Los Caballeros del Zodiaco Saga: El Comienzo (reeditada)

Capítulo 49 Todavía quedan esperanzas

En el anterior capitulo:

– Esta vez morirás traidor, toma esto ¡ROSA SANGRIENTA! (Bloody Rose) – lanzo su ataque Adara, el cual estaba dirigido a Damián,

– Damián – dijeron los caballeros de bronce y los dos caballero dorados presentes y este cerro lo ojos para recibir el ataque

– No ¡Damián! – alguien apareció y se colocó enfrente de él y recibió el ataque y todos estaban sorprendidos y aparecieron Ryhuo y Cloth

– No... no, no, no, no, no, no...– dijo Damián - ¡Aurora...! – grito y ella cayo en sus brazos

– Pero que estúpida eres Aurora, sacrificarte por alguien tonto como Damián – dijo Adara

– Adara... no me importa si tengo que sacrificar mi vida con tal de salvar a una – dijo Aurora débilmente – es esa... la misión... que me fue encomendada cuando vine a este mundo ...

– Que – pensó Adara y sintió el cosmos de Aurora y pensó – este cosmos, es tan puro, como el que... ¡no puede ser! – pensó y miro a Aurora la cual empezó a derramar sangre, además la rosa blanca empezó a teñirse roja con su sangre

– Señorita Athena – dijo Ryhuo

– Aurora – dijo Damián preocupado

– No te preocupes... Damián... además... me alegra de que tu... estés bien – dijo Aurora con un tono de voz débil y Damián la abrazo

– ¡Idiota! ¡Cómo se te ocurre hacer algo tan estúpido! – dijo Damián empezando a llorar

– Tú siempre... haces cosas estúpidas por mí... Damián... - dijo Aurora en un susurro para después caer desmayada

– no, Aurora, por favor responde, Aurora – dijo Damián moviéndola y comenzó a llorar– Aurora – susurro y la abrazo – ¡Aurora...!

– Aurora – pensó Miguel y el fuego de Acuario se apago

Entonces aparecieron Agatha, Aldebarán, Evan (quien cargaba a Leónidas) y Abel, se detuvieron sorprendidos

– Athena – susurro Agatha y la rosa blanca seguía tiñéndose roja y comenzó a llorar

– Adara, ¿Qué hiciste? – dijo Evan y Adara también comenzó a llorar

– Caballeros, no servirá de nada llorar, - dijo Abel

– Tenemos que ir a la cámara del patriarca para derrotarlo – dijo Aldebarán con rabia

– Derrotarme, pero que ingenuo eres Tauro – dijo una voz

– Esa voz – pensó Miguel – patriarca – dijo y se levanto

– Maldito – dijo Damián

– (risa) no permitiré que pasen por esta casa – dijo la voz del patriarca

De repente, aparecieron de entre las sombras espectros de Hades

– ¡Pero que...! – dijo Miguel

– Je, je, je – rio un espectro – mataremos a Athena, ahora que esta indefensa

– Crees que lo permitiremos – dijo Aron y todos se colocaron en guardia

– Damián, Miguel, vallan a la recamara del patriarca, no queda mucho tiempo – dijo Abel