El Inicio del final

Prólogo

Presente

Suena un móvil.

Dice la voz de una chica en la línea telefónica— Nena, ¿ya llegaste?

— Hola Moni, aun no. Vengó en camino, tardare un poco más en llegar —responde la chica que recibe la llamada.

— Debí haberte acompañado — dice la chica detrás del móvil un poco arrepentida.

— Nada de eso, tienes que reposar. Aun no cumples ni el mes de haber tenido al pequeño Rayan. Más bien lo siento, por no estar contigo.

— Tienes razón, pero aun así.

— Prometo que cuando vuelva estaré pegada a ti.

— ¿Asi? ¿Vas a estar ahí, hasta cuando tenga que hacer del baño?

— Sí como chicle. Si es necesario te limpio —afirma.

— No seas tan extremista — ríe— Me avisas cuando llegues, te quiero nena.

— Gracias Moni, nos vemos.

La chica que recibió la llamada, cuelga.

Guarda su móvil en la mochila que lleva en sus piernas. La cierra y la acomoda en el asiento de alado, donde se encuentra una caja mediana de madera. Y solo vuelve a mirar por la ventana del autobús, como va dejando atrás el inmenso desierto, que tiene uno que otro matorral, esperando a llegar a su destino.

...