Cap. 25

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Jinyoung

Recostado en las piernas de mi gyeomie, acariciaba su mejilla mientras sonreíamos. Una pequeña flor rosada danzaba con el aire mientras caía, alcancé a tomarla, la miré un momento...

—Es perfecta.

La coloqué en la oreja de gyeomie, adornaba bien su rostro. Entrelazamos nuestras manos.

—Que lindo te ves, cariño...

Acarició delicadamente mis manos y negó.

—Tu eres más lindo.

Se acercó y me plantó un tierno beso en los labios, que gustoso correspondí.

No dejaba de mirarlo, pensaba, él es la mejor decisión que he tomado en la vida.

Me preguntaba, ¿cómo me enamoré de él?
¿Cómo con un simple tacto me estremece?
¿Cómo con una simple mirada, hace que delirie?
La manera en como estando a su lado me siento completo, mi pieza...
Un completo, mi polo opuesto.

—Te amo.

Ví pronunciar aquellas palabras en cámara lenta, disfrutaba tanto de esas palabras que formaban una gloriosa melodía para mis oídos.

Su tacto cariñoso entre mis manos.
Yo jugaba con su anillo tal cual gatito curioso, me encanta la forma en la que ese anillo reluce en su piel.

Sus finos cabellos, tan sedosos y con su brillo especial, elevaban con la suave brisa. Las hojas del árbol gigante vibraban provocando un relajante sonido.

—Prométeme siempre estar así, ¿siempre me amarás?

—Siempre...

Tomó mi mentón, lentamente se comenzó a acercar, bajé la guardia comenzando a cerrar mis ojos disfrutando del dulce roce de nuestros labios, escuchando nuestros corazones desbocados, moviéndose a un ritmo complementario. Ambos se combinaban perfectamente, encajaban tal cual pieza de rompecabeza.

Nos separamos y me perdí en cuan  perfectos ojos delineados.

—Te amo gyeomie.

Aún no me cansaba de ver su reacción, las mejillas se inflan tomando un ligero rubor, un brillo especial en sus ojos, mientras ladea la cabeza. Muy tierno en verdad...

Me levanté para luego sentarme en sus piernas y acurrucarme en su amplio pecho, escuchaba sus latidos, sus brazos me rodearon.
Protegido, es como estoy ahora, entre su calor y ternura.

Con decir que el tiempo pasó volando, ya era medio día.

—Gatito...

—¿mmmm?

—¿Sabes?, Siempre he estado enamorado de tí, llegaba a pensar... Que nunca te podría tener.
Pero ahora, tú estás conmigo. Eso, es todo lo que yo podría pedir para ser feliz. Tú y yo...

Lo abracé fuerte, él hizo lo mismo. Adoro esos momentos en los que estamos así, puedo ser cursi, también él.

—Gyeomie, sabes que antes era un cobarde, tenía miedo de lo que me hacías sentir... Si hay algo de lo que nunca me arrepentiré, es estar contigo. Ahora y siempre, gyeomie...

Escuchaba sus agitados latidos, no quería separarme de él...

—Yo tampoco, gatito...

Besó mi frente y sonreí tímido, creo que ya es hora de la fase dos. Me levanté de sus piernas, le dí mi mano, esperaba a que él la tomara. Así lo hizo.

—Vamos gyeomie, acompáñame...

Caminamos tomados de la mano. Después de un rato, estábamos enfrente de la sala para ensayos de la empresa.

—Gatito, ¿que hacemos aquí? —habló entre risas—

—Bueno, pensaba bailar...Contigo...

Tenía un sonrojo, gyeomie me dedico una de sus miradas tiernas que solo eran dignas de él.

—¿Es enserio?, ¡No sabes cuánto había esperado esto!

Sonrió y luego me robó un beso en los labios, sólo reí bajito por esto. Fuí a poner algo de música, al principio hicimos una batalla de baile, él empezó, me retó y yo seguí.

Combinaba algunos pasos de nuestras coreografías, todo de acuerdo al ritmo de la música. Llegó el turno de yugyeom, era impresionante ver cómo se movía tan rápido, la manera en como se coordina y la agilidad de sus pasos mezclados con la música.

Los pasos se intensificaban cada vez más, sentía que me quedaba sin oxígeno por la adrenalina, bailar con él es hermoso...

Habían pequeñas gotas de sudor en nuestras frentes, nuestros cabellos algo revueltos y sonrisas, no nos cansabamos de hacer esto.

Al final, caí rendido en el suelo mientras reía, me divertí bastante. Como era de esperarse, yugyeom ganó esta batalla.

Me ayudó a levantarme, de pronto la música se volvió muy romántica, por lo que me miró cómplice.
Sujetó ambas manos apegandome a él. Lo miré curioso.

—¿Qué intentas hacer?

—Shhh... —dijo mientras ponía un dedo sobre mis labios—

Me tomó de la cintura, lo tomé del hombro algo dudoso, el comenzó con una balada, yo sólo le seguía el paso y reía por sus ocurrencias.

Recostó su mentón en mi hombro y empezó a cantar para mí, "see the light", canción que él había compuesto. Mientras lo escuchaba toda mi piel se erizaba, también recosté mi mentón en su hombro, cerré mis ojos dejando que su melodía y movimientos me guíasen.

Seguimos así por un buen tiempo, no quería separarme de él. Hasta que alguien nos interrumpió.

—Vaya, así que aquí estaban... Jinyoung, te busca bambam.

Lo miré y era mark que se acercaba con una gran sonrisa al mismo tiempo que me guiñaba un ojo. Nuevamente busqué la mirada de gyeomie, él asintió y salí de la sala para ver a bambam, dejando a esos dos solos.

Últimamente andaban muy raros, ellos y los otros dos.

Salí buscando con la mirada a bambam, estaba sentado en una de las bancas, jugando con su celular. Caminé hasta él y tomé asiento a su lado.

—Jin, lamento haberte interrumpido, pero, ¡¿adivina que?! —habló emocionado—

—No te preocupes, dime, ¿de qué se trata? —pregunté intrigado—

—Ya tengo listas tus reservaciones, justo como tú las querías y, ¡ah!, Es en tres días.

—¿Tan pronto?

—¡Yeah!, Ahora, piensa con que excusa lo llevarás hasta ahí. —sonrió coqueto—

—Eso es lo más fácil, bambam. —sonreí— gracias, enserio. No sé lo que haría sin tí... ¿y Jackson?

—Él fué a arreglar las demás cosas para tu viaje, no te preocupes.

—Gracias a los dos, son como mis hijos. —dije un poco nostálgico—

—Sólo has feliz a Yugyeom, ¿sí?

—No lo dudes bambie... —acaricié sus cabellos y sonreímos—

Me dirigía de nuevo a la sala, sólo espero que no se hayan matado...






















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Hola, es algo corto pero bueno... Pronto habrá actualización, o eso espero. ¡gracias! ❤

"Polos opuestos" (JinGyeom) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora