. - Tonta pasaste frente a mí y no me viste, creo que ibas muy concentrada en tus pensamientos, ¿estás bien?- pregunto un poco preocupada.
- ¿En serio?- me cubrí la boca con mis manos. -Discúlpame Maca, creo que si iba muy clavada en mis pensamientos.- me agarre la cabeza y la agite un poco. - ¿Te acuerdas del ramo que me dejaron ayer en mi lugar?- asintió con su cabeza -Ya sé quién me lo envió.- dije emocionada.
- Ya suelta la sopa, dime, dime, dime, ¡Dime! ¿Quién fue?- dijo alzando la voz, mientras me tomaba de los hombros y me sacudía. Yo me comencé a reír.
- Tranquila amiga, deja de sacudirme para que te pueda contar.- me soltó y me acerque a su oído, no quería que todos supieran. -Te voy a decir pero no grites por favor, fue Bruno.- me retire un poco de ella.
- ¡No juegues!- me dijo Maca sorprendida, estaba en shock. -Te dije que le gustabas.- me guiño un ojo e hiso una sonrisa pícara. - Y bien ¿van a salir?- pregunto ansiosa, mientras me tomaba del brazo y caminábamos hacia el salón.
- Me invito a salir, aún no hemos quedado bien.- le conteste viéndola a los ojos, mientras subíamos los escalones, yo estaba un poco sonrojada, ya que Maca me hacía bromas sobre mi situación. - Me dijo que hoy hablábamos sobre eso.- creo que mi amiga estaba más emocionada que yo, hacia festejo como si se hubiera sacado la lotería, llegamos al salón y le dije que no contara nada sobre lo que habíamos hablado, quería tener un poco de privacidad sobre ese tema.
Ese día me queda más tarde en la escuela ya que me tocaba entrenamiento de voli, ¡rayos! Olvidaba que Bruno también estaba en la misma clase pensé mientras me cambiaba el uniforme del colegio por mi ropa de entrenamiento, no estaba lista para verlo aún, así que pensaba en irme y poner una excusa para faltar a la clase, pero Maca me tomo del brazo y me llevo al gimnasio, me dijo que no toda la vida me podría esconder de él y que lo enfrentara de una vez, así que me quede, mientras calentábamos lo vi, él se aproximó a saludarme a mí me temblaban las piernas, viéndolo más detenidamente sí que era guapo, cuando me dio un beso en la mejilla pude percibir el olor de su perfume que se quedó impregnado a mí por un instante.
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Tres amores tuve en la vida
Teen FictionMelina Jimenez o Mel como le gustaba que le llamaran, es una chica de 16 años, que llega de Canada a México con sus padres y su hermana. Hace 16 años que vive en Canada, pero su familia decide hacer un viaje a México por el trabajo de su papá y est...