Cap 1 Bienvenido a Horrortale

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Era un nuevo día en el subsuelo. La tenue luz de la mañana empezaba a asomarse por el pequeño pueblo de Snowdin, que poco a poco empezaba a despertarse para ser el pueblo animado de siempre. Pero no estoy hablando de cualquier Snowdin, o no. Me refiero al Snowdin de Underlust.

Lust se encontraba durmiendo cómodamente en su cama, tapado completamente con su manta morada, mientras la luz de la mañana se hacía presente en la habitación a través de la ventana.

-Mmmm...- Lust se dio la vuelta en la cama, hundiendo su cabeza en la almohada, deseando poder dormir un poco más. Por desgracia unos ruidos procedentes del exterior le despertó. Ya habían algunos monstruos por las andadas.

-Aún es muy temprano...- Lust se quitó la manta de la cabeza mientras se sentaba, tallándose sus cuencas con las manos para quitar el sueño.

Miró adormilado hacia la ventana, ya estaba completamente de día. En menos de cinco minutos ya había amanecido. Con flojera se levantó de su cama, sintiendo el tacto frío del suelo con sus pies, despertandolo un poco más. Se dirigió hacia su puerta y la abrió.

Fue directo al baño, deseando mojarse la cara con un poco de agua fría para despejarse. Al estar completamente despierto se fue a su habitación para cambiarse. Se quitó su pijama y se puso su típica ropa diaria: su camiseta de tirantes negro con un estampado de corazón, y por encima llevaba su chaleco morado con plumas verdes fluerescentes alrededor de su cuello, y unos short negros con sus botas, su ropa cotidiana.

Arregló su cama (se le hizo costumbre arreglarla después del pequeño regaño que le echó su hermano hace unos años) y guardó su pijama en su armario. Curiosamente era un pijama muy "normalito", el típico pijama morado a rayas blancas y con botones en la camisa, bastante... simple para tratarse de Lust. Pero él no lo entendía. No porque viviese en un mundo de pura lujuria tenía que estar siempre vestido así, también le gustaba lo no provocativo.

Bajó las escaleras en camino a la cocina para cocinarse el desayuno, pero se encontró con una sorpresa. Encima de la mesa había un plato con dos tortitas con sirope por encima y con frambuesas, un vaso de leche con chocolate y lo que parecía un pequeño bol con cereales. Encima de la silla había una nota. Curioso se acercó para leerla. Era una nota de su hermano.

"Sans, hoy tengo que salir temprano, antes de que amanezca, para ayudar a Metatton con unas cosas muy importantes y, después, a una cita que ha organizado en un lugar apartado para tener un poco de tranquilidad.

Lo siento mucho hermano, de verdad, ni siquiera pude venir anoche para decirte 'buenas noches' como siempre. Pero, para compensarte, te hice el desayuno, para ganarme tu perdón. ¿Me perdonas? Y cuando vuelva esta noche, te traeré una sorpresa.

Lo siento de veras Sansy, pero esto de verdad es importante.

Pero estoy seguro de que te divertiras, ¿a que sí?

Nos vemos esta noche, Sansy~

Papyrus."

Lust dejó la carta encima de la mesa, para nada estaba enfadado, era normal estar así, sobre todo desde que su hermano y Metatton salían juntos. Hacían buena pareja la verdad, eran prácticamente la única pareja de Underlust.

Se sentó en la mesa a desayunar, comiendo con grandes bocados las tortitas que le hizo su hermano. A decir verdad le ponía incómodo el silencio del salón, no estaba acostumbrado a esas mañanas silenciosas, sino a esas mañanas animadas hablando tranquilamente con su hermano.

Una vez lavado los platos salió a la calle. Empezó a hablar por aquel pueblo cubierto de nieve de siempre, viendo a los animados monstruos andando por el pueblo y otros hablando o haciendo...otras cosas.

Quédate a mi lado (HorrorLust)// Donde viven las historias. Descúbrelo ahora