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Capítulo 5: Cita

- Laura...- Llamó Maia, pero su amiga aun estaba sumida en sus pensamientos, incluso se le notaba una tenue y boba sonrisa - ¡Laura! - Dijo elevando su voz mientras sacudía su mano frente al rostro de la chica que despertó repentinamente de su letargo.

- ¡Que! ¡Que pasa!

Maia frunció el ceño y resopló poniendo los brazos en jarra, se estaba comenzando a preocupar, Laura llevaba todo el día ajena a la realidad, como si estuviera en una especie de trance o algo así, ni siquiera estaba hablando tanto como acostumbraba en los recesos y tenía su jugo favorito intacto - ¿Podrías aterrizar? Has estado todo el día así...

- Oh...- Laura bajo la mirada avergonzada, tomando un pequeño sorbo de jugo – Discúlpame, me distraje un poco...decías que tu abuela viene a visitarte la semana próxima ¿no es así?

Maia volteo los ojos – No, Laura, eso lo dije hace como 10 minutos, ¡por dios! – Se sentó en la banca y mordió su emparedado. La otra la miró sintiéndose culpable, se acercó a ella y la tomó del brazo.

- ¡Lo siento! Pero sabes muy bien la razón por la que estoy así Maia!

- ¡Si lo sé! – Contesto recordando la agonía de Laura durante toda la semana para que llegara ese día – Hoy es tu tan esperada cita con Bradley Simpson.

Con un fuerte y efusivo asentimiento de cabeza Laura confirmó, luego se puso ambas manos en las mejillas y enterneció el rostro al imaginarse junto al joven en el cine – Apenas puedo creerlo, se que hoy vas a ser el día en que...

- Le quitaras la virginidad a tu boca – Termino Maia mirando desinteresadamente al frente, Laura reaccionó alterada al instante.

- ¡Maia! ¡No lo digas así! – Gritó abochornada dándole un pequeño golpecito con el puño a la chica, que comenzó a soltar carcajadas.

- Pero eso es lo que ocurrirá... ¿o no?

Laura dejó de golpearla y se quedó con la vista perdida un instante, pensando en lo que su amiga le había preguntado, sentía un molesto cosquilleo en el estómago – Ehh...eso espero...pero...- Miró a Maia con preocupación - ¿No crees que sería demasiado rápido? No sé si es correcto besar en la primera cita...

- Pf, no seas tonta – Contrarresto Maia encogiéndose de hombros – Tu estás loca por él y él por ti, se gustan, así que no hay problema.

"¿Loco por mi?" Se preguntó Laura internamente. Si era verdad que Brad se mostraba interesado y especialmente amable, pero de ahí a que estuviera "loco por ella"...ojalá que los sentimientos hacia el fueran verdaderamente reales.

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El pequeño Elton subió las escaleras y sin tocar abrió la puerta y entró corriendo, presintiendo que su hermana le llamaría "revoltoso" pero no dándole mucha importancia – Hermana, mamá dice que...- Se detuvo mirando perplejo la habitación. Había ropa por todos lados, la cama estaba repleta y la cómoda con todos sus cajones abiertos, parecía un verdadero desorden. Las puertas del armario se encontraban abiertas de par en par, y desde ahí se asomó la cabeza de Laura.

- Hola Elt...

- ¿Que paso aquí? – Preguntó saltando entre la ropa hasta llegar a la cama y sentarse observando a su hermana que aun revolvía el armario.

- Voy a tener una cita – Respondió Laura casi cantando. Elton abrió los ojos y por un instante tuvo el impulso de preguntarle si era con Ross, pero recordó lo que había dicho anteriormente así que no eran muchas las posibilidades.

A través de mi ventana |Raura|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora