Imaginas (Spencer Reid)

Primera cita

N/A: Dedicado a princessarmy060704. Este imagina será narrado en tercera persona. Voten y comenten. Las amo con todo mi cora ❤. Un poquito tarde lo se, pronto tendran un nuevo capitulo, me despido,nos leemos pronto

Estaba el equipo en el jet, regresaban de un caso, todos dormían menos Reid, estaba sentado observando a una de sus mejores amigas Nora, la cual tuvo un enfrentamiento con el ignoto. La apuñaló en la pierna, y cuando estaba por degollarla, la bala de Spencer le dio entre las cejas.

Luego de un rato notó que Nora se comenzaba a sacudir en su asiento y susurraba cosas como las que el doctor le escuchó decir, era como si estuviera suplicando.

-Nora- la llamo el genio, la sacudió levemente haciendo que la pelirroja abriera sus ojos verdes- ¿Estas bien?- pregunto, ella solo asintió y se puso a llorar en silencio.

-Creí que iba a morir-susurro ella- pero tu me salvaste.

-Bueno eres mi mejor amiga- le dijo él- jamas dejaré que algo malo te pase.

"Eres mi mejor amiga", esas palabras la hicieron sentir vacia, desde que llego a la UAC (hace un año) soñaba con dejar de ser solo la mejor amiga del doctor.

-Gracias Spence- le dijo con una sonrisa un poco forzada- eres como el hermano que nunca tuve.

"Eres como el hermano que nunca tuve", esas palabras, si bien no quería admitirlo, le dolían. La pelirroja solo lo veía de la misma forma en que él veía Morgan, como a su hermano mayor, quería cambiar las cosas, dejar de decir que ella solo es su mejor amiga, pero no sabia como cambiar las cosas.

Cuando llegaron a Virginia todos se fueron en sus autos, menos Nora y Reid, hací que decidieron ir juntos hasta la estación de metro.

-Nora- el genio llamo su atención-¿Te gustaría salir el sábado con migo?

-Me encantaría- sonrió la pelirroja.

-Genial- dijo él- pasare por ti a las tres.

-Entonces nos vemos a las tres.

Ninguno dijo nada, estaban emocionados, Spencer creyó nunca tener el valor de pedirle a Nora una cita. Nora estaba feliz, el genio de la UAC le pidió una cita, a ella, el ser humanos más friki del mundo, en definitiva ni dejaría pasar esta oportunidad.

Era el día de la cita, Nora se había puesto un vestido negro, ajustado, el cual le combinaba a la perfección con su cabello. Faltaban 5 minutos para que el doctor llegara a la casa. Tocaron el timbre mientras arreglaba su arma (en caso de emergencia) y su identificación en su bolso.

Estaba por abrir la puerta, pero fue abierta con fuerza de una patada, entro un tipo encapuchado con un cuchillo en mano...

Spencer estaba por llegar a la casa de su ¿Cita?, se le hacia raro el termino, seria la primera vez que salia con una chica, la primera vez que no lo rechazaban. Le compró a Nora un ramo de rosas blancas, las favoritas de Nora. Pero al llegar a su casa, vio la puerta abierta, lo cual le pareció raro, pero lo alerto que la puerta tenia marcas como si la hubieran forzado.

Llamo al equipo, le dijeron que se quedara donde estaba, que no hiciera nada. Pero su compañera de equipo, su amiga, la chica que desde hace mucho tiempo le quitaba el sueño. No dudó en entrar a la casa, vio la bolsa de Nora tirada en el suelo, sabia que ella siempre llevaba su arma en la bolsa, cuando sacó el arma se dispuso a examinar el lugar, siguió el desorden hasta el baño de la casa, abrió la puerta y vio a un hombre sumergiendo a alguien en la bañera.

-Déjela en paz- dijo Spencer con voz grave, apuntando con determinación el arma.

-¿O qué?- lo retó una fría voz.

-Somos del FBI- anunció Spencer con determinación- te encerraran por intento de asesinato a un agente federal.

El hombre sacó a la pelirroja de la bañera, estaba inconsciente, lo más probable era que no respirara. El agresor sujetaba firmemente un cuchillo junto al cuello de Nora. El doctor disparó el arma, la bala dio entre las cejas de aquel hombre.

Lo más rápido que pudo, Spencer se arrodillo junto a su compañera, intentó hacer que ella expulsara el agua por sus pulmones.

Nora tosió el agua que le impedía respirar, Spencer la abrazó con todas sus fuerzas, como si fuera lo más valioso en su vida, y en cierta forma lo era.

-Te suplico que no vuelvas a hacer esto- dijo el castaño entre lagrimas- no soportaría la idea de perderte.

-Tranquilo Spencer- lo tranquilizo Nora- estoy bien- se perdieron en la mirada del otro.

Los miembros del equipo entraron sigilosamente a la escena, parecía de esas que salen en las películas, muy románticas, si no fuera por el cadáver claro.

El doctor, sin darse cuenta de la presencia de su equipo, acerco sus labios a los de ella, fue un beso breve y tierno, al separarse la pelirroja volvió a unir sus labios en un beso igual de tierno pero más largo.

-Spence- J.J los hizo caer en la cuenta de que todo el equipo estaba ahí- ¡O por Dios!, se ven tan tiernos.

-La ambulancia esta afuera- dijo Hotch.

Al salir llegar a la puerta de la casa, Nora encuentra un hermoso ramo de rosas blancas. Spencer sonrió con pena.

-Te lo había traído- dijo el genio con algo de vergüenza- pero al ver el pequeño desastre en tu casa me asuste y se me callo- la pelirroja lo abrazo.

-Es hermoso- el doctor suspiro aliviado- lamento lo que paso.

-Hey, mírame- Spencer tomo a Nora suavemente de los hombros- no fue tu culpa, lo importante es que ahora tu estés bien.

-¿Y lo de nuestra cita?- pregunto ella tímida.

-Aun sigue en pie- dijo el sonriendo con ternura- tal vez cuando te den los paramedicos terminen de revisarte, podemos reanudar nuestra cita.

Ese día fue un día maravilloso para ambos, un día que ellos nunca olvidaran. Fueron a una cafetería y luego al cine, Spencer creyó que quizás Nora no querría dormir en su casa, por lo cual la invito a quedarse en su casa. Ese seria un día memorable para ambos, para el doctor fue un día en el que casi pierde a la mujer de su vida, otra vez. Y para Nora se convirtió en un día, una historia que siempre le repite a sus hijos de como comenzó la relación entre ella y su actual esposo.