Enamorandome De Ti.

-3-

-¿Jun?- Pregunto con cierto tono ilusionado.

-Oh, Yuni... ¿Ya te vas?

Auch... Lo olvidó, Jun pidió el departamento y con aquellas palabras lastimo en sobre manera a Yuni.

-S-si... Me voy.

No se molesto en tomar su teléfono y salió de aquel lugar, una vez fuera del departamento corrió, tan rápido y tan lejos como su cuerpo se lo permitió, corrió y corrió, hasta que llegó a un pequeño lago, dejándose caer de rodillas y soltando un pequeño sonido por el dolor, sin embargo no lloro, correr le ayudo.

De un momento a otro sintió como alguien la abrazaba, abrió sus ojos encontrándose a Hoshi y vagamente pensó que debía ser un ángel.

-Él ni siquiera lo noto, no vio mi cambio.- Dijo con voz ahogada.

Hoshi no respondió, se limito a abrazarla con más fuerza, le dolía, con Yuni podría decirse que fue hermandad a primera vista, sentía la necesidad de cuidarla y ayudarla a ser feliz, pero rayos, ¿por qué Jun debía ser tan ciego?

Claro que no era casualidad que él estuviera ahí, la vio salir de su edificio y preocupado decidió seguirla.

-¿Por qué corriste tanto?

Hasta ese momento Yuni noto que Hoshi estaba algo agitado.

-Cuando era pequeña mi abuela me dijo que si estaba triste corriera lo más rápido y lejos que pudiera, así dejaría atrás la tristeza y todo estaría bien.- Explicó.

-Oh... Interesante el consejo de tu abuela.

Yuni se soltó a reír y Hoshi le siguió.

Después de un largo rato y de sentirse lo suficientemente lista, se dirigieron a los departamentos, tardando mucho ya que Yuni en verdad corrió mucho, una vez fuera de su edificio Hoshi abrazo fuertemente a Yuni, le dio muchos besos en su frente y le sonrío de manera cálida, buscando dar apoyo con esos actos. Y así, Yuni entro a casa.

Entro y vio como había un desorden en casa y decidió cerrar los ojos para ignorarlo mejor. Arrojo las llaves del departamento sobre una pequeña mesa que se encontraba en medio de la sala y entro a su cuarto.

Ignorando en todo momento el hecho de que Jun la observaba desde la puerta de su habitación algo confundido, ¿quién es el chico con el que se abrazaba antes de entrar a casa? Pero, una vez más, Jun sacudió su cabeza, le resto importancia y se dispuso a dormir.

...

Respiro hondo y una vez más trato de poner atención a la clase, sin embargo, no lo logro, ¿qué pasa? Ni él mismo lo sabe, despertó de malhumor y no logra concentrarse en clase.

-Bien chicos, nos vemos mañana.

¡Por fin! Comenzaba a idear formas de tortura para el maestro, aunque él no tuviese la culpa de su repentino malhumor.
Salió y como de costumbre busco a Yuni con la mirada, encontrándose con...

-¿Dónde está?- Se preguntó a sí mismo.

Un pequeño tic apareció en su ceja, pero le ignoro y se dirigió a la cafetería, una vez dentro la busco, encontrándola con...

¿Quién es ese?

Una vez más sintió su ceja temblar, llevo su mano a esta y la presiono un poco, apretó los labios, bajo su mano y se repitió mentalmente que daba igual, se acerco y espero ser notado por Yuni, que por la forma en que reía parecía estar teniendo un buen día.

-Oh, buenos días Jun.- Dijo Yuni sonriente.

-Hola...

-Oh, hola hyung.- Dijo Hoshi sonriente.

-¿Eres?

-Hoshi.- Dijo con sonrisa amable.

Jun se limito a alzar su ceja, es no podía ser su nombre.

-Oh, lo siento.- Río al notar lo que dijo. –Soy Kwon Soon-young, soy el novio de Yuni.- Dijo con una sonrisilla.

¿Qué? Hahaha, ¿qué? Pensó Jun.

-Oppa.- Dijo Yuni riendo.

-Emh...

-Solo bromeo hyung, tranquilo.

Una vez más ese tic, debe estar sufriendo de mucho estrés.

-Oh.

-¿Vas a comer?

-Mmmm, no... Debo irme temprano, haré algo importante.

-Ah... Está bien.- Dijo Yuni perdiendo el brillo en su rostro.

Hoshi noto la expresión en el rostro de Yuni y tomo su mano bajo la mesa, apretándola de forma reconfortante, sin embargo Jun noto aquel gesto y no pudo evitar fruncir el ceño y presentar aquel tic y claro que Hoshi lo noto.

Parece que puedo presionar con celos, pensó un travieso Hoshi.

-Bien, me voy.

Y así Jun dejo a aquellos dos.

El resto de las clases Hoshi procuro que Yuni no pensara en nada que le pusiera triste y de algún modo lo logro.

Terminaron las clases y como ya era costumbre, Hoshi acompaño a Yuni, no sin antes pasar por un helado para endulzar su tarde. Así llegaron al edificio y comenzaron a despedirse, Hoshi abrazo a Yuni con cariño y repartió besos por sus manos, sacando risas a la chica.

Jun que se encontraba viendo por la ventana de su departamento volvió a sentir aquel tic.

-Debo hacer algo con mi estrés, quizá necesite dormir mejor.- Se dijo a sí mismo.

-Ya llegue.- Anuncio Yuni.

-Tardaste un poco, ¿paso algo?

-Mm, no, solo pase por un helado con Hoshi oppa.

-Oppa, oppa.- Susurro casi sin notarlo Jun.

Y aquel día Jun decidió que Hoshi no le agradaba.