Faking it.

Capítulo 4. Ninguna queja... Hasta ahora

Estar aquí es horrible.

Empezando con que Lena definitivamente me odia. Al día siguiente de mi "pequeño accidente" me enteré que ella había sido la culpable, alguien la vio cerrando la puerta, después de eso, ya casi no suelo verla por ahí, Margaret debió ponerle algo muy feo; pero por eso ella me quito todo tipo de castigo. Como tres días después, estuvo golpeando mi puerta y gritandome como loca, culpándome de lo que le había pasado a su cabello. Su gran tono azul, había pasado a ser un poco verdoso, y para mi, se veía como uno de los personajes de Monsters Inc; fue un poco difícil no reírme en su cara, incluso cuando Margaret me llamó para hablar de eso. Después de todo, no tenían ninguna prueba de que había sido mi culpa, y ahora ella tiene ese extraño color de cabello

Axel, definitivamente quiere volverme loca. De repente actúa muy amigable conmigo, un segundo después es todo despreciable y cinco más no puede ni verme. ¿Quién se cree? Llega, me dice que canto mal una de mis canciones favoritas, luego me besa y después actúa como si yo no fuera nada. Él definitivamente me está destrozando la vida. No lo quiero cerca de mi, he intentado preguntarle porque me besó ese día, pero él solo me ignora. Es arrogante, creído e impulsivo. A veces no soporto estar ni un segundo cerca de él, pero Harry ha sido una de las pocas personas con quien mejor me llevo, y ellos son mejores amigos, por lo que tengo que soportarlo...

Estoy dando demasiadas vueltas en mi cama, por alguna razón, no puedo conciliar el sueño. Estoy demasiado frustrada, me quito las sabanas y miro el techo, siento que ha pasado una eternidad cuando desvio la mirada al reloj que está junto a la cama, 2:56am. Cierro los ojos demasiado frustrada, necesito dormir...

Me siento en la cama y me acomodo un poco el cabello, me restriego la cara y miro por toda mi habitación, hasta que veo mi laptop en una esquina. Margaret me la dio ayer, pero no la utilicé, estuve todo el día dando vueltas con Liza porque Anna necesitaba algunos medicamentos y nos ofrecimos, llegué muy tarde y cansada y estuve durmiendo casi todo el día

Quizás es por eso que no puedo dormir ahora.

Me levanto de la cama y siento un escalofríos recorrerme la columna cuando mis pies tocan el frío piso, camino lentamente hasta agarrarla y me siento de nuevo en todo el medio de la cama. Enciendo la pequeña computadora y me voy directo a Skype, reviso mis contactos y voy hasta el único que me interesa, y medio bailo de felicidad sobre la cama al darme cuenta que Ed está despierto, no tengo ni idea de que hora debe ser en Washington. Presiono sobre su nombre y le doy a llamar, espero unos segundos pero él tranca la llamada, bufo algo molesta y vuelvo a llamar, ésta vez atiende. Está en una oficina y me sonríe de medio lado, con esa sonrisa que enamora a todas y que a mi solo me hace sentir como en casa

— Buenos días, Ash —dice con voz ronca, no creo que tenga mucho tiempo despierto

— No puedo dormir —murmuro 

— ¿Qué hora es?

— Deben ser las 3am —frunzo el ceño cuando lo veo beber de una taza, debe ser té, ese idiota es adicto al té— ¿Dónde se supone que estás? 

— Vine al trabajo de Angelo, mi primo, ¿Lo recuerdas?

— Sí, ¿Cómo olvidar al idiota que me enseñó a nadar empujándome a la piscina? —Ed frunce el ceño y vuelve a beber de su taza— ¿Cómo estás? ¿Qué has estado haciendo? Por favor no me digas que has visto Orange is the new black sin mi, por favor —hago un puchero y él se ríe

— Lo siento Ash, intente hacerlo... Pero fue imposible, no me resistí, te estás perdiendo de los mejores capítulos, y creo que vas a perderte toda la temporada...

— Justo ahora me siento como Piper —digo resentida

— ¿Cómo? —se inclina a la computadora y ahora tengo una vista únicamente de su cara— ¿Antes eras lesbiana y ahora tu ex novia está allá en Nueva Zelanda y está acosándote? —levanta una ceja en forma de pregunta— ¿Es ese el secreto que no quieres decirme y con el que tu hermana te chantajea?