Ways To See It

#1

-Chris, ¿Quieres dejar de llorar ya?.- Digo meciendo a mi pequeño hermano intentando por segunda vez en la tarde que se duerma. Es un niño muy bueno, pero cuando le da por llorar, lograr callarlo es algo prácticamente imposible.

-¡Haz que esa bestia se calle de una maldita vez!.- Chilla May escondiendo su cabeza bajo uno de los cojines del sofá.

-"Esa bestia" es tu hermano, May. No lo llames así.- La reprendo y ella me mira poniendo los ojos en blanco.

-Al, sabes que no lo digo en serio, solo que...- Es interrumpida por un nuevo chillido de Chris que parece incluso más nervioso y yo estoy empezando a exasperarme.- Eso. Sus pequeños gritos perforan mis tímpanos y soy demasiado joven para quedar sorda.-

Ahora soy yo quien pone los ojos en blanco y es que May a veces es imposible de tratar. Ella es mi otra hermana menor. Ahora tiene 17 y está en esa etapa en la que solo entiende de chicos, maquillaje, música y redes sociales.

Ya sabéis.

Ella muchas veces dice que soy demasiado aburrida para mi edad. Que me estoy perdiendo el mundo por una estupidez, pero para mí es una pequeña inmadura que no sabe de lo que habla.

Seguro que ahora mismo hay alguien que está pensando que no quiero a mi hermana o algo parecido pero no penséis eso. De verdad que la quiero muchísimo porque es mi pequeña hermanita. Solo que su mente de 17 años no entiende la situación en la que me encuentro ahora mismo.

-¿Recuerdas a Danny?.- Me pregunta de la nada mientras teclea en su móvil.

-¿Tu amigo?.- Ella asiente.- Si, claro.-

-Me pidió que fuera su novia.- Le sonríe al teléfono y después me mira.-Fue muy lindo.-

-¿Y qué le dijiste?.- Pregunto aún meciendo a Christian.

-Obviamente que no.- Se ríe.- Nos conocemos desde que íbamos a la guardería. Sería muy incómodo.- Se encoge de hombros.

-¿Pero no te gusta ni un poco?.- Le pregunto aunque claramente ya sé la respuesta.

-S-No. No. Creo, no sé.- Suspira.- Creo que estoy algo confusa porque se me haya declarado, ¿Sabes?.- Mira a un punto fijo en el techo.

-Seguramente es eso.- Digo recostando a Christian sobre la pequeña cunita que tenemos en el salón. Una vez que compruebo que todo va bien con el pequeño me giro hacia mi otra hermana.- May. Te gusta ese chico desde que estabas en la escuela y lo sabes. No sé porqué intentas taparlo u olvidarlo con otros chicos.-

Ella vuelve a suspirar.

Si sigue así nos va a dejar sin aire a todos.

-Ya lo sé Al. Pero no sé. Es que... tú sabes bien cómo soy yo de abierta y expresiva. Pero cuando estoy con él es como que me reprime. Pero en el buen sentido; como que no quiero hacer bromas ni nada parecido por miedo a qué piense algo malo sobre mí.- Concluye.

-May. Tu misma lo has dicho. Se conocen desde la guardería. Creo que hay confianza para eso y para más.- Ella me mira incrédula con las mejillas teñidas de rosa.- Pero siempre con protección, ¿eh?. Que sino después tendrás que cuidar a tu propia bestia.-

-No, creo que ya me ha quedado todo muy claro.- Dice rápidamente levantándose del sofá dejándome a mí riendo sola.

°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•

-Alice.- Oigo que me llama mi madre.- ¡Alice!.-

Suspiro abatida y ruedo los ojos. Dejo mi móvil sobre la colcha y me levanto pesadamente de la cama.

Es la séptima vez (sin exagerar) que mi madre me llama para que haga "mis tareas del hogar".

En cuanto bajo veo que ella está algo agobiada con Chris porque éste no para de corretear de un lado para otro y tirar y destruir todo a su paso.

-¿Qué ocurre?.- La miro.

-La pregunta es qué no ocurre en esta casa.- Suspira colocando uno de los miles de juguetes en su correspondiente caja de juegos.-¿Podrías ir haciendo la cena?. No creo que me dé tiempo si lo tengo que hacer yo todo.-

Yo me limito a morderme la lengua para no responder algo indebido porque siempre es igual. Ella y su obsesión de decir que nunca la ayudamos en nada, que si ella está cansada también.

En fin.

Seguro que sabéis a lo que me refiero.

Me dirijo a la cocina y de mala gana empiezo a sacar los ingredientes para hacer una ensalada rápida.

Y es que ¿Qué esperabais?, ¿Que haría un plato como esos que salen en Top Chef?.

Que poco me conocéis.

Mientras estoy cortando todos los ingredientes mi padre llega a casa con su característico chillido de: "¡Buenos días!".

Si os estáis preguntando porqué dice eso cuando es casi de noche la verdad es que no lo sé. Supongo que es por el hecho de que trabaja como piloto de aviones y muchas veces se levanta tan temprano que ni siquiera nos enteramos de que se ha ido. O eso o que ya ha perdido la cuenta de las horas. Imagino que es su manera de saludarnos.

Tarde pero saludarnos al fin y al cabo.

-Hola Al.- Dice dejando un beso en mi mejilla.-¿Mamá?.-

Hago un ademán con mi cabeza señalando al salón y él se limita a ir quitándose ropa para estar más cómodo. En cuanto llega escucho como papá habla algo con Christian que aunque casi no sabe hablar sabe decir algunas palabras aleatorias. Cabe decir que su primera palabra fue "Ali". (Casi me lo como cuando lo escuché decirlo).

En cuanto acabo de "cocinar" y estoy guardando la ensalada en la nevera May baja las escaleras maquillada, con tacones y con un vestido muy por encima de la rodilla.

-¿Vas a salir?.- Pregunta mi madre mirándola de arriba a abajo.

-Si. Si me dais el permiso, si.- Contesta ella mirándolos en orden a cada uno.

-Claro que si. Ten cuidado y no bebas mucho.- Se limita a decir antes de que mi padre pueda replicar nada. May lo mira y éste se encoge de hombros rendido ante la situación. Mi madre sigue dándole la cena a Chris. Pero en un arrebato de histeria o algo así mi hermano tira la comida lanzándola por los aires.

-¡Chris!.- Chilla mi madre.- Eso no se hace.- Mi padre y mi pequeño hermano se limitan a reír. Mi madre suspira mirándolos mal a los dos y se levanta dirigiéndose hacia la cocina en donde yo ahora los miro desde la barra de desayuno. En el camino mi madre intercambia unas palabras con May que ahora está poniéndose el abrigo para salir con algunos de los cientos de sus amigos.

-¡Hasta mañana mis amores!.- Dice despidiéndose por última vez. Chris mueve su pequeña manita junto con mi padre y mi madre está a mi lado intentando limpiar el estropicio que creó Chris con la comida. Parece que le está costando limpiarla porque después de al rededor de dos minutos sigue intentando frotar.

-¿Quieres que te ayude?.-

-¿Porqué no puedes ser cómo ella Alice?.- De repente me mira y hace una pausa.- Os lo hemos dado todo en la vida y mira la diferencia que hay entre ustedes dos. Pensé que ibas a llegar a ser una gran profesional pero mira en lo que te has convertido.-