Criaturas del zodiaco

Capítulo 5 - "Después de la clase"

Prim:

—¿Segura que te sientes bien?—Le preguntó su amiga de cabello violeta, Cassie bufó, pero le sonrió. La verdad es que se lo había preguntado unas quinientas veces, pero aún así, parecía que quería asegurarse.

—Sí, lo estoy, tranquilízate. Pero...¿Me van a contar qué pasó durante mi inconsciencia?—. Estábamos en la enfermería del instituto, la verdad es que era una manera formal de llamarla, porque los "remedios" se basaban en poderes o frascos de la bruja encargada, que vendría a ser "enfermera".

*Flashback*

No entendía qué le sucedía, estaba pálida como el papel y temblando, demasiado. Su respiración se sentía dificultosa, por lo que todos nos pusimos alerta. Miré al profesor, esperando que éste haga algo, pero se quedó en su lugar analizando la situación ¡¿Qué diablos les pasaba a todos?! 

Observé a mis compañeros, en busca de ayuda, hasta que mi mirada cayó en Aiden, quien miraba a Calixto fijamente. Desvié la vista hacia éste, quien se encontraba muy quieto y con la vista fija en la pared que daba hacia la otra habitación...¿Y si él...? No... Era raro, pero no un psicópata, o eso creía...

De un momento para otro, Calixto fue lanzado por una fuerza invisible hacia la pared que se encontraba detrás de él. Aiden, definitivamente él había sido. Cassandra, a su vez, parecía recuperar la consciencia. Los otros profesores al ver lo que sucedía se acercaron, uno de ellos, el que parecía más serio, se acercó a mi compañera y la sostuvo para evitar que ésta caiga, a la vez que observaba la situación con autentica preocupación. A su vez, una chica de cabello violeta se posicionaba al lado del profesor, preocupada.

—Búscate tu propia víctima,demonio. —Aiden le habló de una forma muy baja y lenta, pero lo oí. Calixto lo observó con furia disfrazada de indiferencia.

*Fin flashback*

—Entonces...¿Fue Calixto? ¿Ningún profesor lo detuvo?—Su rostro perturbado buscaba respuestas que podía darle, por falta de conocimiento.

—Es mi teoría, pero solo yo vi eso, todos estaban distraídos contigo. Si quieres, puedo hablar sobre lo que vi.—Ella lo pensó, pero negó con la cabeza. La observé confundida.

—No tienes pruebas y el íncubo no cuenta como testigo, porque no dirá nada, lo sé.—Parecía debatirse mentalmente—. Creo entender el porqué de la actitud de Calixto, hablaré con él.—La cara de su amiga se transformó.

—¡¿Es una puta broma?!—No lo negó—. A ese lo despedazaré vivo y se lo daré de comer a los cuervos, pero tú no hablarás con él, menos a solas, bajo ningún término.—Cassandra rodó los ojos.

— Sé lo que hago, pero si insistes, no lo haré.—Mentía, lo sabía, pero no dije nada. Me miró—. Gracias por preocuparte por mí, fue un buen gesto que me acompañes hasta aquí.—Le sonreí.

—Eres mi compañera, además hice caso a lo que mi interior me decía.—Ella me sonrió, a la vez que su amiga fingía toser mientras susurraba "Cursi". Reí, me agradaban.

(...)

Sack:

Luego de lo que había ocurrido con una chica, las clases habían finalizado y todos debíamos volver a nuestras casas. Busqué a Terca, esperando a que todavía siguiere en el instituto. La encontré, hablando de forma algo incómoda con un chico de nuestro grupo.

—...Está bien, entiendo que a veces es difícil controlar los impulsos, no debo ser la única a la que le has hecho algo parecido.—¿De qué hablaba?—. Pero no vuelvas a hacerlo.—Él asintió, mirándola fijamente.